Luna del inframundo | Hyunlix

Capítulo 27

Desde su palacio, con la mirada puesta en el mar sereno, cuyas olas jugueteaban suavemente con la brisa y el sol brillaba en lo alto, arrojando destellos dorados sobre las aguas cristalinas, se encontraba Poseidón, observando con recelo a Chris, quien jugaba en la orilla con Seungmin.

De pie frente a una de las ventanas, miraba fijamente a su hijo. Su rostro adusto reflejaba una mezcla de orgullo y molestia. Observó con detenimiento cómo Chris reía y se mostraba feliz, completamente absorto en el juego.

Los ojos de Poseidón se clavaron en el brillo que resplandecía en la mirada de Chris. Ese brillo, mezcla de energía y determinación, le recordaba su propia juventud y las travesuras que solía realizar en esos mismos mares. Aunque la emoción de su hijo era contagiosa, también generaba una punzada de preocupación en el corazón de Poseidón.

Las mejillas de Chris estaban coloradas por el entusiasmo y el esfuerzo. Cada vez que levantaba sus manos, el agua obedecía su llamado, bailando y esculpiéndose a su voluntad. Poseidón, acostumbrado a ser el único dueño de tal poder, sintió una inquietud creciente al ver a su hijo compartir sus habilidades con Seungmin.

Desde su posición, podía percibir el vínculo especial que se estaba forjando entre Chris y el hijo de Artemisa. Notó cómo Seungmin, con sorpresa y fascinación, seguía los movimientos de Chris y trataba de emularlos, sus ojos estaban llenos de admiración y respeto hacia el joven dios.

Así, Poseidón permaneció oculto, vigilando con detenimiento cada gesto de Chris y cada reacción de Seungmin. La tensión se dibujaba en su rostro mientras su hijo reía y jugaba con una envidiable paz.

—¡Chris! —llamó, con un tono atronador que hizo estremecer a Seungmin, mientras Chris, con seriedad, dirigió su mirada hacia su padre.

—Nos vemos después. —musitó Chris, dirigiéndose a Seungmin, y dedicándole una leve sonrisa, atravesó la puerta hacia el interior del majestuoso palacio, donde su padre lo contemplaba con una mirada fulminante.

—¿Qué estabas haciendo? —preguntó Poseidón, cerrando la puerta tras ver a su hijo ingresar al salón.

—Le estaba enseñando a Seungmin algunos trucos del agua. —sonrió Chris— Parece tener un gran interés por el mar.

—No. —gruñó el mayor —¿Qué estás haciendo con él?

Chris frunció el ceño y lo observó detenidamente, tratando de comprender las palabras de su padre.

—¿Acaso no he respondido a esa pregunta?

—No entiendes. —repudió Poseidón.

—No, temo que no lo hago.

—En pocos días, se celebrará el cumpleaños de Changbin, el Olimpo estará lleno de festividad.

—Qué emoción. —resopló Chris con sarcasmo.

—Debería emocionarte —rebatió Poseidón. —Te he conseguido una cita, irás con Aurora.

—¿Aurora? —repitió Chris con desprecio.

—Sí, Aurora.

—No asistiré con ella. —replicó el menor, cruzándose de brazos.

—No es una petición.

—¿Me obligarás? —preguntó Chris, entre risas, sorprendido por el descaro de su padre.

—Es tu deber.

—¿Un maldito deber? —repitió con desdén— Lamento informarte, padre, pero debo negarme. Aurora estaba saliendo con Minho.

—Pero eso terminó —espetó Poseidón— Ahora ella será tu cita.