CAPITULO 20

11 4 0
                                    

-¿Estás bien? ¿Me reconoces?—le pregunta Olga Blanchard a París.

París tiene los ojos medio abiertos, si reconoce a Olga, solo que la resaca lo está destruyendo. Lleva dos días en un bar del centro de la ciudad bebiendo como si no hubiese mañana. Está roto, su padre lo odia, sus amigos no están para él. Todo está mal.

—Sí, ¿Qué haces aquí? —le responde levantándose e intentando acomodarse. - Creí que estabas en Inglaterra.

Olga baja la cabeza, su relación con ese empresario inglés no duró mucho.

-Sí, estuve un tiempo, ya volví. A ti, ¿Qué es lo que te pasa? Estás sucio de la ropa, hueles a mucha bebida y pareces un indigente.

—Cosas de la vida. - París sonríe. - Me ha ido mal.

Ella se sienta frente a él.

-¿Qué hay de nuevo? ¿Acaso estás en crisis?

—No, ninguna crisis. Mi vida se está yendo al carajo solo eso.

—¿Tu vida yéndose al carajo?—Olga ríe un poco. - Tu vida ya se fue al carajo desde hace mucho, lo que te salvó fue la asociación empresarial con Tucker... ¿Cómo está él? ¿Sigue vivo?

Trovato siente que todos sus problemas son por culpa de Tucker.

-Sí, por desgracia, sigue vivo, al parecer ha encontrado un motivo para vivir ahora.

Olga vuelve a reírse. Ella salió con Tucker un tiempo, le gustaba mucho, pero sus actitudes suicidas acabaron con sus ilusiones. Ella concluyó que Tucker es un ser detestable.

-¿Un motivo para vivir? ¿Te sientes bien? Tucker no quiere vivir, no se quiere así mismo, no quiere a nadie, no siente nada por el mundo.

-Me siento bien, Olga. - París bebe un poco de vodka. - Hace poco vi a una chica salir de la casa de Tucker y días antes él me dijo que ya no está en sus planes morir, ¿no es raro?

La risa se borra del rostro de Blanchard, a ella nunca la invitó a su casa, le advirtió que se quería morir y que no buscaba nada serio más que algo casual.

-¿Quién es ella?- le pregunta muy seria.

París se ríe, se burla de cómo Olga cambió de actitud repentinamente.

-¿Qué pasa? ¿Estás celosa? ¿Qué no Tucker es detestable? No la conozco, no tengo la menor idea de quién puede ser. Estoy investigándolo apenas.

-Bien.- Olga se levanta.- Gracias por las novedades y vete a bañar que apestas.

-De nada, Olga, y tienes razón, apesto, pero nada apesta tanto como tu situación. ¿Te corto el inglés, verdad? ¿Ya noto lo venenosa que eres?

—¡Imbécil!—le grita ella y sale del bar.

París ve a Olga salir del bar y se sirve más vodka. Así como Tucker contrató a Ax para investigar París, también contrató a sus detectives para que busquen a la mujer que él cree le ha dado motivos a Tucker para vivir.

En su casa, Tucker por fin ha logrado invitar a salir a Vange, le ha pedido verse en el edificio donde se conocieron e ir por un café después. Vange no dudó en aceptar la propuesta, ambos sonríen frente al teléfono releyendo los mensajes que se han mandado, el gusto es mutuo. Es bueno que comiencen a llevarse bien, porque ambos se necesitarán... lo que está por venir no es del todo bueno.

UN BUEN DÍA PARA MORIRWhere stories live. Discover now