-¿Por qué no vienes a casa?

-¿Qué?- Si oí su pregunta, solo que no lo esperaba.

-Estoy solo con Winston y parece que tus padres también quieren algo de privacidad, ven a casa.

Estaba dubitativo con la respuesta, no quería ir por un lado ya que sería algo incómodo estar con él a solas, aunque debo acostumbrarme ya que las últimas veces que lo vi no había nadie más con nosotros pero por otro lado sí quería ir porque no tenía ánimos de conocer los gemidos de mi tía o el estúpido calvo y no poder dormir.

-En unos minutos estoy ahí.- Avisé antes de colgar la llamada y correr para darme una ducha.

Al salir escogí algo cómodo pero presentable y bajé con algo de dificultad ya que las luces estaban apagadas. Podía oír sus agitadas respiraciones, algo que me estremeció por completo. Corrí hasta la puerta, soltando un suspiro cuando estuve fuera de la casa. Para mi suerte no tardó más de cinco minutos en pasar un taxi, el cual me llevó hacia destino.

Hice sonar el timbre para que supiera que había llegado y esperaba que abriera él la puerta, pero tuve que observar hacia abajo para saludar a quien me recibió. Cerré ésta tras mi paso, colocando llave porque me daba miedo el imaginar que Winston dejaría pasar a cualquier persona por creer que es su mamá.

Fui directo a la habitación del castaño, quién se incorporó al verme.

-¡Finalmente alguien para conversar!- Exclamó en modo de gracia. Golpeé su hombro amistosamente haciéndolo sonreír.

-Gracias por salvarme, y lo digo en serio.

-Nunca viene mal algo de compañía.

-¿Cómo te sientes?

-Ya casi no me duele- Observó su rodilla y acomodó su rodillera- ¿Cenaste?

-Amm- No.- Sí.

-Eres muy malo para mentir Newt. Ven, te calentaré un poco de arroz.

Lo seguí hasta la cocina, donde colocó dentro del microondas un plato de comida mientras me iba a sentar al comedor, luego de marcar durante cuanto debería recalentarse, se sentó a mi lado.

-¿Quieres hablar de eso ahora?

-¿Hablar de qué?- Respondí confundido.

-Sobre lo que pasó hace unos días...- Aún confundido, lo observé para que prosiguiera. Él aclaró su voz- Esa mañana no tenías una cara muy buena que digamos, lucías cansado, enojado, triste, te habían castigado y no volviste en el autobús.- Bajé la vista comprendiendo de lo que hablaba- No te dije nada porque sabía que estabas mal y no quería ponerte peor, pero luego sucedió lo de mi pierna y no pude hablar contigo al respecto.- Sonreí lo más natural que pude.

-Nada sucedió, había tenido un problema de insomnio y me quedé dormido en clase, por eso me enviaron a detención, cuando salí de ahí el transporte escolar ya se marchó por lo que me volví a pie.- Me observó nada convencido pero no voy a arriesgarme a contarle, porque si le cuento eso tendré que contarle sí o sí lo que sucedió esa noche con mis padres, y la razón por la que estoy viviendo con Clara. Sin olvidar el hecho de que cree que están vivos.

-Aún no quieres hablar ¿Verdad?

-Eso fue lo que pasó Thomas- El microondas chilló, avisando que la comida estaba lista. Miró hacia la cocina y luego volvió hacia mí- No me crees.- Concluí sonando algo indignado.

-Tú dices una cosa pero tus ojos dicen otra, Newt, puedo ver dolor allí.

-No comiences con eso, no tengo dolor, te estoy contando lo que pasó ese día.

-Pero no estás siendo sincero, creí que confiabas en mí.

-¿A esto querías que venga? ¿Para hacerme sentir mal?

-No pretendo...- Una sombra se hizo presente a mi lado.

-Louis está llorando, dice ustedes están discutiendo, ¿Por qué lo hacen?- El niño lucía muy tierno con sus pijamas de ositos y entre sus brazos sosteniendo al muñeco de Bob Esponja que le entregó hace unos días a su hermano.

