Cap-56 (R)

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Ross

           

 

Miles de cuerpos se encontraban ante nosotros. Y no de cualquier manera.

 

Estaban todos tirados sobre el suelo formando montañas a cada lado y sobre todo muertos. Aquello parecía una masacre de mal gusto.

 

Aunque había poca luz se podía ver con perfección cada uno de los cuerpos, piernas, manos y cabezas deformadas.

 

Olía a podrido, sangre y muerte. Olía a descompuesto humano mezclado con un perfume que ni por asomo ocultaba la verdad.

 

Observe como Shao se acercaba a una de las montañas y atentamente observaba los cuerpos esparcidos. Desde mi posición podía ver perfectamente que no se trataba de personas, por lo menos en el aspecto. Eran iguales que los del túnel y la habitación anterior. Los mismos que estaban metidos en los tanques.

 

—Esto supera cualquier realidad.

 

—Están enfermos.

 

—Experimentan con ellos, luego los abren en canal y seguidamente los dejan pudrirse aquí- recordé el cuerpo del monstruo en la mesa abierto de arriba abajo.- ¿Qué clase de organización macabra es esta?

 

—Una en la que no me gustaría formar parte- asegure cuando ella se dio la vuelta. Sus ojos por primera vez parecía aquella tenue luz más tristeza que nunca. Y si bien no iba a llorar o eso esperaba, su mirada mostraba la desolación que sentía.

 

—Y yo que pensaba que nuestra agencia era mala.

 

— ¿Porque?- intente cambiar de tema. Necesitaba pensar.

 

—Sois asesinos- aseguró con una convicción que me dolió. Cuánta razón tenía.- Y yo quizás lo sea algún día.

 

—Aún podemos escapar - asegure intentando hacer que pensara en esa posibilidad de nuevo.

 

— ¿Para meterme en algo peor que lo anterior?- señaló el lugar. - No sé qué pensar.

 

Si bien no sabía a ciencia cierta lo que ella había pasado, algo me lo podía imaginar. Después todo fue ella quien encontró la entrada y todo lo demás.

 

Me pregunté en silencio si realmente había alguna escapatoria. Si había posibilidades de salir no sólo de aquí si no de todas las organizaciones a las que pertenecía.

 

Quería una vida normal. Después de tantos años que les había regalado ahora me tocaba poder pedir algo de tiempo para mí y si ella pudiera estar conmigo quizás fuera el hombre más feliz.

 

Pero nada de eso era tan fácil.

 

Imposible

 

Pues no era una película con un final feliz. No era nada de esas cosas que siempre tienen solución. Es lo que mi madre me deja cuando era pequeño "Todo tiene solución hijo" " Excepto la muerte"

Agente Shao _Libro 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora