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Ambos hombres se sentaron en unas sillas del pequeño jardín que aquella casa tenía, Charles se sentía apenado por lo que había pasado, no quería que el arquitecto pensara que se aprovechó de la situación. Oliver también se sentía apenado por todas las cosas que su padre dijo, se quitó su corbata y la dejó sobre su pierna para así mirar al chico.
—Primero que nada quiero disculparme por la actitud de mi padre, no fue correcto todo lo que te dijo pero es un hombre con una manera diferente de pensar a la nuestra, fue educado de otra manera y desafortunadamente es clasista — aclaró su garganta —Lo siento Charles y siento mucho que hayas perdido tu empleo.
—No hay problema, eso ya no importa, ¿cómo está Olivia?, ¿ella está bien?
—Ella está bien, bastante molesta y furiosa con papá pero estará bien, quería verte pero por ahora es mejor que no se vean. Charles, yo sabía de tu relación con mi hermana y me callé porque Liv era feliz, hemos tenido todo pero nos falta amor — admitió —Sus ex novios han sido unos idiotas y al parecer está enamorada de ti, me dijo que eres increíble.
Bajó su mirada y sonrió.
—Liv necesita amor, Oliver. Es una mujer extraordinaria pero yo nunca voy a poder darle lo que merece, mirame, soy un chico que no sabe ni como pagará las deudas que tiene — lo miró —Me dejé llevar por el amor que empecé a sentir y no pensé en las consecuencias.
Se quedaron en silencio por algunos minutos hasta que el mayor habló.
—Vine a ofrecerte un trato.
—Te escucho.
—Charles, perdón por lo que voy a decir y mi intención jamás será ofenderte, amo a mi hermana y por eso estoy aquí — fue claro y directo —Mi padre nunca te va a aceptar, quiere un futuro diferente para Olivia pero eso puede cambiar.
—No entiendo ¿como que puede cambiar?
—Yo puedo ayudarte pero primero dime ¿realmente estás enamorado de Liv?
Miró hacia otro lado y una pequeña sonrisa apareció en su rostro al recordarla y todo lo que habían pasado juntos, las veces que hicieron el amor en el apartamento que ella tenía y todas las veces que lo abrazaba, lo hacía sentir importante y amado.
—Si, estoy enamorado de ella pero yo no tengo nada y semanas realistas, soy creyente de esa frase que dice, de amor no se vive, quizás por unos días todo sea perfecto ¿pero después?, ¿qué voy a darle?, hay días que mi cartera está en cero — se recargó de la silla —Tengo una familia que sustentar señor Stan.
