Capitulo 54: Escoge tu bando.

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- ¿Seguro de que es una buena idea?. Quiero decir, me da igual si me suspenden o no, pero un problema más, y mis padres me inviarán a Suiza, como mínimo.

- Tranquila linda, estás conmigo, ¿Que puede salir mal? .

-  Mejor no responderé eso . Apresurarte y no hagas ruido, yo me quedaré haciendo guardia  y tu trata de abrir la ventana para saltar por ahí.

-  A sus órdenes señorita.

Halcón comenzó a forzar la cerradura que trababa la ventana del laboratorio, y al ver qué esta no se abría dió un puñetazo rompiendo el vidrio.

- ¿Quién está ahí? - La voz de un profesor retumbó entre los pasillos.

- ¡LISTO! - Aclamó Halcón en tono victorioso - Problema resuelto.

- ¡Porque no me sorprende! - Respondí conteniendo la risa.

- ¡Porque no me sorprende! - Respondí conteniendo la risa

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-Vamos que esperas, ¡Salta!.

Sin pensarlo dos veces, atravesé la ventana rota y ambos rodamos por el césped, para luego correr de prisa hasta la valla que separaba el patio del estacionamiento. Halcón trepó por la reja y cuando estuvo del otro lado me una hizo seña para que yo hiciera lo mismo.

- A eso le llamo un aterrizaje perfecto.

- Mejor cállate. Mira todo lo que tuvimos que hacer solo para huir de una clase.

- Valdrá la pena, ya lo verás  - Me sonrió con confianza y extendió su mano para que pudiera levantarme - Ven sígueme, mi moto está por allí.

Nuestros planes se extendieron más de lo planeado, y sin darnos cuenta ya era hora del almuerzo, lo que significaba que solo quedaba una clase más antes de terminar el día. Para nuestra sorpresa pudimos entrar sin problema, ya que los guardias también estaban en su hora de descanso. Ambos llegamos tomados de la mano y fuimos con nuestros amigos del dojo para sentarnos a almorzar. En eso Miguel se acercó a nosotros aparentemente molesto.

- ¿Dónde demonios estaban? Tienen a todos los profesores buscándolos como locos.

- ¿Y tú desde cuando te volviste tan gruñón? - Respondí intentando pellizcar sus mejillas.

- No estoy jugando ahora Trinity, esto es en serio.

- Ya amigo, ¿Que tienes? - Intervino Halcón.

- Escuché lo que pasó con Demetri.

- Ah, con que eso era. Relájate, no es para tanto.

 - ¿Y lo dices así tan tranquila?. Te desconozco.

- Bueno, muchas cosas cambiaron en tu ausencia, ya te acostumbraras. Vamos Miguel, no puedes enojarte conmigo por eso.

Fuera de Combate || Hawk/Eli MoskowitzWhere stories live. Discover now