Día 9. Cita (Kenjorine)

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-Muy bien, ¿todos están conscientes del plan? -Hoy era un día importante para Kenny, pues estaba a punto de pedirle la mano de matrimonio a su pareja, después de 6 años de relación y con 24 años cumplidos, ese era el momento decisivo de su vida para saber que estaba enamorado de su novia y que quería pasar el resto de su vida haciéndola feliz.

Todo debía salir perfecto y para eso tenía a los mejores amigos de ambos que dieron una lluvia de ideas por horas, cosa que nada le gustaba al rubio hasta que llegaron a ese plan, tan únicos como ambos rubios.

Todo estaría listo para la noche, Heidi, Wendy y Karen se encargarían de adornar la cena enfrente del lago mientras Tweek, Craig y Cartman se encargarían de despejar todo y que todo saliera perfecto para ese momento.

Kevin, Stan y Kyle serían los que se encargarían más del ámbito dentro de las dos actividades antes de la reunión, de la cita en la plaza comercial, en conmemoración a su prima cita como novios y la película favorita de Marjorine que pasarían en el cine por su rebbot que coincida perfecto con la idea pues ahí fue la primera vez que se fijo en ella, que se enamoró, en una salida como amigos donde todo había acabado desastrosamente mal.

Fue por ella el día esperado, le recordó durante días sobre aquella cita y cuando la recogía se veía hermosa con su vestido rosa y su pelo suerte, esbozando una enorme sonrisa mientras salía del departamento donde vivía con su mejor amigo Pip, el prometido de Damien que esa boda sería dentro de 15 días y ellos eran padrinos.

Damien le propuso en su momento que se lo propusiera en su boda, sin embargo, el rubio no quiso porque no quería arruinar el momento especial de sus amigos y que ellos merecían ser el centro de atención toda la noche. Por lo que, el pelinegro le regalo $1,000 dólares para que su propuesta saliera perfecta.

Que buen amigo.

- ¡Marjorine! -Kenny se veía emocionado mientras veía a su novia y la abrazaba mientras le robaba un beso casto y lindo como saludo. - ¡Te ves radiante!

-Gracias Kenny, tú también te vez muy apuesto ¿qué celebramos hoy? -Marjorine lo veía confundida, no había nada especial esta fecha (hasta ahora) y que su novio estuviera tan apuesto le hacía sentir que algo había olvidado.

-Nada importante, quiero una cita tranquila y romántica con mi linda novia ¿tiene algo de malo? -Preguntó el rubio mientras la chica reía y negaba.

- ¡Por supuesto! Sabes que adoro las sorpresas. -Marjorine cerró su casa y ambos salieron a la primera parada.

Pero la vida no es sencilla ¿verdad?

Kenny vio una florería cruzando la calle, se le hizo una buena idea comprarle flores a su chica porque amaba las flores, eran su cosa favorita en el mundo y deseaba tanto hoy hacerla feliz que, al cruzarse, no se dio cuenta y fue atropellado por un auto, muriendo al instante.

La maldición de Kenny era interesante, pues lo llevaba al infierno donde Damien lo devolvía al lugar donde moría, como un favor entre amigos.

-Eres un imbécil. -Decía el chico, pero Kenny lo paro, si hacía eso Marjorine lo iba a recordar y quería que el día fuera perfecto, y no quería que Marjorine viera eso, porque la rubia era la única persona además de Damien y Pip que era consciente de sus muertes.

- ¡Espera!, ¡Necesito que me regresas a la puerta! -Damien se le quedo viendo y suspiró, entendía al rubio.

-Okay, pero recuerda, el tiempo avanza, llevas entonces 5 minutos de atrasó. -Kenny asintió y solo sintió un calor recorrerlo para volver a estar enfrente de la puerta de su novia, tocando.

-Oh, Hola Kenny. -Marjorine se seguía viendo hermosa, haciendo suspirar como bobo a Kenny, buen un error lo comete cualquiera. -Ya estoy lista...

-Te vez hermosa mi cielo. -Alagó nuevamente. -Perdón por llegar 5 minutos tarde...

Simplemente ImperfectoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora