𝓣𝓾𝓹𝓪𝓷𝓪𝓷𝓬𝓱𝓲𝓼𝓴𝓪𝓶𝓪. || 𝓢𝓾𝓰𝓾𝓢𝓪𝓽𝓸.

ℂ𝕒𝕡𝕚𝕥𝕦𝕝𝕠 𝟚𝟚

Shoganai.

Aceptar lo inevitable y dejar que fluya.
No sentir culpa por lo ocurrido.

Narra Satoru Gojo.

Él empezó a correr y a saltar realmente lejos mientras era tan veloz que no podía verlo.

No puedo detectarlo porque no poseé poder maldito, ¿Confiaré en mis sentidos? Ohh, claro que no, lo que tengo que hacer es localizar al espíritu maldito que trae enrollado, pero demonios, es muy rápido.

Usaré mí ritual maldito, a la máxima potencia.

Todo a mí alrededor empezó a destrozarse al usar Azul, para destruir todo y que no se esconda.

-Ya no hay nada que me estorbe -quede en medio de todo que quedó destruido reducido a nada para ver a mí alrededor buscándolo.- no podrá sorprenderme, se escondió en el bosque. -pero un ruido detrás mío me tomó por sorpresa y volteé

-¿Qué es eso?- pregunte sorprendido - ¿¡cabezas de mosca?! ¿Las guardaba adentró de aquélla maldición?- me pregunté mientras irritante oído de las moscas estaba presenté. -las usas como señuelo y te ocultas entre ellas.

Así no sabré de dónde vendrá, veo varios puntos ciegos, invocare Azul otra vez, no...espera, su objetivo es...AMANAI.

Volteé bajando la guardia, no llegue a verlo hasta que...sentí su arma en mí cuello.

Esa cosa se abrió paso contra mí infinito, empecé a vomitar sangre, intenté quitarlo pero sentí como arrastró su arma por todo mí pecho abriéndome bastante, me atravesó mi pierna, me tiró al suelo y vi que clavo una daga más pequeña en mí frente.

Mierda... ¿Esté va a ser mí fin?

.

.

.

Latido.

Latido.

-Satoru~♡

Mis oidos zumbaban, demasiado. Y los latidos lentos de mí corazón hacia que mí cabeza palpite.

-Satoru~♡ Despuerta~ aun debo decirte algo~

¿Suguru?

-¿Cuanto más piensas dormir? Satoru~♡.

Debo concentrar toda mí energía maldita en curarme. ¡Rápido!

Aún hay cosas que quiero hacer.

Debemos proteger a Amanai.

Debo volver con ellos.

Debo volver a él.

Suguru, aún tengo que decirte..que

Que yo...

Lo logré.

Había logrado el Ritual Inverso.

Había logrado el poder supremo, lo sentía, toda la energía maldita rodearme, mí cuerpo se curo en segundos para levantarme.

-voy por tí maldito hijo de puta -sentencie y fui a buscarlo.

No tardé en dar con la energía de su maldición.

Él estaba saliendo de vaya saber dónde, no me importa, voy a matarlo.

-Hola~ cuánto tiempo -le dije con burla.

-¿Es encerio?

- más que encerio -le dije y levanté mí cabello mostrando la cicatriz curada -estoy Vivito y Coleando- le dije con burla.