CAPITULO 18

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La enfermera termina de extraer la sangre de la vena de Ignacio y le pide sostener el algodón. Un rato, Ignacio obedece y, después de unos minutos que su sangre ya coágulo, aprovecha para darle un vistazo a las cámaras de seguridad, no puede creer lo que ve. Tucker le permitió a una mujer entrar a la casa, es muy raro. Tucker siempre dice que su casa es sagrada y que ninguna mujer merece entrar allí. Ignacio se ríe, presiente que esa mujer le ha robado los suspiros a Tucker, eso lo pone feliz. Desea tanto que él esté bien.

Ignacio Dree en realidad se llama Ignacio Castejón. Luego de perder a su padre y quedarse solo viviendo en las calles, tuvo la fortuna de toparse con el empresario argentino Facundo Dree. Facundo lo adoptó, le dio estudio y, más tarde, lo recomendó con Marcos Latimore para que fuese su chofer y guardaespaldas. Ignacio tenía apenas veintidós años cuando comenzó a cubrirle la espalda a Latimore, lo vio crecer como empresario, casarse y vio cómo después de tantos tratamientos lograron él y su esposa concebir a Tucker.

La realidad es que Ignacio recibió muchas ofertas de trabajo en otros estados después de la muerte de su jefe, pero algo no le permitía irse. Tucker estaba solo, pequeño y no quería que él creciera solo sin nadie con quien hablar, como a él le sucedió. Ignacio mantenía una relación con Kelly Tilton, duraron mucho, no obstante, Kelly sentía que Ignacio cada día le pertenecía más a Tucker que a ella y el día que la situación le hartó lo puso a elegir entre ella y el niño. Dree no lo pensó, aunque Kelly le gritó que la vida le iría cuidando a un niño que no era suyo. Le pidió irse, no iba a dejar a Tucker solo nunca.

Ignacio apaga su celular y cierra sus ojos un momento, en su mente vuelve a ese veinticinco de mayo en que Marcos se fue para siempre, es verdad lo que él le dice a Tucker, Marcos no le dijo nada más por teléfono ese día, pero él recuerda que días antes tuvo una discusión muy fuerte con Vidal y John. No recuerda tanto el tema que se debatía, sin embargo, cree que estos dos hombres tuvieron algo que ver con su muerte. A veces quiere decírselo a Tucker y a veces prefiere guardárselo. No quiere que Tucker busque, no quiere que él encuentre algo porque no sabe de qué podría ser capaz.

UN BUEN DÍA PARA MORIRKde žijí příběhy. Začni objevovat