💘 C͢u͢p͢i͢d͢o͢ E͢n͢a͢m͢o͢r͢a͢d͢o͢ || M͢i͢n͢l͢i͢x͢ 🏹

Acuerdo

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Era la quinta vez que se había hincado con los palillos, un poco frustrado, bajo el trozo de huevo, y soltó un suspiró bajo.

No era posible que haber despertado en una posición comprometedora con el pelirrojo, le causará tanta distracción.

Él no era un muchachito hormonal, para que ese simple accidente lo calentará. Tal vez, despertar con los brazos de Minho envolviendolo no era gran cosa, pero de ahí a tener el miembro de este en su trasero, era otra cosa. Sin mencionar el aliento caliente en su nuca.

Rayos, de sólo recordar, sus mejillas se sonrojaban y su cuerpo se calentaba.

Lo peor de todo, era que el muy maldito comía su sándwich como si no pasará nada.

"Buenos días, yongbokshi" una suave voz lo hizo alzar la vista de su comida, frente a él se encontraba su amigo el zorro, y a su lado su mayor gruñón, "¿Por qué no nos avisaste que desayunaría en la cafetería?" Se quejó Jeongin, sentándose al frente de Minho, sin ver al pelirrojo.

"Le hubieras dicho, así me dejaba dormir" Seungmin se dejó caer en el asiento, apoyando su cabeza en la mesa, con ojos perezosos "tengo sueño"

"Hyung, no sea perezoso" Jeongin rodó los ojos, llevando un pequeño trozo de manzana a su boca, "necesita hacer ejercicio, miré lo flaco que esta".

"No me provoques, mocoso" sin abrir los ojos, el castaño amenazó con un bufido bajo a Jeongin.

"Mira como tiemblo" se burló Jeongin.

Felix se abstuvo de soltar una risa, al ver el rostro enojado del mayor, a veces no entendia como Seungmin no había matado a Jeongin por lo irrespetuoso, y mucho menos entendía la forma extraña de querer del menor, Jeongin le había confesado hace dos años lo enamorado que estaba de Seungmin, pero su forma de molestar al mayor hasta hacerlo enojar era contradictorio a lo que decía, tal vez esa era su forma de expresar su amor.

"A tu amigo zorro, le gusta el cachorro, ¿Cierto?" Minho comentó, sabiendo que sólo el rubio le escucharía.

"Se llama Jeongin, y si, a él le gusta Seungmin" susurró bajito, para no ser escuchado por sus amigos, Innie ahora intentaba apretar las mejillas del pálido, y este sólo golpeaba las manos del menor.

Parecía que Jeongin le intentará lanzar corazones al mayor, mientras Seungmin los botaba de un sólo manotazo.

"Ante tus ojos expertos, ¿Hay una posibilidad que se enamoré de Innie?" Preguntó, lanzandole una rápida mirada a Minho.

Minho examinó a los amigos de Felix, y frunció el ceño, "no. Sinceramente, no los veo como una pareja".

"¿Seguro?" Insistió.

"Si" con ojos analizadores, barrio la mirada por toda la cafetería, "mira, ese pelirrosa es perfecto para el Zorro".

Felix miró disimuladamente a donde señalaba el pelirrojo, casi asustandose por lo que veía, "no lo creó".

"Créeme él es la excelente elección para tu amigo, nunca me equivoco" anunció, con total confianza.

"Hyunjin, es un mujeriego. Además, es completamente hetero" susurrando bajito.

"Eso no es impedimento para mí" comentó, viendo el asombró en el rostro del rubio, regreso la vista hasta los amigos de este, y vio como miraban a Felix algo curiosos.

"¿Por qué esa cara de susto, Felix?" Seungmin preguntó con curiosidad, captando la atención del mencionado.

Felix pegó un saltito, y tratando de disimular, respondió lo primero que se vino a la mente, "recordé que no he estudiado" sus palabras sonaron tan convincentes que sus amigos asintieron, "será mejor que regrese a mi cuarto".

