𝓣𝓾𝓹𝓪𝓷𝓪𝓷𝓬𝓱𝓲𝓼𝓴𝓪𝓶𝓪. || 𝓢𝓾𝓰𝓾𝓢𝓪𝓽𝓸.

ℂ𝕒𝕡𝕚𝕥𝕦𝕝𝕠 𝟚𝟛

Onsra.

Sensación amarga que sentimos cuando sabemos que un amor no durará.

Narra Satoru Gojo..

Un año después.

E

stábamos en el patio, les había pedido a ellos dos ayudarme a probar mi nuevo límite, ahora podía tener el infinito activado todo el tiempo e elegir en automático lo que atravesaba mi guardia.

-aqui vamos- avisó Shoko.

Ambos me lanzaron un lápiz e borrador, el Lápiz quedo atrapado en lo lento y él borrador lo atrapé sin problema.

-¡Bien! Salió perfecto.

Cómo estaban sorprendidos.

-¿Qué fue lo que hiciste?- pregunto Shoko.

-¿Una elección automática del objetivo ritual?- pregunto Suguru.

-Si, aúnque siendo precisos el objetivo ritual soy yo.  Puse en automático lo que estaba haciendo en manual, no solo por la intensidad del poder Maldito, también puedo  determinar
masa, velocidad y forma, también me gustaría detectar sustancias tóxicas pero eso, aún es un poco más complicado, ahora puedo dejarél infinito siempre activado usando el mínimo de los recursos.- explique simple.

-¿Activado todo el tiempo? ¿No sé te freíra el cerebro?

-para no hacerme daño dejaré trabajando los rituales Inversos, así tendré un cerebro fresco todo el tiempo, mí simplificación de los sellos es perfecta- dijo empezando a mover el lápiz en mi mano activando la energía de rojo -Rojo~ y Azul~ lanzar múltiples de ellos simultáneamente masó menos va,  y debo mejorar con la expansión de dominio y teletransporte pero con una trayectoria sin obstáculos como la escuela como punto de partida, creo poder lograrlo - hablé y explique -¡Shoko! ¿Me prestas una rata para experimentar?

-¿ahhh? ¿Pooor?

Mire a mí amigo que estaba muy callado, note algo raro en el, estaba más Delgado y no era común en él.

-¡Suguru!- lo llame y volteó a verme -estas más delgado ¿Estás bien?- le pregunté preocupado por él.

-solo es el calor de verano -me respondió, pero algo me decía que no era eso.

-¿Comiste muchos fideos fritos?-pregunte.

Debi preocuparme más, debí seguirte, debí hacer más por ti.

Ese verano estuvimos muy ocupados, ahora era el hechicero más poderoso y fuerte, así que iba a Misiones solo, Shoko no salía mucho por su importancia con los rituales Inversos así que eso dejaba solo a Suguru. Aunque quería estar con él.

Había noches en las que volvía de mis misiones y uqeri ainvitarlo q jugar pero el ya estaba dormido o en misiones, nos estábamos alejando sin darme cuenta.

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-Suguru- hablé estando del otro lado de las duchas otra vez estaba perdido en sus pensamientos, tenía una mirada rara. -¡Suguru!

-¿Ah? ¿Satoru...cuando? ¿Qué hacés aquí?

-vine a bañarme obvió -dijo obvio mirandolo intentando no bajar mis ojos a su musculoso físico, que estaba un poco más delgado.- ¿Tú...estás bien? Parecías distraído.

-si, solo, estoy con sueño, me desvelé buscando maldicones y tragandolas.

-claro, oye deberíamos....

-¡Satoru! ¡Si ya terminaste hay otra misión!- gritó Yaga.

Suspiré y terminé de ducharme.

-mejor para otro día -te dije para irme, otra vez, más misiones.

No me quejó ser el más fuerte tiene sus consecuencias, pero serlo, ser ÉL más fuerte era solitario, cuando volvía ya no era el viaje cálido con Suguru, ya no escuchábamos música juntos o dormíamos juntos, era solitario.

Otra vez, sentía esa oscuridad en la que me ahogaba como antes de conocerte.

Él verano paso en un parpadeó, y cada vez te veía menos. Me dolía en parte.

Quería verte otra vez, salir contigo.

Besarte.

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Murió Haibara, no lo esperaba pero pasó, una mala información de los peces gordos sobre su misión, pero ya me encargaría yo.

Cuando volví, entre a mí cuarto sacándome la chaqueta del uniforme.

-Satoru- hablaste estabas en mí cama sentado.

-Suguru -le hablé mientras me quitaba mis zapatos, quería una ducha.

-te encargaste de la maldición.

-Si, Haibara puede descansar en Paz -dije monótono como me dijo Yaga.

-Satoru- me habló volteé a verlo pero no me espere que me abrazara y menos yo estando semidesnudo. -me alegró de que vuelvas siempre -me dijo bajo y sentía como me apretaba más contra su cuerpo ¿Qué le pasaba? ¿Qué pasaba por tú mente?

-claro que voy a volver siempre, soy el más fuerte -le dije devolviendo el abrazo, te acomodaste y hundiste tú cara en mí cuello, me sentía caliente quería más de estar así, besos, caricias, cumplir con los sueños húmedos que rara vez tenía.

Nos quedamos así, fuimos de a poco a la cama, nos acomodamos para mirarnos, tenía más ojeras de lo común, así que comenzé a recorrer su rostro con mis dedos, acariciando sus mejillas, las pequeñas ojeras bajo sus ojos, su cabello, como había extrañado su olor, su calor corporal al estar así de juntos, todo de él.

No sabía cuánto paso, pero me quedé dormido en sus brazos.

-Te amo Satoru- oí su voz entredormido que hizo que mí corazón saltará, para sentir la calidez en mis labios, luego oscuridad.