Capítulo 72: " Siempre serás mi numero uno"

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Una vez más despierto en casa de Halcón, pero esta vez él está durmiendo en un colchón en el suelo y me ha dejado a mi la cama, ya que su mamá estaba en casa y no le hacía mucha gracia que dos adolescentes calenturientos pasaran la noche juntos mientras ella estuviese a cargo.

- ¡Arriba holgazán! - Lo desperté tirándole un peluche en la cara.

Entreabrió los ojos con dificultad, pero rápidamente se giró para seguir durmiendo, entonces bajé de la cama y me lancé sobre él.

- Auch - Se quejó - ¡Tú ganas, desperté!

- Yo siempre gano - Le dije con una sonrisa victoriosa - Y hablando de ganar, será mejor que te apresures o no llegaremos a tiempo para el torneo , ¿O es que ya te olvidaste?

- Ojalá pudiera olvidarme. No hago otra cosa que pensar en eso desde que comencé con los entrenamientos - Dijo seguido de un suspiro frustrado.

- Ey, todo saldrá genial, ya lo verás. Solo concéntrate en ti mismo, en tu equipo y en las personas que te quieren. Además, si sientes que pierdes la concentración solo búscame entre el público y ahí estaré gritando tan fuerte que todo el valle se enterará que tengo al mejor novio del universo - Hablé mientras acariciaba su mano.

Nos miramos unos segundos, para sumergirnos en un beso tan tierno como profundo.

*
Finalmente se hizo la hora de la competencia, y ambos llegamos al lugar tomados de las manos. Cuando Halcón se encontró con el resto de su equipo, yo me dispuse ir a buscar un asiento en las gradas, cuando noté que Miguel estaba parado en la puerta cruzado de brazos y bastante pensativo. Ahí fue cuando recordé , lo mala amiga que había sido, otra vez para variar.

- ¡Hey! - Lo saludé colocándome junto a él.

- ¿Tú aquí? ¿No es terreno peligroso? - Preguntó dirigiendo su mirada a mí.

- Bueno digamos que a veces hay que hacer sacrificios. Sobre todo si es por amor. Espera, ¿Yo dije eso?, algo anda enserio mal aquí - Dije entre risas.

- Creo que eso del amor es algo que nunca entenderé realmente - Continúo hablando sin ánimos.

- Yo pensaba lo mismo, pero aunque tengas que soportar mucha mierd# en el camino, si es la persona correcta al final valdrá la pena - Le dije pasando mi brazo por su hombro para darle un pequeño abrazo.

- ¿Quién eres tú y que hiciste con mí amiga? - Bromeó empujándome levemente.

- Como sea, solo quería decirte que siento haberme comportado como imbécil, por milésima vez consecutiva. La noche del baile fue un completo caos, y pude notar que no la estabas pasando nada bien, y aún  así no hice nada - Añadí.

- Créeme que algo hiciste - Dijo riendo. ¿ O piensas que no vi como te fuiste encima de Tory y Sam-

- Ya, lo merezco, sabía que no lo dejarías pasar - Dije aún entre bromas. Pero, lo cierto es que nos debemos una charla como las de antes. Seguro hay muchas cosas que quisieras contarme sobre ti y tu vida, y yo también a ti. Así que si no me odias completamente, saliendo de aquí te invito un helado y nos ponemos al día - Finalicé.

- Pues, de hecho sí hay algo que no le he dicho a nadie, y creo que eres la única persona a la que se lo confiaría - Habló cambiando por completo su cara por un gesto más serio.

Ignorando la voz del presentador  anunciando que en un par de minutos iniciaría el torneo, continué hablando con Miguel.
Lo que me dijo fue sorpresivo, y admito que me dejó pensado. Resulta que al regresar del baile, se sentía frustrado por haber discutido con Sam y fue a pedirle un consejo a Johnny, pero se lo encontró borracho en el suelo de su apartamento. Durante todo este tiempo, Johnny había significado para Miguel prácticamente un padre, más ahora que estaba saliendo con su mamá, pero esa noche algo cambió rotundamente, cuando éste lo confundió con Robby, y ahí fue cuando comprendió que necesitaba respuestas acerca de su origen y descubrir quién era en realidad. Es cierto  que mi familia puede llegar a ser realmente frustrante y en ocasiones solo quisiera correr lejos de ellos y no verlos jamás, pero no me imagino la vida sin ellos, y desearía que las cosas entre nosotros fueran diferentes, al menos como cuando era pequeña. Pero Miguel no tenía ni siquiera esos recuerdos de niño con su padre biológico, ya que nunca lo conoció, y lo único que sabía hasta el momento era que junto a su madre y su abuela debieron mudarse a los Estados Unidos cuando él aun era un bebé, y que el hombre actualmente estaba viviendo en México.
Una idea no dejaba de dar vueltas en la cabeza de mi amigo, pero aunque no me dió tiempo de responderle nada porque tuvo que ir a formarse, admito que no me pareció tan descabellada.

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⏰ Última actualización: Dec 01, 2023 ⏰

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