Dicen que el universo es infinito, pero nadie advirtió que la locura que alberga lo sería aún más.
Pero en un mundo donde la abuela de Momo es una médium y los alienígenas buscan reproducciónespelusnante, el verdadero terror no está en lo que no ent...
Han pasado varios días. Okarun e Itsuki han sido meticulosos. Sus encuentros por la tarde para investigar la distorsión dimensional son ahora más cortos y extremadamente discretos.
Por sugerencia de Itsuki, siempre se aseguran de regresar a casa antes de que Momo termine su turno en el restaurante, evitando así más escenas de celos y la mirada inquisitiva de la abuela Seiko. Itsuki valora la paz familiar y, a su manera, quiere evitar que Momo la odie o se sienta herida.
Han descubierto más sobre las "Entidades de Vacío": son seres que existen en el espacio entre dimensiones, atraídos por puntos de gran energía negativa o vacío emocional, y su objetivo es consumir la "esencia" de los seres vivos para expandir su propia existencia.
La casa de Momo está tranquila. Okarun está en una habitación, intentando distraerse con un videojuego, pero su mente no puede evitar divagar hacia Itsuki y su secreta misión. Momo aún no ha llegado del trabajo. Jiji y Aira están en la sala, Jiji alardeando de sus músculos inexistentes, Aira bebiendo un frappé en silencio.
Itsuki ha decidido tomar una ducha. El agua caliente corre por su cuerpo y el vapor empaña el cuarto de baño. Cierra los ojos, permitiendo que el agua lave el cansancio de su investigación.
Sus pensamientos están en la distorsión del parque, en cómo sellarla, y en la extraña pero reconfortante presencia de Okarun a su lado durante la investigación. Es un momento raro de paz para ella.
Abre los ojos.
En ese instante, el mundo se detiene. Justo frente a ella, a través del vapor, una silueta oscura y difusa se materializa.
No tiene forma definida, es una especie de sombra vibrante, un remolino de nada y existencias pasadas. La misma presencia fría y desoladora del parque. Una Entidad de Vacío. Es más grande de lo que esperaba, y está a solo centímetros de su rostro.
Suelta un jadeo silencioso. Su mente, entrenada en la serenidad, entra en shock. Sus instintos gritan peligro. Pero está desnuda, vulnerable, y la entidad no es un yōkai que pueda combatir con energía física.
La entidad de vacío no le da tiempo a reaccionar. Es rápida, no física, una mancha que se contrae y se expande.
Con una velocidad espeluznante, atraviesa la barrera invisible que Itsuki había mantenido alrededor de sí misma y se abalanza.
Itsuki siente una punzada helada en la nuca, un escalofrío que no es de agua fría. La Entidad se desliza por su cuello, una invasión fría y pegajosa que se expande por su interior.
Con un gemido ahogado. Sus ojos se abren de par en par, reflejando un terror puro y desconocido. Cae de rodillas en la ducha. Su visión se vuelve borrosa, el mundo se inclina. Siente una voz extraña en su cabeza, un susurro que no es suyo, un deseo de consumir.
Con un esfuerzo monumental, Itsuki se levanta. Sus piernas tiemblan. La Entidad está dentro. Puede sentirla, una presencia intrusiva que intenta tomar el control, devorar su esencia. No tiene tiempo para explicaciones.
La abuela Seiko está cerca, el grupo está en la casa. Debe advertirles.
Con las últimas fuerzas que le quedan, Itsuki agarra su bata de baño, se la anuda torpemente y sale del baño. Su piel está pálida, sus ojos ámbar están inyectados en sangre, y tose, una tos seca y preocupante que resuena en la tranquila casa. Se dirige tambaleando a la sala.
—¡Abuela! ¡Algo... está mal! —su voz es ronca, entrecortada y extrañamente distorsionada.
Jiji y Aira, al escuchar la tos y la voz alterada de Itsuki, se giran. Okarun, desde la habitación, también escucha y sale corriendo al pasillo. Todos ven a Itsuki, temblorosa, pálida, con el sudor frío perlado en su frente.
La expresión serena de Seiko se descompone en una preocupación genuina al ver a Itsuki.
—¡Itsuki-chan! ¿Qué te sucede? —la abuela se acerca rápidamente, intentando tocarla.
Jiji y Okarun también avanzan con preocupación. Pero Itsuki, con un esfuerzo supremo de su voluntad, levanta una mano temblorosa, creando una barrera psíquica débil que los detiene. La tos se vuelve más violenta, Itsuki se lleva una mano al cuello, como si intentara arrancar algo.
Itsuki entre toses, su voz es apenas un susurro, llena de una urgencia desesperada les exige:—¡Aléjense! ¡Todos! ¡Por favor! ¡No se acerquen! Algo malo está por ocurrir. ¡La entidad me ha...! —antes de que pueda terminar la frase, sus ojos, que antes brillaban con una luz espiritual, se apagan.
Su cuerpo se desploma hacia adelante, cayendo inerte. Pero antes de tocar el suelo, su cuerpo se detiene, suspendido en el aire. Sus ojos se abren de nuevo, pero ahora están completamente negros, vacíos, una sonrisa deforme y antinatural se extiende por sus labios.
La voz que sale de su boca no es la de Itsuki, es un murmullo profundo, resonante y múltiple, lleno de un hambre primordial.
La entidad a través de Itsuki comienza a hablar con un eco que eriza la piel.
—Fascinante, el contenedor es fuerte. La esencia es exquisita. Y ahora... este lugar será mío.
El shock es total. Jiji retrocede con horror, Aira cae de rodillas, con las manos en la cabeza por el impacto psíquico. Okarun, con los ojos muy abiertos, se lanza hacia ella por instinto, olvidando el peligro.
La abuela Seiko se pone rígida, su rostro, por primera vez, muestra un miedo genuino.
La entidad de vacío ha poseído a Itsuki y la casa de Momo, el santuario improvisado, acaba de convertirse en el epicentro de una nueva y terrible amenaza.
La ayuda que Okarun quería darle a Itsuki ahora era desesperadamente necesaria, pero ¿cómo se lucha contra su propia aliada poseída?
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DATO
Las habilides de Itsuki Kagemiya
Itsuki es descendiente de un Kitsune (Espíritu del Zorro) de nueve colas (aunque solo puede manifestar dos o tres colas espectrales) con una excepcional afinidad por el Poder Espiritual Puro (similar al Ki o a la energía maldita).
1. Espejo de la Sombra (Kage-utsushi no Kagami) - Habilidad de Alto Nivel. Itsuki utiliza el poder de su linaje de Sombra/Santuario para crear duplicados de energía espectral pura de sí misma o de objetos, pero estos duplicados no son meras copias ilusorias. Son constructos de energía espiritual sólida.
Puede manifestar hasta tres "Sombras" al mismo tiempo, que son tan fuertes como ella, e incluso pueden poseer habilidades básicas de otros yōkai que ella haya "absorbido" (con límites claros, por supuesto).
Las Sombras pueden atraer la atención de un enemigo y recibir el impacto, mientras la Itsuki real carga una técnica más poderosa o ataca desde un ángulo inesperado.
Punto Débil: Requiere una enorme concentración y agota su energía más rápido que cualquier otra habilidad. Si una Sombra es destruida, Itsuki sufre un dolor punzante y un retroceso temporal en su reserva de energía espiritual.
