Dos caminos

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El ulular del búho había cesado sin que él se diera cuenta.
Ray, exhausto, descansaba contra el tronco de un árbol. Notó el oscuro bosque envuelto en una oscuridad azulada. Ahora podía ver el color del cielo entre las ramas de los árboles. El amanecer estaba cerca.

_No bajes la guardia.

Se oyó una voz.
Él levantó la vista y vio a la figura del largo abrigo, armado con un viejo rifle a la espalda. Era su compañero de viaje, cuyo nombre aún no sabía.
Ray y Emma habían decidido "ir más allá" como había sugerido William Minerva, guiados por este misterioso "extraño" que habían conocido en el refugio. Su destino: "Punto AO8-63, Goldy Pond".
¿Había algo en ese lugar vinculado al mundo humano? ¿Estaba Minerva allí? El propósito de su viaje era ir a las coordenadas dadas en la carta para encontrar las respuestas a estas preguntas.
Habían dejado la estepa para adentrarse en el bosque donde habían sido atacados por demonios salvajes a los que solo lograron vencer arriesgando sus propias vidas.
Emma fue atrapada en ese momento.







No era su miedo a los "cazadores furtivos" ni al "coto de caza".
Lo que lo paralizó fue tener que enfrentar el pasado. El sacrificio de sus hermanos. Yuugo luego susurró las palabras que seguía repitiendo en sus adentros.

_Todo es mi culpa.

Trece años atras, fue él quien había empujado a sus compañeros camino a Goldy Pond.
Después del éxitoso escape de su orfanato, creía que nada podría impedirles realizar su sueño de ir a la mundo humano, utilizando las pistas dejadas por William Minerva. Se convenció de que, uniendo sus fuerzas, lo lograrían, sin lamentarse de una sola pérdida.
El susurro de las hojas se transformó en voces familiares.

(_¿Estan todos listos?
¡Ha llegado el momento de decir adiós a este refugio!)



La última conversación que habían tenido antes de irse resonó en sus oídos. Con las maletas hechas, habían abandonado el refugio, sus rostros no mostraban nada más que determinación y esperanza de encontrar a Minerva y al mundo humano.

(Sí, lo recuerdo...)

Avanzaba por este sendero del bosque que conducía a Goldy Pond.

( ¿Y si ese día no hubiera elegido este camino?
_¡Disfruten juntos de este delicioso bocadillo!)

Así terminó la conversación, con la voz suave de una joven.
La nota que dejó en la caja de galletas había estado allí durante trece años.
Hasta que llegaron nuevos fugitivos.









(Jaja... se suponía que iban a ser mi "última fiestadeté".)

Pero los niños nuevos lo había devorado todo y él había terminado como un idiota lamentándose solo, con su pistola aferrada en la mano, frente a una caja vacía.
Desde el día de su encuentro, nunca dejó de sorprenderse por el comportamiento impredecible de estos recién llegados.
Lo habían obligado a convertirse en su guía tomando como rehén su preciado escondite...






En su cabeza resonaban de nuevo voces y pasos corriendo felices por el refugio. La emoción pasó, y la cara se le palideció.

(No mueras.)

Ese pensamiento silencioso iba dirigido a la chica que había sido secuestrada.
Giró la cabeza y observó al chico de mirada severa que lo seguía.
Nunca más volvería a ver a su propia familia, y no soportaría que otro más tuviera el mismo destino.

(Ay... Demasiado tarde, fui demasiado egoísta...)

Había planeado, durante este viaje, hacer que ambos probaran el sabor de la desesperación.
Volvió a mirar hacia adelante, mientras se reprochaba de su propia estupidez.
La imagen de los nuevos fugitivos se fusionó con los recuerdos de sus antiguos camaradas y de él mismo.
Llenos de esperanza, no les importaban las dificultades que les esperaban, y sus ojos brillaban al pensar en un futuro lleno de promesas.
Él y los otros fugitivos de Glory Bell habían establecido su base en este refugio para prepararse para alcanzar el mundo humano.
En preparación para el viaje, habían aprendido a cazar y manejar armas; habían reunido provisiones de alimentos y confeccionado nuevas ropas.
Todas estas preparaciones se habían.  logrado en un espíritu de camaradería,
pero cuanto más se acercaba el día de la.  partida, era más palpable la tensión.  
Sabían que una vez afuera aún estarían en peligro de ser perseguidos por sus.  antiguos guardianes, y los demonios salvajes que también representaban un riesgo significativo. A pesar de estos temores legítimos, todos habían mostrado su determinación de llegar al punto A08-63, donde se encontraba la clave para llegar a "el mundo humano".
Asta que un día...

THE PROMISED NEVERLAND novels Y Extras(EN EDICIÓN)Where stories live. Discover now