Lady Birdwhistle

Capítulo 38

- Buenos tardes señora – Chloé es la primera en hablar – venimos desde muy...

- Necesitan algo de mí, lo sé – todos la miramos expectantes – todos son unos crías que siguen sin poder quitarse el pañal, que se hayan atrevido a venir hasta esta parte del continente solo para buscarme tiene un interés de trasfondo – la mujer solo nos observa sin emitir ningún gesto mientras nos observa recargada en el umbral de su puerta.

- Nosotros queremos hablar de un tema muy importante, pero debe de ser en privado – explica un poco Chloé con la voz un poco agitada.

La mujer solo suelta un suspiro profundo permitiéndonos entrar a la casa, al pasar a su lado no puedo evitar sentirme un tanto intimidada con su mirada profunda. Al entrar a la vieja choza mi vista inmediatamente comienza a viajar por las cuatro paredes sucias del lugar que solo cuelgan pequeñas estanterías con libros y algunas plantas.

Los chicos inmediatamente se sientan en el pequeño sofá mientras que Amber me toma de la muñeca jalándome hacia ella de forma protectora, yo solo puedo observar el lugar que se encuentra en penumbras y lleno de polvo.

- Necesitamos su ayuda, pero necesitamos que sea discreta con el tema y no nos delate – pide Chloé.

- No estoy para niñerías, hablen ahora – exige la mujer completamente seria.

- Usted es una bruja – hablo por primera vez llamando su atención – quiero que me enseñe todo lo que usted sabe – le pido con la voz un poco temblorosa, la mujer impone mucha presencia.

- ¿Bromeas? – me pregunta con tono burlón - ¿Por qué yo? Deberías de pedirle a tus padres que te enseñen.

- Soy una hibrida – la interrumpo haciéndola abrir la boca con sorpresa – mis padres no lo saben, por alguna extraña razón mi don ha decidido aparecer hasta ahora.

- Eso es imposible, no puede pasar desapercibida una bruja o hechicero tan fácilmente para las criaturas mágicas. Cualquiera puede identificarlos – gruñe la mujer molesta – no pienso ayudarlos, pasé mucho tiempo en un calabozo como para volver por ayudar a una niñata que dice ser hibrida. Si sus padres los llegan a ver conmigo me meteré en serios problemas así que ¡Largo! – nos gritó alterada haciendo que los chicos brinquen como resorte del sofá antes de echarse a correr a la entrada.

Yo solo le di una ultima mirada a la mujer antes de salir de ese lugar con Amber de mi mano. Afuera los chicos ya nos esperaban arriba de las escobas así que las dos nos subimos con ellos antes de ponernos en marcha de regreso.

- Dijeron que ella apoyaría – les digo mientras veo a lo lejos el pueblo.

- Pensé que aceptaría Alice, realmente tenía esperanzas – me dice desanimada Amber.

- No te culpes Am, encontraremos otra solución – le sonrío intentando hacerla sentir bien.

- Te vamos a dejar allá – Ethan me señala una esquina cerca de la plaza – debemos de regresar al internado antes de que noten nuestra ausencia.

Asentí y en pocos minutos estuve sola en el lugar donde ellos me dejaron mientras veía como desaparecían entre las nubes.

- ¿Dónde estabas? – el susurro en mi oído me hizo sentir un escalofrío en toda mi espalda – te hice una pregunta – su voz dominante me sacó por completo del transe en el que me encontraba haciéndome girar, pero justo cuando mi cuerpo estaba por moverme una mano firme y delgada detuvo mi acción – te he hecho una pregunta y no me has contestado, ¿Dónde demonios estabas? – esta vez puedo reconocer perfectamente la voz.

- Profesora Edevane – la llamo intentando alejarme de ella, pero su agarre es más fuerte que yo.

- No Hansley, ahora... - siento su respiración caliente en mi oreja derecha – necesito que me digas en donde estabas, te desapareciste así de la nada. Estabas con la directora y ahora te encuentras lejos de ella, sola del resto. Es peligroso que andes sola por estos rumbos.