Estrellas de Cristal

Carreras.

Fuimos a casa y abrí la nevera para prepararme algo de comer, mientras veía la televisión. Había quedado con Cloe a las 12 de la noche para ir a las carreras.

La verdad es que pase la tarde aburrida haciendo deberes de griego que ni siquiera entendida bien, me rompí la cabeza intentado analizar una oración, pero llegó a un extremo en el que deje de hacer deberes por que pensaba que sino mi cabeza explotaría.

Me senté a ver la televisión y no hacían nada interesante, mi aburrimiento cada vez era más grande y mi cabeza dolía, salí al jardín para tomar un poco el aire, me senté en el sofá colgante que había debajo de un árbol hasta que me quede durmiendo.

Una brisa fresca me despertó haciéndome estremecer del frío. Mire la hora y eran casi las once, entre a casa corriendo a preparándome algo de comer. Cuando acabe de cenar subí corriendo a mi habitación para cambiarme de ropa, me vestí con unos pantalones negros rotos por las rodillas una camiseta blanca y mi amada cazadora de cuero negra con unas Vans negras, deje mi pelo suelto haciendo pequeñas ondulaciones, me puse un poco de maquillaje y un poco de rimel en los ojos.

Salí corriendo a casa de Cloe, esta estaba con Ethan hablando cuando yo llegue y al rato llegó Scott.

-Que guapa estas.-Dijo Cloe sonriendo.

-No es que me haya hechado botox ni nada.-Dije riendo.

-Estas mejor que nunca.-Dijo Scott, me acerque y lo abracé.

Yo subí a la moto con Scott y Cloe a la de Ethan. Tardamos aproximadamente unos quince minutos en llegar, cuando baje de la moto lo primero que hice fue buscar a James con la mirada pero no lo encontré por ningún lado, quizá no había venido, pensé.

Al rato llegó Helena con Lucas, cosa que me sorprendió pero me hizo ilusión por ella. Comenzamos a hablar y la verdad es que me cayó muy bien Lucas, no parecía ser como Helena lo describía.

La primera carrera estaba apunto de comenzar y Ethan, Scott y Lucas se prepararon para salir. Examine a todos los concursantes, pero no divise a James en ningún lado, pero si ví a Tyler, nuestras miradas se cruzaron y sentí algo dentro de mi, tenia miedo y James no estaba aquí para protegerme.

Adam llegó y se situó con nosotras para ver la carrera. Nosotras animabamos a los chicos pero veía como Tyler intentaba hacer trampas, por suerte no se salió con la suya y el ganador fue Scott. Cloe se lanzó sobre él y lo abrazó, Helena y yo fuimos después con Adam. Ví como Ethan se ponía triste al no ver a Cloe a su lado, pero nada podía hacer, ella quería a Scott aunque no sabia como explicarlo.

Me acerque a Ethan para animarlo. Estuvimos hablando un rato sobre Cloe, bueno más bien estuve escuchando, pero yo no podía hacer nada para cambiar a Cloe.

Cuando me gire a buscar a los demás no los encontraba y ví como Tyler se acercaba a mi con paso firme y un escalofrío recorrió todo mi cuerpo, me quedé estática en el sitio. No sabia que hacer, si correr o llorar, o las dos cosas a la vez.

-Hola Taylor.-Dijo acercándose a mi.

-Hola Tyler.-Dije nerviosa.

-Te veo un poco tensa.-Dijo riendo. Tenía miedo, pero no se porque algo le hizo alejarse de mi retrocediendo un paso. Ví el cuerpo de James pasar por delante de mi y agarrarlo de la camiseta, estaba enfadado, le gritaba y llegó un momento con un gesto en el que lo tiró al suelo.

-Te dije que no te acercaras a ella.-Un puñetazo.-No quiero que la mires.-Otro puñetazo. Yo estaba parada sin saber que hacer.-Ni que te le acerques.-Otro puñetazo. Entonces reaccione, lo agarré del hombro y lo aparté.

-James dejalo.-Dije.-Estoy bien.-Se giro y me miró, lo dejo en el suelo y él me cogió del brazo, me agarró fuerte pero no me hacía daño.

-James, para.-Le dije soltándome de su agarre.

-Me lo prometiste Taylor.-Dijo girándose frustrado. Llevaba manchas de sangre en la cara.

