Agujetas

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Como de costumbre, ambos esperaban en esa banca, tal vez el autobús estaba tardando más de lo normal o tal vez no, el tiempo a veces les parecía diferente cuando estaban muy inmersos en una conversación. Tweek no hablaba mucho, a menos que el tema le interesara o preocupara intensamente, entonces Craig lo escuchaba y miraba todos los gestos y movimientos violentos que hacía para enfatizar su emoción cruda en el tema, pero si era el caso contrario, es decir, que fuera Craig quien estuviera hablando apasionadamente de un tema, Tweek lo miraba y miraba, no era tan expresivo como él pero hacía movimientos suaves que le parecían muy bonitos; en ese momento Craig le contaba que estaba decidido a tomar el curso de maquillaje en cuanto completara el de cabello, al parecer toda la experiencia de las fotos le hizo darse cuenta que su vocación estaba más cercana a esto.

-Seguro que terminarás maquillando modelos o algo así-

-¿Tú crees? Sería muy fantasioso, imagina en 15 años, tú  eres un deportista reconocido y millonario, casado con una super modelo y...

-¿Por que me casaría con una supermodelo?-

-Por que los deportistas siempre se casan con una modelo o cantante, pero eso no importa, deja que termine-

-No entiendo tu fantasía pop futurista-

-Shhh... entonces ella se prepara para su sesión de fotos y tú estas ahí acompañadola como un buen marido ¿pero quien es su maquillista? ¡Taaaan taaa taaaan! ¡El drama! El maquillista de tu esposa super modelo, es tu ex novio de la juventud, no lo habías visto en años y regresa a ti más hermoso y sexy que nunca...-

-Aaah ya veo por donde va esto, no es una fantasía pop futurista, es una cochina fantasía sexual-

-Futurista y tantito pop-

Los dos rieron a carcajadas, Craig como acostumbraba, apenas iba a mover la mano para cubrirse la boca pero sin darse cuenta ya tenía encima la de Tweek. Ese gesto hacía que Craig se sintiera tan querido, porque aún estaba tan metido en su cabeza que su sonrisa era fea y su cuerpo aún no olvidaba el reflejo, pero este chico lindo lo consideraba tan hermoso que había desarrollado el mismo reflejo pero para poder verlo sonreír. Y le gustaba mucho sentirse así, porque la forma en que él lo admiraba era única, lo hacía pedacitos y los juntaba en sus manos, como si ante su compañía y cariño él fuera una masita frágil. Lo desmoronó todito y se fue como arena  sobre su boca.

Hasta ahora había sido él quien más iniciativa tuvo al momento de besar pero en ese momento no le importaba, su grandulón sabía a chapstick de cereza. En un momento algo húmedo le tocó la lengua, probablemente otra lengua y sintió una ansiedad curiosa, siendo un experto en ansiedades de todo tipo, ésta era emocionante, como si tuviera una terrible hambre pero no en el estómago... lo sintió y se hizo atrás de forma suave pero repentina.

-aaah creo que me emocioné- Dijo limpiándose la saliva de la comisura de la boca.

-Ah... si un poco...- Craig era a veces un poco descarado, él igual se limpió los labios, de forma lenta usando sólo su pulgar y mirando directamente  Tweek a quien ya le hervía la sangre. Se negó a seguir viendo eso y cruzó las piernas y acomodó su maleta sobre el regazo, mientras en la cabeza hizo una lista infinita de todas las formas en que podía humillarse ese día por lo que acaba de pasar y de pronto fue más poderosa la ansiedad de cosas que nunca iban a pasar y su cuerpo o al menos cierta parte, se iba relajando.

-¡¿De verdad?! Waoh, me halagas- Trataba de seguridad en su papel sassy pero por dentro estaba algo en shok, era algo que no había pasado antes entre ellos, así que prefirió nisiquiera  verlo por un momento y se puso a revolver entre su mochila, entre todo lo que llevaba encontró el sobre de su paga por las fotos, después de sacar el dinero no le dieron mucha importancia y Craig lo dejó por ahí en algún lugar de su cuarto, probablemente cuando tomó unas libretas de apuntes se fue entre ellas. Como debía entretenerse en algo, lo tomó y empezó a rasgarlo, era un papel bastante delgado y se rompía fácil por lo que se le hizo raro sentir una parte más resistente, lo partió a la mitad y pudo ver algo que parecía un cartoncito de colores; eran dos pulseras de papel como las que ponen en los parques de diversiones o piscinas.

Tiempo de pose: diez  roundsWhere stories live. Discover now