Hungria x Lector

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Hace muchos años, cuando eras un mocoso, tuviste una hermosa niñera. Era muy amable y cocinaba delicioso.
Sin embargo, conforme comenzaste a crecer, también lo hicieron tus sentimientos. Durante mucho tiempo trataste de negarlos, por miedo a que ella te rechazara. Sin embargo, tu amor a ella llego a un punto donde comenzaste a darte cuenta que si no arriesgabas no ganabas.
-Pásame la pimienta, por favor.-Te pidió la de hermosos ojos verdes. Asentiste con la cabeza para pasarle el pimentero.
La admiraste en silencio mientras preparaba el estofado de carne, hoy venían de visita los hermanos Italia.
-Estás más callado que de costumbre, sucede algo???-Pregunto la de largos cabellos. Negaste con la cabeza un par de veces en cuanto ella te volteó a ver. Sus ojos verdes se encontraron que tus ojos (tco).
-... Sólo pensaba... "Hace mucho que no venían de visita... Esos tres."-Respondiste mientras recordabas a Feliciano, a Lovino y a Nita. Hungría te dio la razón mientras embozaba una sonrisa.
-Tienes razón, ya hacia tiempo que no venían.-Dijo para terminar el estofado.
Miraste el reloj que había en la cocina, faltaban algunos minutos para que llegarán los italianos, así que decidiste tomar un poco de pan, para calmar tu estómago en lo que llegaban.
En eso sonó el timbre de la casa, Hungría estaba por ir cuando le detuviste el paso.
-... Voy yo...-Dijiste para ir a abrir la puerta. Al hacerlo, tres italianos aparecieron.
-Ciao!!!-Saludaron dos de ellos. El tercero sólo hizo una mueca de desagrado.
Saludaste con la mano, para luego hacer un gesto que indicaba que podían pasar.
-Hungría!!!-Saludo alegremente la italiana para abrazar a Hungría.
-Hola, Nita.-Le devolvió el saludo la húngara. Al separarse la menor sonrió bobamente, pasa luego enseñarle una revista. Te acercaste para darle una palmadita en la cabeza, pues aquella chica parecía fascinada cuando lo hacías.
-Ciao, (tn)!!!-Te saludo para después acomodar acomodar el copete que le habías levantado.
-Ve~ (Tn), cómo vas con el papeleo que nos dieron en la junta???-Pregunto Italia para abrir algún tema de conversación.
-... Ya lo termine...-Respondiste seguro de ti mismo. Eras la capital de (tp), tenías que ser responsable para cuidar tu reputación y la de tus superiores. Aunque de vez en cuando el sentimiento de responsabilidad no fuera recíproco.
Después de tener una agradable comida, los chicos se retiraron a su hogar, tenían mucho papeleo pendiente.
-Oh... Nita dejó su revista de vestidos de novia...-Comento Hungría mientras limpiaba el comedor. Dejo de hacer la limpieza y comenzó a pasar con cuidado las páginas de aquella revista. Hungría se veía emocionada viendo todos y cada uno de esos vestidos.
-... Serías una novia muy bonita...-Comentaste decidido, al escucharte la húngara de sonrojo de golpe.
-Qué cosas dices, (tn)!!!-Dijo en voz alta, podías ver perfectamente que estaba avergonzada.
-... Sólo la verdad.-Respondiste mientras te acercabas a la representación de país.
Hungría a pesar de tu acercamiento no retrocedió, se limitó a verte a los ojos.
-... Hoy has estado actuando raro... Primero estas más callado de lo normal... Y ahora... Ahora dices cosas tan... Tan lindas.-Término diciendo en voz baja la húngara. Estabas nervioso, pero, trataste de aparentar toda la calma que pudiste.
-... Hungría... Sabes bien como soy... Podría decirse que "creciste" a mi lado...-Comenzaste a decir manteniendo un tono de voz semi calmado. La castaña mantuvo la vista en tus ojos.
-... Yo no sé hablar sobre amor... Soy verdaderamente un tronco para eso... Pero... Hungría... Te amo.-Declaraste para luego comenzar a sentir el pánico dominando tu ser. Las mejillas de Elizabetha se tiñeron de un rojo aún más brillante que el anterior, sin embargo una sonrisa muy dulce se dibujo en sus labios.
-Ya era hora.-Dijo para darte un suave beso en los labios. Correspondiste algo sorprendido, pero, luego recordaste que era Hungría y pudiste devolverle el beso de una forma más efectiva.
Ahora podrías estar con ella y nadie lo podía cambiar.
Mientras tanto en otro lugar, una linda italiana se preguntaba seriamente donde había dejado su revista de vestidos de novia.

•One-shots Hetalia 2•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora