Detrás de mi ventana. (Adaptada)

23.

 - ¿Que haces en mi recamara, Julian?
- Lo siento, venia a levantarte, llevas mucho ahí dormida y pensé que hasta habías muerto, y me quería asegurar de que seguías viva – rio –
- Muy gracioso, jovencito... tengo hambre – se sobo la panza –
- Alístate y vamos a desayunar fuera ¿te parece?
- Me encantaría – sonrieron –

Después de que se bañaron y alistaron, salieron por el primer taxi. New York esta repleta de taxis, por lo que no se les dificulto mucho detener a uno, mientras el taxi avanzaba, Oriana y Julian iban mirando por la ventana, admirando la hermosa ciudad, era increíble lo que estaban viviendo, estaban solos en esa enorme ciudad, irían a la universidad deseada, estudiando lo que mas les gustaba, y lo mejor de todo, era que compartía su casa, con su mejor... ¿amigo?, claro por que a todo eso le aumentabas lo guapo y sexy que era, un chico perfecto, el chico de sueños de cualquier adolescente.

Después de desayunar, o mas bien, comer un delicioso banquete, en una fonda que se encontraba en el centro de New York, terminaron satisfechos, así que decidieron caminar un poco para que se les bajara la comida, y recurrieron a un parque de por ahí cerca.

- Me encanta esta ciudad – decía contenta Oriana-
- Es hermosa –

Oriana noto como muchas chicas no paraban de ver a Julian, y ¿cómo no? si era un chico encantador y muy atractivo, pero lo que mas le dolía, es tenerlo tan cerca y a la vez tan lejos, por lo que se moría de celos, cada vez que las chicas no le quitaban la mirada.

- Hola preciosas – Julián solo les guiñaba el ojo –
- Deja de hablarles, ni siquiera las conoces .- refunfuño Oriana-
- Tranquila muñeca - sonrió – soy solo tuyo - ella se ruborizo –

Siguieron un rato charlando en el parque, había muchos niños jugando, bebes... y a Oriana se le movió el corazón, ver toda una familia perfecta, aunque solo sea una escena de 5 minutos, le hizo sentir que ella tenia ganas de tener una bebe, una encantadora niña, a la cual peinar, hacerle dos colitas, vestirla con vestiditos, pompones, y sus zapatitos, ponerle perfume y sacarla a divertirse y pasear, pero era absurdo, si nadie se fijaba en ella, y ella fantaseando con que quería tener una hermosa bebe.

- Quiero tener una bebe – dijo Julian, mirando a una pequeña jugando –
- ¿Qué? – pregunto con los ojos abierto, como los dos pensaban lo mismo –
- Si, me gustaría tener una niña, una niña hermosa, tener mi princesita.
- Seria maravilloso – susurro Julian–

Cuando llegaron a casa, Julian encendió el televisor y se puso a mirar las noticias, mientras que Oriana pensaba en que seria bueno cenar, en eso estaba cuando Julian la sorprende... y entre los dos deciden cenar papas fritas con mucha captsu y unas hamburguesas, así que toman el teléfono y las piden a domicilio. Después de 30 minutos, por fin llega la cena, comieron riendo y bromeando de todo un poco, hasta que terminaron y fue cuando anunciaron una película para adultos, ellos solo rieron y se pusieron un poco nerviosos, ambos tenían ganas de aunque sea mirar un pedacito, pero les daba pena lo que pensara uno del otro, así que Oriana tomo el control para apagarla, y Julian se lo quito, con todo y timidez, dijo el que la quería ver, Oriana se ruborizo, no sabia que decir.

- Bueno, mírala... yo, yo.. – tartamudeo – me iré a acostar.
- Que descanses – le dijo Julian–

Oriana subió a su habitación y apago las luces de la casa, solo se miraba la luz del televisor y la luz de su cuarto, se cambio y se puso una pijama... pero aun así, no podía dormir, tenia curiosidad de ver que hacia Julian, como reaccionaba viendo esa película, así que sabia que estaba mal lo que iba hacer, pero no le quedaba mas remedio, bajo cuidadosamente un par de escaleras, las suficientes para ver la televisión y a Julian, y lo suficiente por si la cachaba, subir de prisa.
Aparece la escena que deseaba ver, ahí estaban dos adolescentes en su coche, besándose apasionadamente, y como todo... los besos subieron de tono, y pasaron a ser mas profundos y apasionados, y las caricias comenzaron, comenzaron acariciarse hasta poco a poco ir aumentando el retomo de sus besos con sus caricias, Julian comenzó a ponerse nervioso, ¿acaso eso le excitaba? empezó a sudar y a moverse lentamente, Oriana no dejaba de imaginarse que esos dos chicos eran Julian y ella.
Al parecer Julian pensaba mas o menos lo mismo, ya que un abultamiento comenzó a crecer entre su shorts a cuadros , y el solo se lo sobaba por encima de la ropa, como para estimularlo solo un poco,Oriana moria de tanta excitación que sentía al ver a Julian hacer eso, era diferente a como lo miraba detrás de la ventana, ahora lo miraba más cerca, le quedaba a solo unos metros de distancia, y era maravilloso lo que miraba. Dios... en ese momento deseo tanto arrodillarse ante Julian y besarle cada rincón de su intimidad, y hacerlo pedirle mas y mas...
El deseo y la pasión que sentía en ese momento no se pudo controlar, Julian al parecer también se imaginaba que esos dos chicos de la película, eran el y Oriana, se moría por tocar ese cuerpo hermoso de ella, tan... perfecto y delicado a la vez, con ganas de subir a su habitación y hacerle el amor, pensando en eso, no pudo, y fue cuando metió mano entre su bóxer y comenzó a estimularse mejor. Orianaquedo impresionada, era mas excitante verlo de cerca, los dos ahogaban sus gemidos, era una tortura, había tanta química entre ellos dos, que no sabían si para un futuro, podían tener fuerza de voluntad, para desistir a esos encantos.  

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