Vendajes

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Al iniciar el día, Tweek no dejó de enviar mensajes a Craig, le preguntaba sobre cómo había dormido, si ya había desayunado, le deseaba buen día, que cruzara las calles con cuidado, o si sus clases eran interesantes. Pero Craig apenas vio el nombre de Tweek en su pantalla, decidió ignorar los mensajes  nisiquiera abrió el primero; estaba molesto todavía y quería hacerlo notar, sin embargo cada vez que su teléfono vibraba en su bolsillo, luchaba internamente por no tomarlo y responderle.

Bebe se dio cuenta que toda la mañana ese zumbido había estado presente.

-Oye ¿no crees que es algo importante?-

-No creo, es Tweek en algún intento de hacerme pretender que nada está mal-

-Y que tal si solo trata de disculparse-

-Pues que lo haga en persona-

-Ay Craig, no seas tan duro, sabes, no toda la responsabilidad es de él....-

Craig la miro de lado como si le dijera algo ofensivo.

[Boombastic side eye]

-... o quizá es una emergencia ¿que tal si algo pasó y necesita avisarte?-

- Mmm No creo ¿Que podría pasar?-

Entonces recordó quien era Tweek y como a veces estaba a punto de sacarse un ojo con un popote, o normalmente llevaba banditas en los dedos porque se cortaba con papel, la vez que se tiró el café caliente encima, incluso no necesitaba ser torpe para lastimarse, justo del otro lado de la plaza debía estar siendo golpeado por alguien en un ring. Así pues tomó de inmediato su teléfono y abrió todos los mensajes, con las tripas hechas nudo del miedo leyó globo tras globo solo para encontrar cosas lindas y melosas.

Craig se volvió un poco rojizo y apretó los labios, usó el celular para cubrir un poco la sonrisa que se le quería escapar.

-Ah si era una emergencia... una emergencia de amor-  Bebe  suspiró, se dejó  caer en la silla y dio una vuelta completa para volver y darle un manotazo suave a su compañero que aún seguía avergonzado.

A pesar de haber sido complacido por un momento, aún no había señal de disculpa, sabía que por mas lindos mensajes que recibiera, no debía olvidar ese asunto pendiente y pretender que nada había pasado, estaba a nada de volver a enojarse pero recibió un último mensaje:

Estoy afuera  te espero para irnos juntos ¿Quieres algo? ¿Un té o agua?

Aun faltaban unos minutos para salir de su clase, pero ya lo veía a lo lejos atraves de las grandes ventanas de vidrio, estaba ahí parado pero no quieto, movía los pies tan rápido que parecía un calentamiento antes de empezar a correr, se pasaba la mano por el cabello aunque sin jalar, solo lo revolvía y lo ordenaba una y otra vez, pobre tipo estaba terriblemente ansioso  y comenzaba a poner nervioso a Craig también.

Cuando era hora de irse, Bebe salió después de despedirse de su amigo, caminó directo a Tweek y lo miró no enojada pero si de forma que desaprobatoria,  le dijo: "tratalo bien" y se fue.

En su mente Tweek pensó " Eso es exactamente lo que estoy haciendo" pero Bebe lo intimidaba mucho, como todas  las mujeres bellas y extravagantes, así como  esas que salían por la puerta que tenía de frente, con sus ropas bien combinadas, su cabello frondoso y suave, sus largas uñas con piedras o decorados, el sonido de sus zapatos algunos de tacón algunos bajos, se reían fuerte con sus labios pintados y a su paso sus perfumes se mezclaban en el aire.

Se sintió completamente abrumado, era demasiada presión a soportar, dió un paso atrás de forma instintiva para huir, pero se mantuvo firme, apretó las manos sobre la correa de su mochila y respiró profundo. Craig ya salía, era fácil verlo sobre la cabeza de todas  siendo bastante alto pero precisamente ese día, tuvo la grandiosa idea de llevar unos botines de cuero que tenían un poco de tacón, no muy altos, 4 o 5 cm siguiendo un corte bastante masculino, pero si ya era  media cabeza más bajo que Craig, ese día apenas y le llegaba  encima del hombro.

Tiempo de pose: diez  roundsWhere stories live. Discover now