"Buena idea, creó que todos debemos irnos" Seungmin asintió, poniéndose de pie, "necesito dormir".

"Es un aburrido, Hyung" Jeongin se lanzó sobre el pálido, haciendo que el delgado frunciera las cejas por el sobrepeso en sus hombros.

"Bueno, Hyung, me lo cuida" con una sonrisa burlona, se alejó, siendo seguido por Minho.

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"Eso no es impedimento para mí".

El comentario seguí rondando en su mente, que habrá querido decir Minho con eso, acaso le pensaba lanzar flechas a Innie y a Hyunjin. Si era asi, él se encargaría de golpearlo, antes calvo, que dejar que su amigo se relacione con ese hetero mujeriego.

"¿En que piensas?" Minho salió con un toalla secando su recién lavado cabello.

Cualquier que los viera, dirían que son una pareja. Compartiendo ropa, el mismo baño, y hasta la cama. De sólo pensarlo, se sonrojaba.

"¿Te puedo preguntar algo?" Preguntó, con una mirada sobre sus manos.

"Ya lo estas haciendo" respondió, sonriendo ante la mirada enojada del rubio, "disculpa, que deseas saber" acomodandose en el filo de la cama, miró expectante.

"¿Tus flechas hacen que las personas se enamoren?" Preguntó, curioso.

"En teoría, sólo hace que te sientas fuertemente atraído por alguien. Depende de la persona, si se convierte en amor o en obsesión. La mayoría de los humanos confunden la obsesión con amor" explicó, recordando las palabras que su padre le decía.

Felix fruncio la ceja, al no comprender muy bien, toda su vida pensó que una flecha de Cupido era suficiente para que una persona amara completamente a quién viera, pero al parecer podía dar resultados equivocados.

"¿Si flechas a dos personas al mismo tiempo, se pueden amar?".

"Si, pero como te dije, depende de ellos. Se vuelve algo hermoso o tóxico, por eso evaluamos bien a los candidatos, y sólo si tienen más del noventa porciento, aplicamos nuestra magia".

Con algo de duda, preguntó, "¿Puedes aplicar tu magia con mis amigos?".

"No" respondió tan rápido que sorprendió al rubio, "sólo me bastó verlos un momento para saber que no es su destinó estar juntos".

"Pero..."

"El Zorro puede sentir atracción por el pálido, pero eso es todo, no hay amor".

"Vamos Minho, tal vez si le damos un empujoncito a Seungmin, ellos podrían" no comprendía porque estaba haciendo pucheros al pelirrojo, pero si eso era necesario para conseguir la ayuda de Minho, lo seguiría haciendo. Ya estaba cansado de ver a su amigo triste por ver que el mayor sólo lo veía como amigo, él quería ayudar a su Innie.

Soltando un bufido, se rindió, después de todo quién no diría no a los pucheros de Felix, "ok, pero con una condición" dijo, tan rápido al ver el pequeño salto de alegría que iba a dar Felix.

Este lo estudió con ojos entrecerrados, a espera de lo que diría Minho.

"Quiero dormir contigo".

Con los ojos totalmente abierto, miró al pelirrojo, buscando alguna intención de broma, al no encontrarla, fruncio el ceño. Como se atrevía ese descarado a pedirle tal cosa, él era un hombre que se hacía respetar, y ni por sus amigos sería capaz de dar su cuerpo como pago.

Minho quiso reír ante las muecas graciosas que realizaba el rubio, "entonces, ¿Me dejarás dormir en la cama?. Estoy seguro que si vuelvo a regresar al suelo, mi cuello terminará tenso".

"¿Q-qué?" Las mejillas de Felix se calentaron en exceso, su mente tuvo que mal pensar todo, ahora comenzaba a creer que si era un joven hormonal.

"¿Qué si puedo dormir en la cama?" Sonriendo alegré, gateo hasta el otro extremo, "¿Entonces?".

"Es-esta... bien" y sin esperar un asentimiento del pelirrojo, se camuflo bajo las sábanas, no sin antes poner dos almohadas.

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