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Leo

Entré al salón e instintivamente me senté al lado de mi hermana. Ostia, no conocia a nadie. Clara tardo un poco en llegar. Venía cargada de pepsis y fantas.

— Vamos a ver... — Comenzó una vez soltó las latas. — Todos y cada uno de los presentes sabemos que acabara siendo una fiesta, ¿o no? — Todos asentimos. — Bien, primero, la vecina no quiere mucho ruido.

— ¡Leo! — Gritó el hermano de Clara. Yo me sobresalté pero lo oculté — Dale a la música y súbele el volumen a tope.

—Leo... — Dijo Clara.con una voz dulce. — Cómo se te ocurra poner el.volumen al máximo te enteras. — Sonrió con dulzura. ¡Eso no le pegaba! El que antes me había ordenado subirle el volumen resopló y se echó para atras, apoyando la espalda en el sofá. — Bueno, continúo. Por favor,no quiero a nadie borracho, que despues me toca a mi llevarlo al hospital... — Levanté la mano como un niño pequeño. Imponía, ¿vale? — Dime Leo...

— ¿No bebes? — No la conozco hace tanto, no me culpeis...

— Ni ha bebido nunca, Link. — Respondió un joker que estaba demasiado cerca de mi hermana...

— Efectivy Wonder — Dijo el hermano de Clara, creo que se llamaba Carlos...

— Ahm, ¿y-y eso? — Me atreví a preguntar.

— Odio el sabor del alcohol sobre todas las cosas, incluso más que el sabor de las lentejas.

— No, a tanto no llegas... — Le replicó Carlos. — La sangría te.gusta.

— Muy poco cargada, pero... ¡¿Por qué estamos hablando de mi relación con el alcohol?! — Dijo alterándose.

— Perdón... — Solté sin pensar. Pensaba que era mi culpa.

— Ay, no problema... Y lo último y lo más importante... ¡A divertirse!

Todos reimos y Carlos se puso en pié para activar la música. Me puse en pie y ví que Batman se acercaba a Clara. Le preguntó algo y ella negó con la cabeza. Luego le volvió a preguntar otra cosa y esta vez pareció responder indiferente. Un grito me sacó de mi especie de trance.

— ¡ENCONTRÉ LA CERVEZA! SER TU HERMANO ME HA SERVIDO PARA DESCUBRIR TUS ESCONDITES. BUAJAJAJA

— ¡¡Traelas Carloooooos!! — Dijo un jeff the killer.

Realmente no tenía ganas de beber nada, no desde que la chica de pelo rizado que está ahora mismo en la hanitación hablando con una persona que no me cae bien, ¡qué cojones! ¡Le había susurrado algo al oido, y ella había reído y asentido! Me acerqué y cogí la mano de Clara.

— ¿Te la puedo robar un momentito, Da-las? — Sí, sabía que era Dalas.

— Claro.

Se marchó con las manos levantadas y se fue para la cocina, lugar donde estaban todos con el maldito alcohol, repartiéndoselo. Esperaba que Nala no. Ella, es mi hermana, ¿qué le hago?

— Oye, ¿me has escuchado?

— Eh... No — Mejor ser sincero que decirle que sí y se cabree más.

— Mejor, déjalo, anda a divertirte.

Asentí y fui con los demas.

— Aquí hace falta people... ¿Quién conoce a más gente de todos?

Extrañamente todos me miraron.

— ¿Q-qué?

— Leo... — Comenzó Nala. Miedo me daba. — ¿Cuánta gente ha echo el Catalan Madafaka challenge y está aquí?

— Bastante, ¿por? Ah, vale... No voy a llamar a nadie.

— ¡Clara! — Grito Jeff — ¿Podemos?

— Haced lo que querais.

— ¡Bien! Leo, el móvil.

— Ahg, tomad.— Solté el móvil en la mesa. — Pero llama mi hermana.

— Entendido capitán — Dijo Dalas.

La persona que estaba más cerca de la nevera me tiró una lata de cerveza. Yo la cogí y me la empecé a tomar.

— Clara, ¡intenta tomarte una!

— Mmm, no

— A que no hay huevos. — Dije

— No tengo huevos, señor Leito, ¿es que vas de fucker pero ni idea de lo que hay? — Vale, me había dado.

— ¡Ooooh! ¡Ahi te ha dado Leo! — Grito su hermano. — ¡Venga Clara!

— Agh, lo más flojo que tengas en el frigo...

— ¡Una cerveza!

Clara la cogió. Le dió un buche y puso cara de amargura y sobretodo asco.

— ¡Ni de coña me la acabo! ¡Esto está asqueroso! — Dijo y la dejó en la mesa.

A partir de ahí empezamos todos a beber. Ese Joker se acercaba demasiado a mi hermana y no me gustaba ni un pelo. Carlos sacó de las entrañas de su cocina una botella de Ron. A partir de ahí, todo se volvió negro.

Estaré Aquí Para Tí Opowieści tętniące życiem. Odkryj je teraz