Flowers before Tattoos [larry stylinson]

Capítulo doce.

Capitulo dedicado a: britney33 inadaptommo louhearted

Al llegar al campus derecho, donde estaba ubicado el gimnasio de la Universidad. Harry luego de aparcar el auto seguía apretando el volante con fuerza. Louis en cambio, absorto de todo el alboroto fuera del auto continuaba con su mirada gacha jugueteando con los pequeños y delgados dedos de sus manos. Harry giró a verlo, pero Louis lo ignoró. Volvió su mirada al frente sintiendo la mirada curiosa de Louis ahora, su vista volvió al castaño este la evitó.

—Esto es estúpido. —Balbuceó Harry, ganando la mirada azul de Louis.

El castaño suspiro tirando de su corbata, veía sus pies los cuales se removían uno sobre otro. —¿Q-qué es e-estú...? Eso. —Harry alzó una ceja con diversión, Louis rodó los ojos y bufó. —¡NO PUEDO DECIR GROSERÍAS!

Harry rió. —¡Pero sí esta tarde me mandaste directamente a la mierda! Y te cito; "¡Vete a la mierda Harry Maravilloso Styles!" —Dijo con una voz chillona, pero mucho más grave que la de Louis.

—¡No hablo así! —El rizado lo volteó a ver con una ceja alzada con una sonrisa ladeada en el rostro. —B-bueno... tal vez sí, pero... no eres maravilloso.

Una carcajada resonó en el auto. —Me ofendes ratoncito, yo sí soy maravilloso.

—No, no lo eres.

'Marimba' proveniente del iPhone de Harry resonó en el silencio incómodo del auto. El rizado sacó el teléfono del bolsillo y el nombre de Troy apareció en su pantalla táctil, volvió a guardar el aparato en el pantalón del traje y suspiró. Limpió el sudor de sus manos pasándolas por la tela de su pantalón. "Llegó la hora" pensó.

—Qué te diviertas y... ¿te vas con tu amiga luego? —Louis asintió y quitó el seguro del cinturón para bajarse del auto. —Okey, hmm... entonces adiós.

Asiente el castaño con la mirada gacha. —Ad-adiós.

Al entrar al gimnasio Harry pudo observar toda la decoración, cortinas negras del techo caían con elegancia desplomándose por el suelo, las coronas en un pedestal arriba del escenario cutre que realizaron y miles de calabazas linternas por todo el lugar. Luces estetoscopias de un tenue color durazno combinaban a la perfección con el ambiente que creaban las luces de las velas dentro de las calabazas. Con una mirada panorámica del lugar, encontró a sus amigos reunidos en la mesa de bocadillos central.

—¿Qué tal? —Susurró con nerviosismo. La música aún no estaba en su apogeo, el DJ estaba un tanto retrasado creando una mirada de pánico en el antiguo y nuevo comité. Troy estaba riendo, el rizado se sumó a su carcajada, pero él solo aportó con una risa nerviosa.

Amelie, fiel a su estilo bufó con molestia y con antipatía preguntó. —¿Lo trajiste?

Harry asintió. —Por supuesto. —Amelie sonrió de lado, le hizo la señal de que agregara el polvillo al jugo y este lo hizo, no sin cerciorarse antes de que nadie estuviera observando, hizo el amague de revolver el "ponche" para servirse un poco, pero este último paso lo omitió. —Está listo.

Troy apareció con una delgada morena pero con grandes tetas cogida del brazo y gritó. —¡A la mierda todo entonces y hay que disfrutar esta mierda! —Bebió un poco de ponche justo cuando el DJ ingresaba a su cabina y comenzaba a mezclar la música electrónica al mismo tiempo de que su asistente comenzaba a jugar con las luces.

Amelie comenzó a bailar con un tipo del equipo de americano, Harry en cambio solo se quedó ahí en la mesa de bocadillos bebiendo de a ratos un poco de ponche pero le había agregado un poco de pisco que traía bajo su chaqueta. Observaba todo, como todos los estudiantes bebían y bebían como locos el brebaje que él y sus amigos habían creado, vio también como un escurridizo chico de la facultad de ingeniería sacó una petaca (muy parecida a la suya, por lo demás) y le agregó todo su contenido, vio también como sus compañeros lo vitorearon y de un rato a otro todos estaban eufóricos y un tanto ebrios. Ignoró todo cuando sintió que la cocaína comenzaba a hacer efecto en su cuerpo, la adrenalina se sentía al rojo vivo prácticamente, Harry no sabía sí la adrenalina venía en frascos con distintos colores, pero a la mierda, literalmente.