♦ Capítulo 12 ♦

4.1K 236 71
                                    

CAPÍTULO XII : «¿Te gustaría salir conmigo?».

— ¿Se te perdió algo, Donovan? — pregunto sarcástica mientras me cruzo de brazos.

Mala idea.

Casi como si su instinto de pervertido se activara, Ethan baja la mirada hacia mis pechos que ahora se alzan un poco. Él eleva una ceja coqueto, me limito a rodar los ojos y pongo mis brazos a cada lado de mi cuerpo. Se aclara la garganta y regresa su vista a mi cara.

— No en realidad. Simplemente revisaba que no se colara la basura — sus ojos se desvían hacia Derek por unos segundos — ya sabes, un campo de fútbol siempre debe estar limpio — remarca con sarcasmo.

Derek suelta un bufido — El burro hablando de orejas — sisea con el mismo tono.

Oh,no. Ya empezaron estos dos.

— Chicos...

— ¿Qué dijiste? — Ethan me ignora por completo y avanza dos pasos más, encarando a Derek.

— Digo que eres un completo estorbo. ¿Por qué no te largas y nos dejas tranquilos?.

Rápidamente me pongo en medio de ambos y estiro mis brazos para alejarlos — No estoy para soportar sus pleitos, muchachos.

— ¿Y si no quiero irme?, ¿es que acaso me vas a acusar? — espeta burlón nuevamente haciendo caso omiso a mis palabras.

Tal parece que hoy es el día de ignorar a Mackenzie.

Derek suelta una risa fingida — Podría acusarte con tu madre — se lleva una mano a la boca — oh cierto, olvidé que eso no se puede porque ni siquiera tienes una, huérfano.

Me quedo de piedra cuando aquellas palabras tan crueles salen de la boca de Derek. Ethan por su parte se tensa, noto como sus manos se vuelven puños y lentamente sus nudillos comienzan a tornarse blancos debido a la presión que ejerce.

Sus labios forman una fina línea y su entrecejo se frunce con fuerza, su rostro se enrojece por lo que yo asumo es ira. Dios, ahora definitivamente se va a iniciar una pelea. Miro a Derek con incredulidad, no sé si lo que ha dicho es cierto pero si lo es, él no tiene ningún derecho a sacarle en cara un tema tan delicado como ese.

— Púdrete, Ackerman — escupe Ethan con rabia y se marcha a paso veloz. A lo lejos se escuchan los gritos del entrenador exigiéndole que se quede, pero él simplemente camina hasta abandonar la cancha de fútbol.

Me quedo quieta viendo el camino por donde se acaba de ir y siento una pequeña opresión en el pecho.

Una mano envuelve mi muñeca con delicadeza por lo que aparto la vista de la salida de la cancha — Mackenzie — Derek me sonríe como si nada hubiera pasado — me pregunta si es que te gustaría ir a...

Me zafo de su agarre — Lo siento pero debo irme — no espero su respuesta simplemente corro en dirección a la salida. No sé por qué, pero tengo que encontrar a Ethan.

— ¡Stuart, el entrenamiento aún no acaba! — escucho que me grita el entrenador Ramírez pero simplemente lo ignoro.

Llego a los vestidores a la espera de verlo allí pero no hay nadie en el lugar. Bufo y me dispongo a buscar en el instituto pero antes retiro mi mochila de deporte de mi casillero puesto que regresar a la cancha sería como un suicidio ahora que Dan está furioso. Deambulo por los pasillos vacíos sin rumbo, no hay rastro alguno de Donovan.

Luego de cinco minutos de fallida búsqueda decido que lo mejor será irme a casa, probablemente Ethan hizo exactamente lo mismo. Doy dos pasos y me detengo en el preciso instante que escucho como alguien azota su casillero. ¿Será Ethan?.

El rey de los idiotas  [EDITANDO]Where stories live. Discover now