Producing Love(G-Dragon)

Capitulo 2.- Encuentro Inesperado

Cuando pude visualizar aquel edificio supe que había llegado. No podía creer lo que veían mis ojos: Era en edificio enorme y se veía demasiado lujoso, de mi boca salió un estúpido "Waaaaooo", con todo y esos nervios insoportables.

Miré al guardia y le pregunte: - Hola, disculpe- traté de poner una cara mostrando amabilidad-¿A dónde me tengo que dirigir?, vengo a las pruebas de cocina- le dije mostrando mi mejor cara.

-Si bueno, solo vaya todo derecho en este pasillo hasta topar pared, gire a la izquierda, encontrará los elevadores, y tiene que llegar al piso 4, ahí verá una sala de espera, y tiene que esperar su turno-dijo aquel guardia amablemente y ofreciéndome un gafete.

-¿Qué es esto?-pregunté con cara de no entender nada.-Este es su pase, sólo valla a donde le dije y espere su turno-dijo con una sonrisa-Disculpe pero ¿No es usted muy joven para cocinar?-dijo un tanto tímido.

Eso me tomó por sorpresa, es decir, jamás había pensado eso, pero al final de cuentas ¡¿Que le importa a ese viejo no?!. ¡Tienes que ser amable Song Hye!, se amble, se amable, que no te gane la ira.

Mostré una gran sonrisa fingida antes de responder.

-¡SI!....lo soy-dije tratando de calmar la ira- pero es algo que amo hacer- se amable, se amable-ya sabe es un don que Dios me dio, y amo cocinar para la gente-mierda que cursi sonó eso- ¿Debería traerle uno de mis platillos algún día?.... ¿Ajhussshiiii?- Ewwwww, ¿lo dije con aegyo?, que mierda estoy haciendooo!

-Aigooo ¡que amable es señorita!, por supuesto que me encantaría- dijo el viejo con cara de emoción. - Bueno ya vaya señorita ¡Suerte!

-Sí gracias- dije con una reverencia y dando un suspiro.

Pero qué demonios no puedo creer lo que acabo de hacer, pero supongo funciono, creo que debería hacerlo más seguido ya comprobé que si lo puedo hacer, pero solo con la gente importante, y creo se tragó todo eso del "Don de Dios", no pude evitar reír ante eso.

Estaba caminando y entre más caminada quedaba más sorprendida del edificio, sería genial si de verdad paso la prueba, de seguro pagan muy bien aquí.

Iba demasiado embobada mirando el edificio que de pronto solo sentí un fuerte dolor en mi brazo, y después estaba en el piso.

-¡¿QUEE MIERDAAA?!-dije con una eminente furia- ¡¿Quién fue el IM-BE-CIL que no ve?!- dije tratando de levantarme y recogiendo todas mis cosas, pues se salieron de mi bolsa.

-¿El imbécil?-oí que dijeron- ¡¿Yo imbécil?!....yo no soy quien está mirando el edificio como si fuera la octava maravilla....¿sabe?- dijo riendo al último y con voz de engreído.

Alcé la mirada y no podía creer lo que veía, era un hombre jodidamente sexy, rubio con lentes obscuros, y con un porte que toda mujer creería es el hombre perfecto, o al menos eso pensé, lucía como si fuera alguien importante aquí.

No podía concentrarme en como contestarle al hombre sexy pero engreído a no más poder, vi como me miraba con cara de asco, y eso fue suficiente para que mi temperamento se convirtiera en pura ira. Recordé que debía ser amable con la gente importante y el de verdad parecía demasiado importante, pero odié la forma en la que me veía, y por supuesto ganó la ira en contra de la amabilidad.

-¡Aquí el único imbécil es usted!....¿Que acaso no ve?-Escupí en tono de insulto y mirándolo con cara de pocos amigos- ¿Le consejo algo?- dije tomando mis cosas- ¡Debería comprarse unos mejores lentes porque esos no le ayudan a ver y echa a perder su apariencia!-le dije y cuando pasé por su lado solo di un leve golpecito en su hombro y le sonreí.