Misteriosamente Mística

Capitulo 1 - libro 2

Se sienta en la cama, esta algo agitada, mira para ambos lados, la ventana que esta a la izquierda se mueve lentamente por la brisa de la madrugada, siente dolor en el pecho, tiene ganas de pararse para ir al baño pero esta atemorizada, mira para arriba, rápidamente mueve sus ojos para mirar la puerta y entre penumbras observa la imagen algo borrosa del anciano con sombrero y bastón. Traga saliva con dificultad, y un fino escalofrío recorre su piel. El estomago arde, tiene una sensación de desmayo, cuando escucha la voz del anciano que dice

 - no vas a poder , el mundo no es para los débiles, te voy a destruir.

Cierra sus ojos e intenta conectar mediante la meditación con su guía espiritual. No hay caso, no puede.
No entiende lo que sucede. Todo se torna mas oscuro.

De repente, el deportista como siempre tan bromista, dice: 

- despierta dormilona, es hora de que laves tu horrenda cara y levantes tu trasero para ir a comprar pan, tengo hambre quiero desayunar.
Mística mueve sus hombros y con gesto de pocos amigos, se dirige al baño para realizar su aseo diario. Sale, toma una bolsa y camina a la despensa.
El deportista es talentoso, es una promesa del fútbol, cada mañana luego de alimentarse bien, toma la colectora del acceso oeste para llegar al club , donde entrena para llegar a ser el mejor del mundo. Tiene gran temperamento para el deporte, es optimista, alegre aunque hay algo oscuro en él, esa parte que oculta pero que existe. Es ocurrente con las bromas y muchas veces el peligroso con eso.
Mística llega de la despensa, deja la bolsa en la mesa y pone la pava para el mate cosido.
- muy bien esclava, así se hace, tenes que atender al rey. Le dice con tono provocador. 
Mística sirve el agua caliente en la taza, coloca el saquito y agarra la leche de la heladera. Toma dulce de leche y unta los panes.
- ves? Sos una verdadera esclava, muy bien. Una risa burlona se le escapa y le mete el dedo en la nariz.
Mística que estaba distraída, pensando en su sueño, le resta importancia a las provocaciones.
El deportista se va, tirando le la ropa sucia en los pies de ella.

El verdulero llego agotado, porque empezó a trabajar de noche en la verduleria y se hace un café con leche con el agua caliente que sobro. Pensando en darse un buen descanso, mira a Mística y le avisa que estaba el bolso lleno de frutas y verduras. A parte le trajo un ramillete de   flores violetas para ella.

- Sabes que? Pronto voy a traer a mi novia para que la conozcan, se llama Lola, trabaja en un jardín maternal, es una buena muchacha. Tenes que ayudar a  madre para que todo este preparado para la cena de presentación.
Mística asintió con la cabeza y sonrió. Estaba contenta por él.
El diariero va a realizar su viaje de egresados, hace un tiempo viene ahorrando dinero para ir cómodo. Le faltan pocas semanas para terminar sus estudios.
La semana pasada le dieron una muy buena  noticia, con el título que va a recibir de sus estudios, podrá trabajar con un importante arquitecto. El diariero sera técnico maestro mayor de obras. De vender diarios como canillita pasará a estar en una oficina. Esto sucedió cuando fue a repartir una revista de arquitectura que le habían encargado al dueño, el diariero fue hasta la casa del arquitecto a llevar el pedido, cuando llego tuvieron una agradable conversación  y el arquitecto capto en el acto que el joven tenia conocimientos al respecto. Pronto se dispuso a que el le trajera los pedidos de revistas y así  entablaron  una relación y el arquitecto propuso que al recibirse trabajará con él. Las vueltas de la vida son así, hay que estar dispuesto a escuchar los llamados.
En la casa todo transcurría normal, la robusta había traído a la abuela con ella, porque ya no podía quedarse sola después de la enfermedad que enfrento.  
Mística pensaba todas las veces que podía en su sueño. Esa voz que escucho y el mensaje que le dejo. La tenían desconcertada.

Espero puedan leer este capítulo, les dejo un abrazo y les agradezco los comentarios que me puedan brindar.