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Charles estaba nervioso, miraba fijamente sus zapatos y su pierna la empezó a mover impacientemente para así ver a las personas que pasaban frente a él con una carpeta en sus manos, sabiendo que no los habían aceptado en aquella empresa. Se acomodó en su lugar y desabrochó los primeros botones de su camisa, apretó levemente su carpeta y levantó su cabeza cuando escuchó que abrieron la enorme puerta de la oficina de recursos humanos.
—Charles Leclerc.
—Si, soy yo — se levantó cuando el hombre mencionó su nombre.
El mayor lo miró de arriba abajo por varios segundos poniendolo a un más nervioso, le hizo seña con su cabeza para que entrara y eso hizo. Lo siguió hasta cerrar la puerta, caminó hasta el amplio escritorio y lo observó.
—Bien, toma asiento — le señaló la silla —¿Has trabajado alguna vez en una empresa como esta?
—No, nunca.
—¿Eres arquitecto? — asintió —¿Ya lo has ejercido alguna vez?
—Estaba trabajando en una empresa más pequeña pero quería otro trabajo para poder ejercer más a fondo lo que estudié — le dijo —El señor Verstappen me recomendó aquí con la señorita Olivia.
Liam soltó una risita y asintió.
—No tienes experiencia — inició —Los empleados que están aquí es porque tienen esa capacidad de poder dirigir bien sus puestos, no importa quien te haya recomendado.
—Pero...
—Solo puedo ofrecerte el puesto para asistente de Olivia — lo interrumpió —Ella es la jefa y su asistente está por aliviarse así que tú serás el reemplazo, si eres bueno quizás te pueda conseguir otro puesto.
Charles lo miró confundido, él no estaba ahí por ese puesto.
—Max me dijo que hablara con la señorita Olivia para que...
—La señorita Olivia a como tú la llamas no está aquí y el que contrata soy yo, eres un novato y no puedes dirigir proyectos así que si quieres el empleo puedes iniciar hoy, sino es así puedes irte — se miraron —Hay más personas que quisieran tu lugar.
—¿Ni siquiera va a revisar mi curriculum?
Negó para así tomar de su café.
—No necesito revisar nada, con solo verte puedo darme cuenta que no tienes experiencia — le sonrió —Es para ahorita tu repuesta.
