Tiempo Perdido

10

- ¡Alejate de mi!

Grité mientras corría con todas mis fuerzas por aquel sendero en el bosque. Tenía miedo de mirar hacia atrás; sabía que había alguien siguiendo por la espalda pero no quería ver de quien se trataba, tenía miedo de lo que pudiera ver si lo hacía.

Segui corriendo entre ramas y hojas hasta que llegue a un claro, mire desde lejos como un risco daba final al claro, del otro lado de este se veia varias luces y casas entre los arboles poco frondosos. Cuando estuve más cerca del risco me detuve en seco a pocos metros  de caer en este; era demasiado ancho como para que lo pudiera saltar y demasiado progundo como para que cayera y saliera ilesa.

- ¡Por favor ayudenme! - Grite, deseando que alguien pudiera oirme y salvarme de lo que sea que me estuviera persiguiendo. Escuche como a mis espaldas las pisadas firmes de alguien se acercaban a mi. mire en direccion al ruido y quede pasmada ante lo que estaba viendo.

Su piel ya no era azul, estaba manchada por algo rojo, mis ojos viajaron hasta sus manos en donde tenia dos sacos enormes tambien manchados por aquel liquido carmesí.

- Tu... - Dijo, su voz se escuchaba áspera y ronca - ¡Tú eres la unica que falta aquí! - Exclamó mientras señalaba los dos sacos entre sus mano, para luego voltearlas sobre sí; haciendo que todo su contenido cayera y se esparciera por el pasto.

Deje escapar su alarido cuando vi como las cabezas de todos mis amigos rodar fuera de las bolzas; Tails, Cream, Vainilla, Nudillos...

Shadow...

Lleve mis manos a los costados de mi cabeza mientras gritaba al ver  la exprecion en sus rostros, << Miedo, Horror...>>  

- ¿¡POR QUÉ HACES ESTO?! - Grite mientras las lagrimas corrian por mi mejillas, cayendo al frio pasto. La sonrisa en su rostro se hizo más grande, le divertia verme sufriri de esta manera - ¡RESPONDE! - Exclame, esta vez mientras lo miraba a los ojos. Los suyos eran rojos, nada de esto tenia sentido. Alargo una carcajada mientras caminaba a paso amenazante a mi dirección.

- Alejate... - Susurre mientras daba varios pasos hacia atrás. Ignoro lo que había dicho y apresuro aún más el paso, cuando estuvo más cerca pude captar como un olor putrefacto emanaba de su cuerpo. Era tan desagradable.

- ¡Solo faltas  tu!

Se abalanzó contra mí de golpe, causando que terminara de retroceder; cayendo por el acantilado hacia un abismo totalmente desconocido e incierto.

Abrí los ojos de golpe y me incorpore en la cama, toqué mi pecho en un  intento de saber si esto era real o no; estaba en casa. Trate de calmar mi respiración por unos momentos hasta que funciono.

Desde que Shadow se había ido no podía dejar de soñar con eso. A veces me cuesta demasiado conciliar el sueño, es una situación bastante frustrante. Me levanté de la cama y camine hasta el espejo del baño; solo se reflejaba el rostro de una eriza con grandes ojeras. Me veía espantosa.

Me retire del espejo y prosegui a darme una ducha, solo para deshacerse de la tensión en mis hombros. Ese sueño era tan desagradable, la sangre, el lugar; todo parecía parte de una realidad espantosa y desagradable.

Baje a la cocina para preparar el desayuno cuando mire el suelo; había manchas rojas en él, ¿sangre? ¿Pero porque aquí? Seguí en pequeño rastro de sangre hasta la sala, eran pequeñas gotas, como si alguien herido hubiera caminado hasta aquí. Levante la mirada del suelo cuando el rastro se acabó... ¿Qué demonios-

- ¡Tails!

Corrí desde el pasillo hasta la sala, ¿como había sucedido esto? Observe por unos segundos su cuerpo hasta que note como una mancha carmesí se creaba en su frente. Recosté mi oído en su pecho; suspiré con alivio cuando escuche su corazón palpitar, lo tome con cuidado de los hombros y empecé a zarandear con delicadeza.