El castaño se levantó, serio, en busca del plato. Un nudo se había formado en mi garganta, pero no soltaría las lágrimas que amenazan con salir.

-¿Por qué tus ojos están brillosos?- Volvió a preguntar con inocencia.

-Oh, es que estoy resfriándome- Sonreí falsamente- Dile a Louis que no tiene por que llorar, no estamos discutiendo con Thomas.

-Pero el escuchó como elevaban la voz, así como papi con mami.

-Estamos conversando, Winston, estábamos hablando sobre uno de los capítulos de Bob esponja que le encantan a tu hermano y por eso elevaba el tono, estaba emocionado, no tienes por qué preocuparte- Coloqué mi mano en su hombro. Asintió mientras sonreía.- Ve a dormir, es tarde.- Besó mi mejilla antes de desaparecer por las escaleras.

La comida se posó delante de mí, pero no tenía apetito. El castaño, cojeando, regresó a su habitación. Era increíble que se haya enfadado por eso, se supone que me entendería, me daría mi espacio y cuando esté listo le contaría las cosas pero en lugar de eso se enoja. Hice hacia atrás el plato, colocando mis codos en la mesa y mi cabeza entre mis manos, siempre hay algo que arruina las cosas cuando algo bueno me pasa.

Me gustaría estar en mi cuarto, ahora, sin poder dormir por los ruidos provenientes de la planta baja y quizá, hablando por mensaje con el castaño, si eso hubiese hecho ahora estaríamos bien pero no, tuve que aceptar su estúpida invitación.

Pero dejaré mi orgullo de lado e iré a pedirle disculpas, después de todo es mi culpa por mentirle o mejor dicho, cubrir una verdad.

Golpeé su puerta antes de ingresar, estaba acostado en su cama de espaldas a la entrada. Me senté en la silla que estaba a su lado, pensando como comenzar.

-¿Estás enfadado?- Vaya pregunta idiota la mía, era claro que estaba enojado. Jugué con mis pulgares cuando acomodó su posición observando el techo. Negó con la cabeza y cerró sus ojos.- Lo siento Thomas.

-Ya te dije que no estoy enfadado.- Habló algo rasposo. Asentí aún sabiendo que no podía verme. Era inútil esto. Caminé hasta el sofá del living, acomodando los almohadones para recostarme.

Encendí un cigarrillo antes de acomodarme para dormir. Mil cosas pasaban por mi cabeza, y entre ellas estaba la idea de generar alguna clase de incidente que me moviera a otro lugar. Estando con Clara la pasaba mal, la única persona que me ataba a este lugar como ya dije en una ocasión es el mismo que está a dos habitaciones de donde estoy ahora, aquel por el que sentía cosas, a su lado me sentía realmente bien, completo, era agradable la manera en la que se preocupaba por mí, siempre me cuida y me sonríe porque sabe que su sonrisa genera cierta calidez en mi pecho pero cuando se enfada conmigo algo dentro de mí se rompe, me siento devastado y no es nada lindo, si llegásemos a discutir bastante feo me destruiría, más de lo que estoy ahora.

Cerré mis ojos sumiéndome en un lugar imaginario, donde todo es perfecto, donde no hay dolor, no hay tristeza, donde estoy completo,... mis sueños.

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¡Holaaa bombonas/es! Un millón de perdones por la tardanza, yo sé que me odian por dejarlas esperando tanto tiempo, pero voy a seguir tardando en subir ahora, lamentablemente, porque ando muy atareada últimamente, siempre que puedo les subo un nuevo capítulo porque no me gusta dejarlas esperando pero, momentos como ahora, me sobrepasan las cosas y no alcanzo. Espero que sigan leyendo y gracias por sus comentarios y sos votos. Las/os amo <3 

Bring Me To Life [Newtmas]Where stories live. Discover now