Park Minjoon es el CEO de una prestigiosa marca de ropa, cuando su enfermedad avanza, se ve obligado a decidir cuál de sus nietos será el heredero.
Park Jongseong, hombre perfecto que podría manejar la empresa sin problemas.
O Park Sunghoon, quien e...
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Jongseong se encontraba en la Mansión Park viendo pasar a las empleadas domésticas de un lado a otro mientras terminaban de arreglar los últimos detalles de la decoración de navidad, se encontraba sentado en el centro del sofá esquinado, justo a un lado de la puerta principal mientras sujetaba entre sus varoniles manos un catálogo de la colección aún sin lanzar de Courante.
Jungwon apreció por una de las puertas y comenzó a darle órdenes a las empleadas con voz tranquila, en noche buena estaría toda la familia Park, incluyendo a sus suegros quienes es muy poco recurrente que los vea, además de que es su primer navidad viviendo junto a su Jongseongie, y claro, Jungwon como buen anfitrión quería que todo saliera perfecto.
—No, más alto, vamos, si son ventanales tan grandes no hay razón para poner el alumbrado a la mitad. — Decía el hombre.
Jongseong miraba una y otra vez en el catálogo el abrigo que había diseñado para Jungwon, lanzarían muy pocas piezas al mercado y el primer modelo de la misma sería para su próximo esposo, se ajustaba en el área de la cintura y abrazaban el cuerpo con cálidas telas, te protegían del frio en inverno, y Jay, por supuesto, lo había diseñado junto a uno de los trabajadores de Courante con el color favorito de su chico adorado, perla, y con las iniciales de Yang bordados con hilo de oro.
Porque sí, Jungwon desde un inicio había sido claro en que no estaba dispuesto a renunciar a su apellido, él se había esforzado muchísimo durante sus años de estudio para ser graduado con honores y una vez lo logró, fue recibido con los brazos abiertos en Courante.
Yang se podría considerar ambicioso.
Park había incluido en su regalo, además una gran colección de dulces franceses y un libro llamado "Thinking fast and slow" el cual sabía que el menor había estado buscando mucho tiempo con la firma original de Kahneman.
Tomando en cuenta la calidad de libro y el factor de fallecimiento del autor; económico no es la palabra que Jongseong utilizaría para definir su regalo.
—Jongseongie, amor ¿Tienes todos tus regalos listos? Espero que hayas preparado algo especial para Jake porque no me gustaría que se sienta excluido de nuestra familia...
—Lo hice. —Aclaró. —Estaría llegando entre hoy y mañana, también hablé con el personal de Courante para que le dieran la bienvenida mañana, aunque por lo que vi, parece estar un poco incómodo, ¿no crees?
Su novio sonrió compasivo. —Acaba de pasar la primer noche, y hoy fue por segunda vez a la empresa, además, no lo subestimes porque parece estar bastante decidido a progresar...
—¿Por qué lo dices? —Preguntó Jay, porque él no había tenido el placer de mantener una conversación con el rubio, así que no sabía qué clase de persona era además de una cara bonita y timidez señalable.
Jungwon negó con la cabeza. —Olvídalo, mejor ayúdame a traer el muérdago que está en la sala de nuestra casa.
Park alzó las cejas varias veces con picardía y Yang rodó los ojos divertido, dejó un casto beso en los labios del mayor antes de marcharse él también a continuar decorando.