-James, no sabia que hacer, no estabas, me había quedado sola.-Dije acercándome a él.-No sabia que hacer.-Lo mire y entonces reacciono se acerco a mi y me abrazó mientras me daba un besó en la frente.

-Si te pasa algo yo me muero.-Dijo nervioso. Entonces lo miré, nuestras miradas conectaron y él fue acercándose, pero entonces oí gritar mi nombre, me giré y ví a Scott y a Ethan. Me gire y sonreí a James.

-¿Volvemos?, yo quiero verte correr.-Dije sonriendo, él me sonrió y pasó su brazo por mi hombro y nos fuimos con los demás.

James se preparo para salir y cuando la carrera comenzó la adrenalina empezó a subir por todo mi cuerpo y empecé a animar a James como si mi vida dependiera de ello.

Tenía a Adam detrás de mi y a Helena a mi lado. Ethan y Cloe se habían ido y Scott se fue con una chica y la verdad, es normal que Cloe piense que siempre hace las cosas mal.

James ganó la carrera y paró la moto enfrente de mi haciéndome señales para que subiera con él, subí y él empezó a dar vueltas alrededor de la pista mientras los dos nos reíamos como locos.

James y yo llegamos a casa eran las dos de la mañana, entramos en mi casa y en silencio entramos a la cocina.

-¿Te preparo un vaso de leche?.-Pregunto James, yo asentí sonriendo.

Lo preparamos y salimos al patio trasero de casa, nos tumbamos en el sofá colgante y nos pusimos a mirar las estrellas. Lo miré y sonreí al verlo tan tranquilo y relajado, parecía otro estaba más liberado y relajado.

-Me recuerda cuando eramos pequeños.-Dijo sonriendo.

-Las noches en el campo, mientras comíamos helado de chocolate.-Dije riendo.

-Recuerdo una vez que comistes tanto que te tirastes toda la noche llorando por que te dolía la barriga.-Dijo riendo.

-Y cuando te caistes del árbol intentando coger un balón, se te quedo la cara más morada que las frambuesas.-Dije riendo.

-Cuando te leía antes de dormir.-Dijo sonriendo.-Y te quedabas dormida en mis piernas.-Me recosté a su lado y apoye mi cabeza en su pecho. Él empezó a acariciarme el pelo y yo empecé a cerrar los ojos.

-Cuando me defendias de los niños del colegio.-Dije medio dormida.

-Era divertido, sus caras al verme eran monumentales.-Dijo riendo.-Tu madre riñendome por que te habías manchado de barro hasta el pelo.

-Perdona, pero el que me mancho de barro fuiste tu.-Dije incorporandome. Él rió y besó mi frente.

-Fue sin querer.-Dijo riendo.-Tu madre riñendome por que no quiere que te haga daño.-Dijo serio. Se giró y me miró.

-Déjala, piensa que te enamoraras y te olvidarás de mi y piensa que eso me va a destrozar.

-Yo nunca te voy ha hacer daño, no puedo. Si a ti te pasa algo yo me muero, no puedo soportar estar lejos de ti. Pero eso ella no lo entiende, quizá lleve razón pero no ahora.-Dijo James mirándome.

-Déjalo ya James.-No quería seguir con esa conversación.-James, tu no sabes si te vas a enamorar hoy, dentro de una semana o el año que viene, no lo controlas tu.-Dije levantándome del sofá colgante.-Al igual que yo, eres como ese algo imprescindible y se que eso no va a cambiar nunca.

-Todos tienen miedo a que yo te rompa el corazón, pero y yo que, ¿mis sentimientos no importan?.-Dijo enfadado.

-Déjalo James.-Dije tumbandome en su pecho. Él suspiró pero se relajo.-Olvida todo lo que te dijo mi madre, nadie tiene que decirnos lo que tenemos o no que hacer. Nosotros estamos bien así y eso es lo que importa, no lo que pueda pasar, lo que importa es el ahora, el presente. Olvídate de todo y disfruta.

-Vamos a dormir.-Dijo James cargándome en sus brazos. Llegamos a mi habitación y ambos nos tumbamos en la cama.

-Buenas noches, James.-Dije recostandome en su pecho.

-Buenas noches, trencitas.-Dijo pasando sus dedos por mi pelo.