Atadura (Metamorfosis 2)

SIN OPCIONES

-Ahora no podemos hablar, nuestro amigo nos necesita-dijo Hannah.

Me tomo de la mano y salimos de la casa, Hannah había conseguido su propio carro así que de seguro pensaba manejar hasta nuestra antigua ciudad, mi mente estaba congelada, no podía pensar en nada, la felicidad solo me duro dos meses.

-¡Sean inteligentes!-grito Ashley.

-¿A qué te refieres?-pregunte.

-Son tres horas de viaje, de aquí a que lleguen ya se habrán enterado de que su amigo esta muerto y eso no lo traerá a la vida ¿O sí? En el mejor de los casos, su amigo estará vivo pero A- lo tendrá y si van, caerán en su trampa como si fueran presas fáciles.

Maldita sea, ella tenía razón, si llegamos allá y el está realmente muerto nos podrían culpar de algo que no hicimos, y si A- secuestro a John lo mejor sería seguir las ordenes de el, ¿Pero que estoy diciendo? A- esta tras las rejas, no puede hacernos nada.

-Creo que tiene razón-le dije a Hannah.

-¿Qué vamos a hacer?-preguntó.

-Esperar...

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-¿Cómo nos encontraste?-pregunté.

Ashley me sonrió y me observó con calma, esta chica siempre aparecía y desaparecía cuando le apetecía, estaba cansado de todo esto, del misterio, de las mentiras, de temerle hasta a mi propia sombra.

-Vivo cerca-respondió.

-¿Cómo sabes de los mensajes?

-Porque A- está detrás de mí también, no lo supe hasta hace unos días, supe que se habían mudado pero no quería interponerme en su camino, pero ahora es necesario.

-¿Tienes algún plan?-pregunto Hannah.

Tome mis dos manos en un puño, nuevamente habían comenzado a temblar por los nervios, esta situación me estaba superando, me estaba acabando por dentro y por fuera.

-En realidad no, me he puesto a  analizar todo y si queremos acabar con esto debemos hacerlo desde adentro.

-¿Qué?

-Samuel no está solo, el es líder del equipo A- o alguien más los lidera, es lo que trato de decir.

Más de un A- ¡Dios mío! Esto es increíble, eso significaría que existían más de una persona detrás de nosotros, más personas que anhelaban acabarnos, y el hecho de que habíamos metido a Samuel a la cárcel... eso solo los había puesto más furiosos.

-Esto es de locos-dijo Hannah.

-Tenemos que acabarlos-dijo Ashley-. Pero esta vez yo estoy en su equipo, juntos podremos exterminarlos como cucarachas, ¿Están dispuestos a correr el riesgo que esto implica?

Mire a Hannah y ella me devolvió la mirada, unirnos a Ashley implicaría verla como una aliada y no como una enemiga, seria estar juntos y reunir fuerzas para terminar con todo este clan, el corazón me latía con fuerza, las manos me sudaban, definitivamente había comenzado el juego, pero no éramos débiles, ya no.

-Estamos contigo-dije con seriedad, Ashley sonrió con malicia y comenzó a plantearnos un plan para descubrir al líder.

NARRA SAMUEL

 

Las paredes blancas eran muy aburridas, solo esperaba el momento adecuado para poder salir de aquí, había un plan ya trazado y las reglas estaban hechas, no podía echar a perder todo por mis ansias, un policía se acerco a mis rejas  y dijo con voz sebera.

-Tienes una visita.

Sonreí, al fin había llegado el momento, el momento de que el juego se pusiera en marcha, abrió la celda y me puso unas esposas en las manos, me guio por los fríos pasillos hasta la zona de visitas, entonces le vi por primera vez, vi su saco rojo como la sangre, su rostro encapuchado.

-Hice todo lo que me pediste-le dije-. ¿Qué es lo que sigue?

Entonces mi visita levanto la cabeza.