Capítulo treinta y siete

2.3K 126 3
                                    

Jesús está tan guapo durmiendo, que no puedo dormir pensando que le tengo a mi lado. Aún su mano rodea la mía y está pegado todo lo que puede a mí. Hace tanto que no tengo a una persona al lado, que ahora agradezco que Jesús esté a mi lado, lo agradezco muchísimo.
Otra vez estoy en el intento de poder dormir, pero que va. No puedo concentrarme, no sé porqué.
Jesús se abraza más a mi cintura y sonrío, pf. Me muero de sueño y de calor, también me duele la cabeza.
Vaya mierda todo enserio.
Mi móvil comienza a sonar, ¿Quién cojones me llama a las seis de la mañana?
Miro quien es, ¿Carmen?, ¿Piensa que se lo voy a coger?, está loca.
Cuelgo la llamada y pongo el móvil boca abajo, que pesada es.
No quiero pensar en ella, pero cada vez que lo hago pienso en Jesús... Vuelvo a coger el móvil, tengo mensajes de Carmen, joder macho. Suspiro y leo los mensajes en el inicio del móvil, que cojines querrá esta ahora...

Carmen👅

"-Estás durmiendo con Jesús guarra?😏"
"-No quiero escuchar ningún ruido extraño que te tengo al lado😂"
"-Estáis borrachos por lo que he visto por la mirilla😕"
"- haz lo que quieras, ya te digo que Jesús no es de fiar"

¿Qué?, ¿Qué dice esta ahora?, menos mal que no le va a salir que lo he leído que si no me da por culo hasta que le conteste. Vuelvo a leer los mensajes dos, tres y cuatro veces más, no sé para que se mete en mi vida.

-Nena-Susurra Jesús con la voz ronca y bajo la mirada hacia él-Deja a Carmen anda, es gilipollas-Se ríe y enciende una de las luces que hay en la mesita de al lado.

Se apoya sobre su codo y arruga la nariz, me río y me saca la lengua. No he dormido absolutamente nada, pero nada de nada y creo que no lo voy a hacer. Jesús se acerca a mí y sonríe mientras se acerca a mis labios.

-Sólo mía-Susurra sonriendo y me muerdo el labio nerviosa-No hagas eso, me pone demasiado que lo hagas-Se ríe y creo que ahora mismo estoy roja-Oh venga ya, he vuelto a hacer que te sonrojes.

Me río y se ríe. Nos miramos y bajo la mirada hacia sus labios, va a parecer mentira lo que voy a decir ahora mismo pero tengo muchísimas ganas de besarle.
Sus labios rozan los míos y como siempre, él da el primer paso y creo que está harto de ello. Apoya su mano sobre mi cintura y poco a poco me hace caer en el colchón.
Los besos aumentan de tono y el calor aumenta demasiado diría yo.Sus manos se cuelan por mi camiseta y acaricia toda mi espalda y abdomen. No quiero que esto se vaya de las manos, no quiero llegar a ese punto que todos sabemos.

"Ya te digo que Jesús no es de fiar"

¿Y si es verdad?, ¿Y si no es de fiar?. No me voy a fiar de Carmen, quiere joderme lo sé. Sé que Jesús no es así, no está demostrando ser así.Jesús me mira, agarra mi cara y sonríe.

-¿Qué te pasa?-Pregunta Jesús acariciando mi mejilla y niego-Se te ha cambiado la cara completamente.

-No me pasa nada, sólo estoy cansada-Me río y él se ríe, estoy nerviosa, no sé mentir y seguramente acabe sacando el tema.

[...]

-Oh, buenos días-Dice Jesús con una risa y me río-¿Has dormido bien marmota?

-Bueno, si un pesado no me hubiese molestado hasta las siete y cuarto, hubiese dormido mejor-Me río y él cruza los brazos-Es broma.

Se vuelve a reír y coloca sus manos sobre mi cintura. Me besa sin previo aviso y sonríe a mitad del beso.

-Ahora si son buenos días nena-Susurra pasando un brazo por mis hombros y sonrío-Eres preciosa.

Cuéntame al oídoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora