𝐑𝐨𝐨𝐦𝐢𝐞𝐬 𝐨𝐫 𝐁𝐨𝐲𝐟𝐫𝐢𝐞𝐧𝐝𝐬? | JakeHoon

18 - Lavanda

Era una habitación amplia y con una enorme mesa ovalada en el centro. Habían ventanales en la pared a su izquierda y el techo estaba iluminado de forma estratégica. El departamento de compras estaban sentados en la parte derecha de la mesa, mientras que los de Marketing estaban al otro lado. Jake caminó tras Helen, tomando un asiento libre entre ella y una chica que se presentó como Alice. Varios ojos se posaron sobre él y hubo algunos murmullos, pero todos se acallaron en cuanto la puerta fue abierta.

Entró Jungwon, el aura en él era poderosa, absolutamente admirable. A su lado, pero un poco más atrás estaba Jongseong; ambos tenían el rostro en su totalidad serio y Sim podía jurar que lugar donde se posaban sus miradas, era toscamente desmoronado hasta quedar hecho nada.

Ambos se sentaron en cada curva de la ovalada mesa, dándose el frente y a sus lados el resto de empleados.

Por supuesto que sería así, Jungwon era el director de compras y Jongseong uno de los dos postulados a CEO.

Después de un cordial saludo, el director Yang cedió la palabra al resto, esperando escuchar su reporte del mes. Se habló sobre la posible reducción de costos, un corto pronóstico y análisis respecto a sus competidores. Jaeyun procuró memorizar todo lo dicho a la par que estudiaba lo que Helen le había ordenado presentar frente al resto, Jake casi rezaba para que todas esas clases de oratoria e improvisación se manifestaran en su ser justo ahora y no tuviera ningún problema.

Para Sim era muy difícil relajarse, pues no podía evitar prestar atención a la lengua filosa que tenía Jongseong al rebatir las ideas de su equipo y cuestionar cada una de sus acciones. Mientras que Jungwon tenía una manera intensa de mirar al resto mientras defendía su punto de vista que te hacía incluso temer el estornudar e interrumpirlo.

Cuando la palabra fue dada a la encargada de Marketing, Helen, Jake estuvo a punto de pararse pero la mujer lo hizo más rápido y fue ella quien explicó su proyecto al resto.

Afortunadamente, no se le fue cuestionado nada que ella o su equipo no pudieran defender y asegurar el éxito en ello; por lo que fue puesto como tema de mesa la posibilidad de aceptar la propuesta.

Jake estaba desconcertado, ¿no se suponía que tendría que hablar él?

Es decir, estaba aliviado por no tener que presentar un proyecto en el que ni siquiera había participado, pero también tenía ilusión por poder presentarse de forma idónea con el equipo.

Terminaron la reunión un par de horas después. Podría decir que con un par de preguntas más ya lograría estar al día en su totalidad.

—No te dejaría hablar a ti hoy, solo quería ponerte a prueba para saber si te animarías o o no. —Le dijo Helen, saliendo de la oficina. —Si tienes alguna duda, puedes preguntarme en cualquier momento.

Jake asintió, encaminándose hacia su escritorio y reprimiendo una sonrisa en sus labios.

Pasó el resto del día atendiendo sus tareas, sin necesidad de interactuar con el resto de sus compañeros para poder terminar satisfactoriamente e ir despejando de a poco su programación.

Esto hasta que sintió necesidad de ir al baño, por lo que le preguntó a uno de los chicos del departamento y él le dio indicaciones precisas hacia dónde dirigirse, Jaeyun las siguió y llegó pocos minutos después.

Justo cuando saldría de su cubículo para poder lavarse las manos y continuar trabajando, logró distinguir su nombre en la conversación que acababa de iniciar a solo unos pasos de él, por lo que prefirió quedarse dentro del pequeño espacio para no ser descubierto y escuchar con atención.

—Lo vi en la junta, se veía tan nervioso y novato que no puedo tragarme ese cuento de que haya entrado aquí sin ayuda.

—Dicen que el Sr. Sunghoon lo contrató para que estuviera siempre a su disposición, si es que entiendes a lo que me refiero...

—No lo juzgo, fueron solo unas horas y te juro que ya sentía que me apretaban los pantalones, podrá ser un inútil pero lo jodidamente atractivo le sobra.

—Estoy de acuerdo, una lástima que no podamos hacer nada o nos quedaremos sin trabajo... Aunque hoy cuando llegue a mi casa te puedo asegurar que no pensaré en mi esposa cuando me la esté follando.

La conversación finalizó después de un par de risas hasta que se perdieron en el silencio, habían salido del baño.

Jake mordía su labio inferior con fuerza, tenía las manos en puño y la garganta cerrada.

¿Me veía como un inútil?

¿Soy un inútil?

Un suspiro tembloroso escapó de sus labios, no podía pensar en eso ahora, debía enfocarse en su trabajo y después podría sentirse mal.

Salió del cubículo y talló con más fuerza de la necesaria sus manos, las pasó por su cabello y arregló algunos detalles en la ropa.

Una vez fuera del baño, llegó al elevador más cercano para poder regresar al piso que le correspondía, pero se vio interrumpido cuando una mano tomó su muñeca, asustándolo.

Se giró de inmediato y el corazón le volvió al pecho cuando descubrió que se trataba de Nishimura, quien lo veía con una sonrisa.

—Jaeyun, ¿Cómo estás? —Sim abre la boca para responder, pero Riki habla una vez más. —Te ves pésimo, con todo respeto.

Jake frunce el ceño, claramente ofendido. —¿Perdón?

Riki suelta una risita nerviosa. —Perdón, me refería a que te ves desanimado, ¿ya haz comido?

Jaeyun entonces recuerda un pequeño detalle que había olvidado durante el día, tenía que comer.

Niega con la cabeza y el otro chasquea la lengua con desaprobación, Jake reconoce ese gesto, lo acaba de ver en Sunwoo en la mañana cuando mintió con sentirse bien.

Ellos pasan mucho tiempo juntos.

—¿Te parece si te acompaño a comer? —Pregunta, vacilando. —Estuve ocupado todo el día así que tampoco lo he hecho, y la comida de aquí es deliciosa. —Asegura con una sonrisa, el apetito del mayor se abre y no puede evitar darle el sí, estaba hambriento.

Cuando bajaron a recepción para pasar hacia la cafetería, Jake notó a una mujer que parecía especialmente ilusionada de verlo, hizo una pequeña seña con la mano para que se acercara y Jaeyun llegó hacia donde ella estaba, sonriendo chiquito al saludarla.

—¡Sr. Jaeyun, hasta que lo encuentro! —Suelta una risa. —Estuve llamando a su departamento porque necesitaba informarle que le acaba de llegar esto, es para usted.

Sim entonces notó el enorme arreglo floral en recepción, con el lila y blanco como colores predominantes y la lavanda llevándose toda la atención por su agradable aroma.

Se acercó despacio hacia el presente y tomó la tarjeta en él, su rostro se llenó de mil colores al leerla.

“Te espero en casa con la cena lista, celebraremos tu llegada a Courante.

~Sunghoon"

Me da cosita que en este fic casi no comenten :c siento que no les está gustando 😿