0.4 つの

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-Tyler -Patrick habló mientras se sentaba en el pupitre de al lado-. Lamentamos lo de ayer.

-Ya no importa, Patrick -Tyler negó, restando importancia a sus disculpas.

-Escucha, no era nuestra intención hacerte enfadar, pero creemos que estás llevando tu obsesión, demasiado lejos -Brendon prosiguió-. Tan sólo mírate...

-Lo sé, créeme que hago eso cada cinco minutos -Tyler lo interrumpió-, y no es necesario que lo digas, sé que soy un saco de basura, no te molestes en repetirlo.

-A eso no se refería -Patrick negó-, él decía que cada vez más tu cuerpo se deteriora. Tu cabello perdió vida, tu cuerpo cada vez pierde carne y deja ver huesos, sabes a lo que me refiero. Tus dietas te están matando.

-¡Claro que no! -Tyler dio un manotazo al pupitre-. Esas dietas, me están ayudando. Dejen de mentir acerca de mi cuerpo, sé que estoy gordo, y ustedes también lo saben.

-¡Eso no es cierto! -Brendon se levantó de su asiento-, Tyler te estás matando, debes comenzar a comer bien.

-Ugh, no se molesten en intentarlo, tan sólo déjenme en paz -el castaño se levantó de su asiento, pero Brendon lo detuvo.

-Eres nuestro mejor amigo.

-No necesito su ayuda -protestó.

-Sí la necesitas, por eso estamos aquí, queremos recuperar a ese Tyler que amaba comer hamburguesas Tex-Mex.

-Ese Tyler está muerto -asintió-, se encuentra tres metros bajo tierra -gruñó y se giró para caminar a otro asiento.

Se sentó lejos de sus "amigos", ahora se encontraba en su clase de informática, la cual siempre le parecía interesante, no por el contenido que el maestro mostrase, sino porque podía buscar cosas acerca de dietas, y rutinas de ejercicio. Justamente lo mismo que haría hoy, como todas las clases.

El profesor entró al aula, mostrando una de sus mejores sonrisas, dejó su papeleo sobre la mesa y comenzó a explicar lo que harían hoy en su clase.

-Buenos días chicos -saludó, pero nadie contestó-. Veo que traen un muy buen animo, por eso les traigo un trabajo adicional, en equipo -dijo y todos comenzaron a gritar acerca del equipo que elegirían-. Y como también sabía que harían eso, yo elegiré los equipos.

El profesor tomó la lista entre sus manos, y empezó a leer los nombres de sus 35 alumnos. Empezó por mencionar nombres al azar, Patrick y Brendon no corrieron con suerte, les había tocado estar en el grupo de los populares, lo cual era completamente estúpido, tampoco era como si ellos no tuvieran una buena reputación, pero los "populares" eran un dolor de bolas. Patrick y Brendon esperaron que Tyler corriera con mejor suerte que ellos.

-Tyler Robert Joseph con -hubo una pausa mientras el profesor buscaba a la pareja indicada-. Joshua William Dun.

Tyler frunció el ceño, no conocía a nadie con ese nombre, o al menos no le interesaba conocerlo o recordarlo. Esperó en su banquillo a que su pareja de trabajo se incorporara y no fuese tan molesta, pero en cuanto se percató de que se trataba de aquel teñido, su cuerpo se tensó totalmente. Estábamos hablando del chico "perfecto" de cabellera color azul, de porte rudo pero jodidamente sensual.

-Hey -el teñido saludo, Tyler solo se limitó a asentir sin importancia-. ¿Tú no eres el chico que destruye los espejos? -preguntó riendo.

Tyler no dijo nada, no continuó con la charla, tan sólo, espero a que el profesor dijera las indicaciones, para poder acatarlas. No le importaba si el teñido quería charlar, en realidad, al castaño le valía medio mundo. Lo único que importaba era continuar buscando dietas, eso era lo que realmente lo ponía feliz.

-¿Cómo están tus nudillos? -el tintado preguntó mirando la mano del castaño.

-Bien -dijo y continuó haciendo el trabajo.

-Se supone que debemos hacerlo entre los dos -Josh protestó, sintiendo que su presencia ante Tyler era estúpida.

-No importa -se encogió de hombros-, lo haré yo, tú llévate todo el crédito.

-Eso no está bien, se supone que debemos hacerlo ambos. Tú termina lo que sea que estás haciendo, y yo continúo con lo que sigue -señaló la pizarra con el contenido.

-Está bien -asintió.

Tyler se encontraba tan inmerso en su trabajo que no prestaba atención a otras cosas. Quería terminar rápido para así poder deshacerse del teñido y él poder buscar sus cosas "nutricionales" a solas, y con Josh ahí no iba a poder. Pero el ruido de una envoltura y el delicioso aroma de chocolate inundó a Tyler por completo, desconcentrándolo, y obligándolo a mirar al teñido, quien comía a gusto un Resse's. Lo que alteró a Tyler.

-¿Q-qué es lo que estás haciendo? -Tyler preguntó y Josh surcó una sonrisa.

-Estoy a punto de terminar el Resse's, ¿quieres? -el tintado le extendió un trozo de chocolate. Tyler sentía atracción, por lo que comenzó a pellizcar su estómago, creía que funcionaria del misma manera.

-N-no, no gracias, así está bien -asintió.

Tyler pasó salva y fingió que continuaba trabajando, no quería que un trozo de chocolate lo descontrolara, al punto de terminar aceptando, aunque en su realidad él no era anoréxico, él era bulimico, lo que traía una gran diferencia, porque el se atragantaba para satisfacer su hambre y después regurgitar para sentirse mejor.

-¡Hey amigo, oye! -el tintado gritó, obteniendo la atención de Tyler-. Ten, te gustará -Josh le extendió una barra entera-, traía otra, generalmente una barra de chocolate no me llena.

-Gracias, pero no puedo aceptarla -hizo un gesto con su mano.

-¿Por qué no? -replicó.

-Son muchas calorías.

-¿Y? -soltó un chillido.

-¿Y?, deberías cuidar lo que comes -Tyler protestó.

-Lo hago, ¿quieres o no?.

Tyler se sentía tentado, porque era una deliciosa barra de su chocolate favorito, pero ahora no podía sacar de su cabeza aquella dieta que le estaba funcionando, aquellos golpes que lo estaban beneficiando. Todo le estaba saliendo tan bien, hasta que este teñido le mostró una buena barra de chocolate.

-Sí está bien -Tyler se la arrebató y la desenvolvió con velocidad. Llevándola a su boca y tragarla como si no hubiera comido en años. Josh solo lo miraba desconcertado.

ANXIETY Where stories live. Discover now