Misteriosamente Mística

Capitulo 3- libro 2

Este día sera contado por Mística.

Regresamos de la entrega de diplomas y medallas de " el diariero", fue emotivo y alentador. Dejaba una gran enseñanza en los que veníamos por detrás de él, y lo mas importante es que había dado un vuelco de 180 grados su vida personal, a partir de hoy dejaría el puesto en la cabina de diario y trabajará en el estudio de arquitectura.
Vestirá de camisa y corbata, y sus manos sólo servirán para crear obras. Siempre lo vi trabajando entre sus hojas romani, sus lápices hb o 2h y el tablero de madera, para que llegara este momento. Me da una enorme alegría saber que progreso y que lo seguirá haciendo. Tiene una mente limpia y productiva, sus cuestiones emocionales son las que le faltan trabajar pero se que él lo logrará.
La abuela viejita, ya con bastón camina hacia él, se apresura para besarle y abrazarlo, sus lágrimas no la dejan decir ni una palabra y se muerde los labios entre sonrisas y dulces miradas, se estrecharon en un cálido abrazo.
Volvimos a la casona, caminando por las calles de tierra, pero todos de punta en blanco.
Ya en la casa todos sentados en la mesa, la robusta dio la noticia de su casamiento, así que de una emoción pasábamos a otra. La robusta había cambiado su actitud luego de volver con la abuela, se había puesto de novia, y estaba muy enamorada. El amor cura todas las heridas, hace olvidar todas las penas, reconforta, anima, nos hace ser solidarios, y saca lo mejor de nosotros. Ella pasaba por ese estadio y a mi me aliviaba.
Pasaron unos días y los preparativos del casamiento estaban listos, fue bastante rápido y sin muchos detalles. Habia notado que estaba mas robusta que de costumbre pero no le mencioné nada al respecto. Sólo se realizó una ceremonia con el juez en el registro civil y un brindis en la nueva casita de los recién casados. Al mes nació el primer hijo de la robusta y entendí que esa era uno de los motivos de la veloz preparación.
El verdulero presento su novia en el casamiento de la robusta y pronto se fueron a vivir juntos. Vivieron desde el principio solos y después al enfermar la madre de Lola se mudaron a la casa de ella. El verdulero siempre fue generoso, brindo hasta lo que no tenía, y no tuvo mucha suerte al caer en ese lugar, los hermanos de la chica eran unos aprovechados y viven a costilla del verdulero.
Él no sabía poner límites a la situación, el dinero nunca le alcanzaba, por esa razón comenzó a trabajar de noche en la verduleria y de mañana en una panadería con el reparto de pan. Él me preocupaba, pero no podía hacer nada al respecto, él tenía que encontrarse en su camino, digo que no podía hacer nada porque él tampoco me pidió ayuda. Quizá esa era su elección.
Había pasado un año y yo cumpliré mis 15 años. Etapa deseada para toda jovencita. Me sentía altamente alterada por mis hormonas y mis cambios pero estaba feliz, había encontrado un lugar de disfrute acompañando a los demás y como me había librado de maltratos me sentía plena.
No por mucho tiempo, porque verán lo que después sucedió..

...

Espero les guste el capitulo, les dejo un beso enorme. Y sigan leyendo esta historia porque dará un vuelco inesperado.

Gracias por los votos y los comentarios, son mis amados lectores y los tengo presente en mi ❤