- Tails... Tails... ¡Tails! - Mi grito provocó que se sobresaltara e inmediato del incorporo en el sofá, observando todo con una expresión alterada.

- ¿Amy? ¿Q-qué haces aquí? - Realmente estaba desorientado. Se llevo las manos a la cabeza e inmediatamente soltó un quejido, miró sus manos por unos momentos y luego levanto su vista hacia mi - ¿Que me sucedio, Amy?

- Quisiera poder responder pero, yo solo me desperté vi la sangre en el suelo y te encontre a ti, Tails. ¿Realmente no recuerdas nada? - Él solo se quedo en silencio y negó con la cabeza, ¿Qué estaba pasando?

- ¡Es que esto no tiene sentido! - Exclamo Tails mientras le pasaba una taza de café y me sentaba junto a él.

Al parecer solo habia sido una herida superficial en su frente, solo que no sabiamos como es que se la habia hecho y como es que habia terminado en mi casa.

- Tails, primero tienes que calmarte. - Dije mientras tomaba sus manos entre las mias, intentando calmarlo - ¿Qué estabas haciendo antes de perder la consiencia?

- Estaba con Sonic, arreglábamos la avioneta y luego... nada. - Entendía que se sintiera frustrado, es como cuando no sabes donde dejaste un objeto, lo buscas y buscas; pero no aparece hasta después de mucho tiempo. O hasta que dejas de buscarlo, tal vez había que hacer eso.

- ¡Ya se que debemos hacer!

- ¿¡Y qué esperamos?!

- Creo que tienes razon despues de todo - Dijo, mientras se movía un poco debajo de la avioneta con sus llaves - Si buscas algo con desesperación no lo encuentras, pero si no lo haces el viene poco a poco, pero cambiando de tema, ¿como te ha ido en estos días? Hace mucho que no hablamos

Por la forma en la que movia sus colas me di cuenta de que estaba feliz y eso me hacia feliz a mi, no podria imaginarme que algo le sucediera a él, es como el hermano menor que nunca tuve. Un sonoro bostezo me saco de mis pensamientos, mire por debajo de la avioneta y note como Tails estaba estrugandose los ojos con los puños, parecia bastante cansado.

- Mejor lo dejamos para otro día Tails, tienes que ir a dormir - Jale la especie de cama con ruedas en la que estaba acostado debajo de la avione y lo levante con mis brazos, no pesaba tanto.

- No, yo... yo todavia puedo matenerme despierto... - Deje escapar una puqueña carcajada cuando note como valanceaba su cabeza de un lado a otro, claramente no iba a durar más tiempo despierto. Comence a empujarlo con suavidad hasta las escaleras y él entre quejidos sonolientos entro a su cuarto.

Tome las llaves de mi casa y cerré la puerta tras de mí, encaminandome hacia mi hogar, las calles seguían iluminadas pero estaban solitarias, era la única alma que caminaba por ahí. Me sentía vulnerable. Senti un escalofrio cuando una brisa proveniente del bosque a mi derecha me azotó, me abrace a mi misma y mire hacia el interior de dicho lugar... dos tenues destellos rojos en medio de la oscuridad miraban hacia mi dirección; como dos ojos. Otro escalofrio recorrio mi cuerpo, pero este no era por el frío, era el tipo de escalofrío que sientes que algo malo va a ocurrir... esos ojos...

- ¡Oh castañas! - Exclame cuando las dos esferas rojas se comenzaron a mover con rapidez hacia mí.

Inmediatamente corri. No debia molestarme en mirar de quien se trataba para saber que era algo muy malo, ademas de que estaba demasiado asustada como para que mi cuerpo reaccionara a las ordenes que le daba mi cerebro. Mire a mi alrebedor y me di cuenta que estaba en un callejon oscuro, ¡¿Comó habia terminado aquí?!

<<¡Arg! Amy siempre estas distraida>>

Sabía que estaban siguiendo todavía, podía escuchar sus pisadas aceleradas resonar contra el pavimento. Y de un momento a otro sentí como me tomaban del brazo y obligaba a esconderme en otro callejón, taparon mi boca justo cuando estaba por quejarme. Las pisadas siguieron resonando de largo, perdiéndose poco a poco...

- ¿Estas bien? - Esa voz, ¿que hacia aquí?