El príncipe de las tinieblas; Sekaiichi Hatsukoi {RxT} FINALIZADA.

11. ¿Mas confusiones?

 

11. ¿Mas confusiones?

Las personas que caen en este lugar son consideradas una peste para la sociedad, habiendo faltado a su palabra y pecando en el mundo de los vivos sin importarles el resultado final. No hay mucho error en esas palabras, todos aquí hemos hecho algo que ahora no nos hace sentir orgullosos, manteniendo todos esos recuerdos que nos permitan un mayor sufrimiento con el pasar de los siglos. Una pequeña satisfacción celestial, hacernos agonizar por la eternidad por culpa de nuestras decisiones. Sin embargo, aquellos que hemos llegado hasta aquí por haber confiado en lo erróneo, por haber sacrificado todo por otra persona, cometiendo actos imperdonables por temor al daño que podría causarle a esa persona, ¿Soy patético? Después de haber pasado tanto tiempo en el Inframundo, si, puedo decir que lo soy.

Ya nada importa, el dolor de haber muerto y el sufrimiento de tener una eternidad para arrepentirme ¿Qué importa? El tiempo no puede regresar en sí, el Hiroki que dejó la tierra hace muchos años atrás no es el mismo que hoy camina sobre los Avernos. Lo sé, no importa cuánto lo lamente, nada cambiará. Así crea que pueda seguir, lo que he hecho seguirá persiguiéndome. No lamento lo que hice, al menos una de ellas, y quizás sea esa la verdadera razón por la que termine de esta manera. Acabar con su vida, lo haría de nuevo si él estuviera en peligro, así me odies una vez más.

Lo supe al verlo, al transcurrir mucho tiempo aquí comenzamos a volvernos uno con este lugar, convirtiéndonos finalmente en demonios que defenderán ciegamente el trono. Criaturas que dejarán de racionar y se consumirán en su propio caos. Ver a través del chico nuevo no fue difícil, ese pasado que lo convierte en alguien vulnerable, el mismo pasado que lo trajo aquí y ese que lo ha convertido en una persona dura. Ver tu agonía, ¿Por qué se siente tan familiar? Traicionar o ser traicionado, ¿Está bien si nos considero iguales?

¿Cómo lo pude evadir?

¿Por qué me duele tanto todo esto?

—Bienvenido al infierno, hijo— levanté mi mirada encontrándome con esa sonrisa burlesca. ¿Cómo permití esto?

No te dejaré, no puedo evadirlo y darte la espalda, el sentimiento de abandonarte es igual que cuando traicione a esa persona. No puedo hacerlo, aunque está vez me aseguraré de cumplirlo. La irá en su mirada era demasiada pero parecía resistirse. Destruir a quien te dio la vida ¿Puedes hacerlo? Después de todo lo que hizo ¿Por qué no lo harías? Claro, sigue siendo tu Padre. —¡Nowaki!— grite al jalar con fuerza de su brazo, esto acabará mal. No quiero que te enfrentes a esto, no cuando es obvio que no estás preparado. Vivir con arrepentimientos está bien, siempre y cuando los hagas con la cabeza fría. 

—¿Permitirás que alguien te controle?—Esa burlesca voz llamó mi atención. Esto es demasiado. Él debe saberlo mejor que yo, las ganas que este chico tiene por arrancarle la cabeza.