TBF I: El regreso del elegido. (Primera versión).

14. La maestra de pociones.

Hiccup

Esa noche la cena no fue nada especial, Hiccup se encontraba sentado junto a Elsa y  Patapez, ella miraba sin atención su comida, mientras Patapez le intentaba recitar de memoria algo, aunque Hiccup había dejado de prestar atención, esa mañana de nuevo había sido el centro de atención, quizás debiera acostumbrarse al parecer Jack atraía la mirada de todos los magos que se encontraban cerca de él.

Su mirada recorrió las mesas de las otras casa, más allá miraba a Jack riendo junto a los compañeros de casa, él se sentía cómodo en cualquier lugar, al parecer eso era tener una vida fácil, más allá pudo ver el rubio brillante del cabello de Rapunzel, ella definitivamente se parecía poco a su prima, volvió a ver a Elsa.

— ¿Qué te parece Hogwarts?—  pregunto a Elsa

—Supongo que está bien. —dijo sin añadir nada más.

Hiccup asintió y se sumergió en sus propios pensamientos.

Cuando logro llegar a la clase de pociones, observo nervioso el salón, ya habían llegado la mayoría de alumnos, lo que no tranquilizo sus nervios, llegaba con retraso ese día, si no hubiera sido por Jack.

—Joven Haddock ¿verdad? —escucho una elegante voz detrás de él.

Asintió con la cabeza, y claramente pudo sentir que la que hablaba seguramente era su maestra, volteo y efectivamente, atrás de él se encontraba una mujer de cabellos negros, y vestida de manera formal, le sonreía fríamente.

—Puede pasar joven Haddock, no querrá que sus compañeros esperen más.

Hicccup tragó saliva y asintió, nervioso entro al salón y se sentó en el único asiento vacío que había, junto a Elsa y Mérida, que le sonreían pesar del clima de tensión que se sentía en el salón.

—Buenos días alumnos— dijo suavemente la maestra de pociones, sin embargo todos la voltearon a ver con atención. — .Este curso seré su maestra de pociones— cogió una tiza y manualmente escribió en la pizarra de yeso— me pueden decir madame Gothel o profesora Gothel, sinceramente prefiero la primera.

El salón aun guardaba silencio, la presencia de madame Gothel era lo suficientemente fuerte para intimidar a cualquiera, Hiccup la miraba atentamente, noto que su cabello, rizado y oscuro, se parecía un poco al de Mérida, fuera de eso había algo en ella, quizás su rostro, que recordaba a las antiguas reinas del mundo mágico, le resultaba muy familiar.

—Muchos de ustedes sabrán la definición de pociones, pero pocos conocen su verdadero significado y no pretendo, que aun al final de año, algunos de ustedes lo sepa, no en realidad.   —Hizo una pausa- Las opciones son un arte, un arte sutil mucho más perfeccionista que cualquier otra de las materias que verán en Hogwarts. Aquí no les enseñare a agitar sus varitas y recitar versos en lenguas muertas, ni a volar como las caricaturas de magos tan famosas entre los muggles.

Madame Gothel paseaba por el salón con total seguridad y control sobre la clase, ninguno de los alumnos hablo o murmuro algo.

—Las pociones, a diferencia de lo que ustedes creen es un rama complicada de la magia, poco de ustedes sabrán diferenciar un elixir de la juventud, de una poción rejuvenecedora. Si prestan suficiente atención, si ponen todo su esfuerzo y dedicación mi clase será fácil— se detuvo y observo a sus alumnos por un momento—puedo enseñarles a embotellar el amor, a crear fortuna liquida, e incluso a revivir a los muertos.

A medida que hablaba iba recorriendo la sala deteniéndose algunas veces,  finalmente se paró frente a la clase y levanto su varita, la agito y en la pizarra aparecieron unas instrucciones

—Tienen alguna pregunta— nadie hablo— bien, es hora de empezar. Para su primera clase evaluare que tan mal están, para eso realizaran la poción que aparece en la pizarra. La mejor recibirá 10 puntos para su casa y la peor perderá diez puntos, así que es mejor que se esfuercen.

Pronto todos los alumnos estaban concentrados en la poción, algunos de ellos aun leían las instrucciones otros sacaban sus libros, y pocos corrieron al armario de suministros, Hiccup releyó las instrucciones de la pizarra y reviso los ingredientes que aparecían en ellas.

Después de casi media hora de preparar la poción, Hiccup volteo a ver a su maestra, estaba al final del salón con una sonrisa sínica, sus compañeros concentrados en sus pociones, Hicup vio que casi todas tenían un color azulado, releyó las instrucciones, los estudiantes lucían cansados y algunos frenéticamente intentaban arreglar sus opciones.

Madame Gothel se paseaba por el salón murmurando para ella misma, o dando comentarios a algunos alumnos, la mayoría muy duros, de vez en cuando asentía. La poción de Mérida lucia de un poco turquesa aunque burbujeaba alarmantemente, Elsa más allá comparaba la pizarra con el cuaderno, aún más que Hiccup, y por ratos volteaba a ver el resto del salón, su poción también lucia rojiza, aun la estaba calentando.

—El tiempo se ha acabado— dijo al fin madame Gothel, estaba al frente de la pizarra y con un suave movimiento de varita hizo desaparecer las instrucciones —Quiero que saquen una muestra de la poción en uno de los frascos— De nuevo movió su varita y un pequeño frasco apareció enfrente de todos los estudiante.

Hiccup tomo una muestra de su poción y pudo ver la diferencia entre los estudiantes, algunas pociones eran verdes, otras azules y solo algunas tenían colores como naranja y aún más extraño rojo.

—Cómo podría haber adivinado, la mayoría de ustedes aprobarían si nos basamos en el libro, mas algunos de ustedes cómo han sido lo suficientes inteligentes para captar mis correcciones en la poción, felicidades— reviso con su mirada la sala— joven Haddock, obtiene los diez puntos para su casa

Hubo varios aplausos, principalmente por parte de los miembros de su casa, a continuación la maestra siguió explicando los conceptos básicos de pociones, Hiccup le sonrió a sus compañeros y empezó a tomar apuntes, su maestra al parecer sabía mucho de pociones pero realmente era algo mordaz al tratar con sus alumnos.

Finalmente la maestra dejo los deberes y los dejó salir, Hiccup espero a sus compañeras y se fueron juntos a la salida platicando como les había parecido la clase.

—Creo que debo irme— dijo Mérida al llegar donde finalizaba el pasillo.

—Bueno, ¿a que clases vas por cierto?— pregunto Hiccup

—Creo que a encantamientos

—Genial, la profesora Blue es una extraordinaria maga— dijo Hiccup emocionada.

—Creo que es algo excéntrica en realidad— opino Mérida.

Ambos rieron, siguieron bromeando durante un rato. Finalmente Mérida se despidió de ambos con la mano y salió corriendo, se le hacía tarde, Hiccup la observo antes de dar la vuelta e ir a buscar el salón de su próxima tarde, esa tarde la vería en clases de vuelo.