El destino de la casualidad (Camren)

Capítulo 24

Lauren se despertó sobresaltada; acababa de soñar algo horrible. Sin embargo, al abrir los ojos, no reconoció el lugar en el que se hallaba hasta unos segundos después. Estaba en la cama de Camila y, después de comprobarlo levantando las sábanas y mirándose, prácticamente desnuda.  Acababa de hacer el amor por primera vez con su novia, que estaba dormida a su lado, con una mano entre su cara y la almohada.

Mientras que su corazón se calmaba después de aquel susto tan tremendo, Lauren estiró su brazo lo máximo que pudo para coger su teléfono móvil de la mesilla de noche de Camila. Habían pasado casi dos horas desde la última vez que Lauren miró la pantalla de su teléfono, con lo cual, llevaban casi una hora y media dormidas.
Acarició con delicadeza la frente de Camila, en un intento de despertarla sin perturbar mucho su tranquilidad. Camila parecía un ángel, el tono de su piel, en un perfecto moreno, era liso y suave al tacto de la yema de los dedos de la oviverde. Lauren no fue capaz de evitar que la sonrisa que emanó de sus labios la hiciera parecer una completa idiota. La chica de ojos color café fue abriendo lentamente sus ojos, sin que su expresión de tranquilidad llegara a alterarse. Sorió y Lauren amplió su sonrisa ante el gesto de su novia.

-Te has quedado dormida -susurró Lauren tras dejar un tierno beso en el lugar que había estado acariciando.

-Lo sé -rió Camila. -Tú también.

-¿Me quedé dormida antes que tú? -preguntó Lauren frunciendo el ceño.

Camila asintió con la cabeza, mientras levantaba su mano hasta la mejilla de Lauren y comenzaba a acariciarla.

-No quería despertarte, así que me dormí yo también -informó la más pequeña. -Ha sido la mejor siesta de mi vida.

-No sabía que dormir a las ocho de la tarde se considerara siesta -rió Lauren.

-¿A las qué? -preguntó Camila y su expresión cambió por completo.

Camila se apoyó sobre sus codos y estiró sus párpados lo más que pudo. Lauren comenzaba a sentirse inquieta.

-Las ocho -repitió Lauren.

Esta vez, Camila no dijo nada. Sin embargo, se levantó rápidamente de la cama y se tiró al suelo buscando y separando las ropas desesperadamente. Tiró las prendas de Lauren a la cama y comenzó a vestirse ella torpemente.

-¿Qué? ¿Qué pasa? -preguntó Lauren tomando la ropa que Camila le lanzaba al vuelo.

-Mis padres, Lauren -dijo simplemente. -¡Vístete!

Lauren se quedó boquiabierta unos segundos justo antes de reaccionar y ponerse toda la ropa que Camila le tiraba. Se vistió en poco más de un minuto y se arregló el pelo con inquietud y nerviosismo, sin pronunciar ni una sola palabra.

-¿Por qué tanta prisa? -preguntó Lauren. -Ni si quiera han llegado.

-Sí han llegado, Lo -dijo Camila estirando las sábanas de su cama. -Estoy segura de que están en el estudio.

-¿En el estudio de grabación? -preguntó Lauren. -¿Por qué iban a estar en el estudio?

-Ha habido un problema con el mesa de mezclas del estudio de mi padre y hoy iban a usar este, pensé que no sería tan estúpida como para quedarme dormida desnuda y olvidarme de eso por completo.

-¿Qué hay de tu madre? ¿No habría entrado en la habitación?

-¿Y tú sabes si lo ha hecho, Lauren? ¡Estábamos dormidas! -exclamó Camila.

Lauren se acercó a su novia y comenzó a arreglar su ropa, que se la había colocado a toda prisa y parecía que había sido la propia Sofi la que lo había hecho. Luego dejó un beso tranquilizador en su mejilla.