Parte 41: Maratón 3/3: ¡TU NO ERES MI MADRE!

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-¿¡Dyl!?.-Escucheque dijeron detrás de la puerta del baño. Escuche unos pasos y vi asomar su cabeza a Jack.

-No puedes estar aquí.-Le dije mientras me sacaba las lágrimas de la cara.

-No me importa.-Dijo y entro cerrando la puerta con llave.

-¿Que quieres Jack?.-Le pregunte.

-Quería ver como estabas.-Me dijo mientras se sentaba alado mio.

-Estoy bien.-Le dije, pero claramente no me creyó, porque hizo una mueca.

-Dyl,te conozco, y se que no estas bien, y no te culpo, nadie lo estaría si se hubiera enterado de lo que tu te enteraste.-Me dijo mientras me abrazaba.

-Lose, es estúpido ocultarlo.-Le dije.-Aún no puedo creer que nos este pasando esto, no entiendo porque lo hizo, yo siempre pensé que ella lo amaba, pero a una persona que amas no se la engaña, el la trataba como una reina, nunca le falto nada, siempre era la envidia de todas las mujeres casadas que sus maridos se preocupaban mas por los partidos de fútbol que por ella y sus hijos, y ella lo desaprovecha así. No lo entiendo..-Dije enojada mientras le pegaba piñas al piso.

-Hey hey hey.-Dijo mientras agarraba mi mano.-Te vas a lastimar.-Me dijo mientras acariciaba mi mano. Quede mirando un largo rato nuestras manos unidas.

-Gracias Jack.-Le dije.

-No ahí de que. Chad es mi mejor amigo, y tu lo eres todo para mi.-Al escuchar esas mínimas palabras sentí como si estuviera volando... si ya lo se, exagere, quede en shock. Pero no me lo creí, todavía no, Blaze también me dijo lo mismo, y todo termino mal, no caeré devuelta en ese juego, no ahora, aunque ya este enamorada de el, voy a evitarlo. Tocaron la puerta y yo di un salto de susto. 

-¿Dyl?.-Pregunto Chad desde el otro lado de la puerta.

-Acá estoy.-Dije parándome y abriendo la puerta que Jack avía cerrado.

-Dyl papá....-Estaba diciendo pero vio a Jack sentado en el piso.-¿Que hacían los dos encerrados aquí?-Pregunto mirándonos.

-Chad no.-Dije yo negando con la cabeza.-Solo vino a preguntarme como estaba.-Le dije y el asintió.-¿Que paso con papá?.-Le pregunte mirándolo nerviosa. 

-El despertó.-Me dijo con una sonrisa.-Quiere vernos.-Sin antes decir nada salí corriendo rumbo a la habitación. En la puerta de su habitación mi madre estaba parada. 

-¿Despertó?.-Pregunto, yo no la mire.-Quiero entrar.-Dijo abriendo la puerta pero yo se la cerré apenas llegue.

-Ni se te ocurra.-Le dije.- ¿Que quieres? ¿Terminar con lo que empezaste? ¿Hacer que muera? No te dejare.-Le dije y entre, ella no dijo nada, y cuando pensé que era ella la que estaba abriendo la puerta me equivoque ya que era Chad el que estaba entrando. 

Me senté en una silla que estaba alado de la camilla, Chad agarro una de el rincón y se sentó a mi lado. Agarre la mano de mi papá y no pude evitar soltar unas lagrimas, quería estar fuerte porque se que a el no le gusta que llore, pero  fue inevitable, verlo ahí, con cables por todos lados, con la mascara de oxigeno, tenia una capa de color negro que rodeaba sus ojos. Al agarrarle la mano y el se movió, luego abrió los ojos, esos hermosos ojos que tanto amo y me miro, parecía con mas edad de lo que tiene, lo amo con todo mi ser, aun así es hermoso, no se como explicar su belleza, es uno de esos padre que cuando tus amigas van a tu casa se quedan babeando con solo verlo, ademas todas se sorprenden al saber que tiene 35 años, mi mamá de embarazo a los 16 por accidente de Chad, pero mi padre la apoyo en todo, y a los 17 quedo embarazada de mi. 

-¿Dyl?.-Pregunto casi sin aire.

-Si pa, soy yo.-Le dije forzando una sonrisa.

-Mi amor.-Me dijo.-¿Y Chad?.-Pregunto.

Ⓒ They vs Me #1 ||EN EDICIÓN||Where stories live. Discover now