Detrás de mi ventana. (Adaptada)

12.

 Ya no puedo, se decía Oriana a si misma, ya no puedo tenerlo aquí cerca, por que no puedo tomarlo entre mis brazos y besarlo hasta quedarme sin fuerzas, quiero besarlo... ahora se lo difícil que es amar... y lo peor es amar a la persona que tienes a un lado y saber que jamás podría ser para ti.

- Oriana creo que terminamos – se giro hacia ella y sonrió - ¿quieres hacer algo?

Claro que quería, estaba dispuesta a hacer todo con Julian, todo lo que le pidiera, era la persona indicada para ella... estaba mas que enamorada, obsesionada, era un martirio haber pasado años, y años viendo solo a través de esa maldita ventana, reprimir sus deseos y sentirse la peor persona del mundo, además de ser fea... según ella.
- Lo que decidas estará bien...
- ¿En verdad? ¿lo que decida? – se acerco a Orianaquedando a poco centímetros de distancia–
- Si, lo que tu decidas - con su mirada seguía sus labios, sus ojos, su hermosa sonrisa –
- Si te pido que me des un beso.... ¿me lo das? – le susurro Julian–
Orianano sabia que decir, era la pregunta que estaba esperando por demasiado tiempo. Al notar Julian que estaba nerviosa, solo soltó una risa leve y se separo.
- No te pongas nerviosa, solo estaba bromeando...
- No debes bromear con esas cosas – dijo Orianasonrojada –
- Esta bien, lo siento, perdón, discúlpame... yo no... quería... ¿quieres helado?
Oriana se puso nerviosa, es que por que Julian juega con esas cosas, no debería de ser así... maldición ¿Por qué Julian? No debes jugar con los sentimientos de las personas...
- Gracias, no quiero helado, debo irme – tomo sus cosas, y cuando iba a salir, Julian la toma del brazo y la detiene –
- No espera, no quiero que te vayas enojada, se que soy un imbecil , perdón... es que tanto estrés al estudiar, se me ocurrió hacer una broma – se rasco la cabeza – pero no pensé que fuera a incomodarte ¿fue por lo que sucedió en mi recamara hace días verdad? – pregunto nervioso, tomando a Oriana con una mano –
- Lo que paso... no debió pasar – bajo la mirada –
- ¿Te arrepientes? creo que fue un impulso de ambos, a mí... a mí...
- ¡Julian! – dijo su mama entrando a la puerta y mirando aOrianay a su hijo tomados de la mano- hola... no sabia que tu novia estaba aquí – su mama sonrió –
- Oh no señora, no somos novios, solo vine a ayudar a Julian a estudiar para un examen
- En mis tiempos, si estudiábamos, pero ahora en la actualidad, solo se la pasan...
- ¡Mama! es verdad, mira pregúntame...
- Era broma, anda, acompaña a Oriana
- Ahora vuelvo – dijo Julian–
- Con permiso Señora – dijo Oriana -

Salió de ahí hecha un tomate de lo ruborizada que se puso, le sorprendió que la mamá de Julian la llamara así, y mas que los interrumpiera cuando Julian le estaba diciendo algo sumamente importante acerca de lo del beso, quería saber si le había gustado ese beso tanto a ella como a Julian, decirle que no era ningún error, que ese beso paso por que tenia que pasar y era el mejor beso de su vida, que era el primer maldito beso de su puta vida. ¿Por qué es tan complicado eso del amor?

- Disculpa lo que dijo mi mama – se apeno Julian –
- No te preocupes, todos piensan mal. Y hay muchas personas que pensaran lo que quieran, así que no hay que pasarnos la vida tratando de darle gusto a las personas, al fin y al cabo es tu vida, no la de ellos.
- Yo... no se que decirte – se sobo la nuca –
- Descuida, no tienes nada que decirme, es tarde, debo irme
- Vives aquí al lado... ¿te importaría acompañarme a cenar? Vayamos a distraernos, no quiero estar solo y se que tu tampoco
- Esta bien, iré avisar a mi mama.
Le fue avisar a su mama, Julian la llevo a cenar a un lugar por ahí cerca, Oriana sentía su corazón palpitar con tal reacción que Julian provocaba en ella, ahora estaba mas que segura que estaba enamorada, enamorada de ese chico con hermosa sonrisa, melodiosa voz, aquel chico con ojos brillantes, ese aroma de el, muy peculiar, un aroma que podía identificar a kilómetros de distancia, su cabello, su manera de vestir, su forma de ser, tan encantadora como el... su piel suave, sus brazos... donde quisiera estar cada mañana al despertar, y encontrarlo a su lado, con una sonrisa, eso seria perfecto para ella. Pero es lógico, a ningún chico le gusta tener responsabilidades tan pequeños, no quieren compromisos, solo una aventura para tener que hacer algo en los días.

Al menos eso era lo que pensaba Oriana, pero Julian no era así, no era como aquellos chicos. Julian era diferente, ni el mismo sabia que le pasaba al querer estar siempre al lado de Oriana, no era por lastima, mucho menos por que no quisiera estar solo, quería estar con ella, y la verdad... es que no dejaba de pensar en ella desde la vez en que se besaron, por alguna razón,Orianale provoco a Julian sensaciones nuevas, no solo placenteras, si no algo que sintió en su estomago y el no quería hacer la broma del beso hace un momento, en verdad quería besarla, pero como ella no respondió nada, fue lo único que se le ocurrió decir para no quedar como un completo estúpido.  

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Sky