3/Marzo: Actualidad.

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Con todos los esfuerzos que tenia mantuvo su postura firme hasta que llegó a su casa para dejar a Louis en la habitación y llamar a su padre para conseguirle aquellas amadas pastillas para los omegas y evitar que su aroma aumentará o por lo menos que nos sufriera tanto en su primer celo.

- Vamos Lou, vas a estar bien no es como si fueras a morir-. Harry intentaba darle ánimos desde el otro lado de la puerta.

- Calla Harry... tú no eres el que parece manguera chorreando por el culo-. Aunque aquello no debía ser bueno para su hermano no pudo evitar reír.

- Yo tengo mi celo desde los quince años Louis y este es el primer celo que tienes-. Pudo distinguir uno que otro gemido o jadeo de su hermano y eso empezaba a matar a su alfa.

- ¡El tuyo dura un día y el mio tres! ¡Lárgate ricitos!-. Con todo su orgullo decaído se fue a sentar al sofá ya que sabia que si seguía en aquella puerta no podría evitar intentar tumbar la puerta y entrar para detener el sufrimiento del omega en celo.

- ¡Harry! ¿Dónde esta Louis?-. Su padre llegó agitado junto a un doctor que por su aroma parecía beta.

- En su habitación, no a podido salir de allí desde que llegamos-. Ambos hombres asintieron y el doctor salió directo hacia Louis-. ¿Lo hará estéril?-. Preguntó Harry cuando ya se había ido. Sabia que algunos supresores eran tan fuertes que podrían volver al pobre chico sin poder tener hijos y el poder tener un hijo de su propia sangre era lo que más deseaba Louis.

- ¿Qué? No, sólo le durara lo suficiente para que su aroma disminuya y no tenga que toparse con esos idiotas alfas que intentan abusar de él-. No muy convencido el chico asintió y a los pocos minutos salio el doctor.

- El chico esta tranquilo ahora que le inyecté los supresores pero puede ser que despierte por su celo así que tengan estas pastillas-. Des tomó el medicamento y le dio las gracias por su ayuda.

- Por lo menos tendremos controlado a Louis por un tiempo-. Ambos asintieron y decidieron ir a comer algo antes de que Louis despertara de mal humor.

Dos horas después ambos alfas se encontraban en el patio trasero descansando cuando escucharon los gruñidos de cierto omega que salió de la nada detrás de ambos hombres.

- ¿Por qué no me dijeron que el celo era tan horrible? Sigo sintiendo como si estuviese muriendo-. El chico seguía oliendo a su celo ya que sólo estaba bloqueado.

- El omega sufre más que el alfa Louis, eso deberías de saberlo, en la escuela se los enseñaron-. Des veía a su hijo divertido. El chico seguía sobando su vientre.

- Lo sabía pero una cosa es que te lo cuenten y otra es el vivirlo-. Se sentó al lado de su padre y puso la cabeza en su regazo cuando sintió sus manos en su cabello-. Benditos sean los supresores.

- Dentro de poco tienes que utilizar el otro Louis-. Su padre le recordó.

- Esta bien, de todas formas mañana tengo que conseguir otro para que en la escuela no me acosen-. Recordó a todos aquellos omegas que eran molestados por los alfas y betas que detectaban sus aromas y peor era cuando el celo llegaba de inesperado a mitades de clases.

- Tú no irás a la escuela Lou, papá ya habló y no saldrás de aquí en dos días más-. Harry bebía del té que tenia en sus manos. Sentía su alfa con ganas de querer cuidar de Louis pero daba a entender que era su instinto de hermano sobre protector.

- ¡Yo no puedo quedarme aquí! ¡Me volveré loco!-. Louis se había sobre saltado ante las palabras de su hermano.

- No es que queramos que te vuelvas loco Louis, sólo no queremos que algún alfa idiota te quiera marcar-. Ante aquellas palabras el omega se congeló. Conocía las consecuencias de sufrir su primer celo, su aroma se intensificaría y si por si su olor era fuerte con aquello seria aun más y no quería ser marcado. Todavía no.

- Esta bien, me quedaré aquí-. Se quedó sentado junto a su padre, sin volver a decir ninguna palabra.

2 Días después:

Por fin su celo había terminado y se sentía feliz, el dolor en su pequeña entrada había desaparecido y su aroma estaba controlado gracias a los supresores que su padre le había conseguido, detenían su aroma y un poco su dolor pero a fin de cuentas el celo seguía allí.

- ¡Vamos rizos!-. Harry había olvidado que su puntual hermano por fin iba a regresar a clases ese día.

- Ya voy Lou, no necesitas gritarme-. El alfa rodó los ojos.

- Es tu culpa tardar con tu cabello ¡ya nos vamos papá!-. Louis salió de la casa moviendo sus caderas haciendo reír a su hermano.

- Parece mujer moviendo así las caderas-. Des veía a sus hijos sentado en la cocina riendo por la caminata del mayor.

- Tu estilo no es el más masculino Harry-. El alfa vio a su padre que empezó a reír como loco-. Anda, antes de que venga por ti.

Camino a la escuela ambos chicos iban cantando como locos.

- Si algo malo intentan hacerte Louis me avisas-. Era la quinta ve que Harry le decía aquello.

- Harry ya entendí, sé defenderme sólo-. El alfa asintió y se fue a sus clases.

Durante el día Louis recibía bromas por parte de sus amigos y de Harry de vez en cuando recibiendo miradas de odio por parte del castaño.

- Vamos Louis que por fin tienes el merecido por burlarte de los que tenían sus celos-. Zayn hizo reír a todos pero a Louis sólo hizo rodar sus ojos.

- Deja de burlarte Zayn, es su primer celo-. Harry defendía a su hermano.

- Pues que se vaya acostumbrando hasta que tenga su alfa-. Niall comía con la miradas de todos sobre él-. ¿Qué? ¿No recuerdan las reglas de los celos?

- ¿Qué reglas Niall?-. Louis veía al beta extrañado. No recordaba absolutamente nada de unas reglas.

- No estas bien hasta encontrar a tu alfa para curarte o usas esos juguetes-. Las mejillas de los omegas se sonrojaron-. ¡No me digan que tanto tú como Zayn usan juguetes!

- ¡Cállate Niall!-. Zayn gritó desde su lugar al lado de Liam.

- Perdón, me es extraño el pensar en ustedes usando esas cosas-. Los dos alfas restantes veían al beta extrañados.

- Deberías cerrar la boca Niall-. Liam le dio un golpe en la nuca.

- Ya entendí, alfas y omegas sin humor.

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Esto es una recompensa por tratar a la novela con tanto amor.

¡Nos vemos!

Lazo equivocado | Larry Stylinson.Where stories live. Discover now