𝓒𝓪𝓹𝓲́𝓽𝓾𝓵𝓸 13

491 42 49
                                    

Jason The ToyMaker

Ops! Esta imagem não segue as nossas directrizes de conteúdo. Para continuares a publicar, por favor, remova-a ou carrega uma imagem diferente.

Jason The ToyMaker

—Duérmete, mi niña, duérmete ya, yo siempre cuidaré de tu sueño.—Le canto a Laila mientras la arrullo como a un bebé en mis brazos.

«Se ha desmayado por la fuerte impresión de lo que sucedió hoy».

—¿Qué harás con esa niña? ¿A dónde te la llevas? Me imagino que la llevarás de vuelta al orfanato, ¿Verdad, Jason?—Pregunta mi amigo Candy Pop al ver que me llevo a mi pequeña en brazos.

—No, ahora su hogar es conmigo, me la llevaré conmigo hoy mismo a mi mundo.—Le contesto un tanto felíz y apurado por sacar a Laila de aquí.

—Jason, espera—, Agarró suavemente mi brazo para seguramente llamar mi atención.—Esa niña no es tuya, devuélvela. Si no quieres entregársela a ese payaso que es su padre, no lo hagas, pero tú no puedes quedarte con esa niña—.

—Laila es mía, es más mía que de Laughing Jack porque yo he estado al pendiente de ella todos éstos años, cosa que él no ha hecho. Me quitó a Scarlett, pero no me va a quitar a Laila también.—Mascullé con rencor y resentimiento.—Laila me quiere a mí, ella quiere estar conmigo, ella no quiere a Jack—.

—Es una niña, todavía no sabe nada.—Replicó con seriedad, algo muy extraño en el bufón.—Te advierto que no puedes tener a la niña contigo, corre peligro a tu lado. Y Jack la encontrará de todas formas, esté contigo o no, Jack la está buscando, está vuelto una bestia—.

—Él nunca verá a Laila, nunca la encontrará, de eso me encargaré yo. Y si la encuentra me enfrentaré a él.—Gruñí estrujando a Laila contra mi pecho.

—¿Ni siquiera se la entregarás a Scarlett, a su madre?—Cuestionó el bufón medio sonriendo, apoyando una de sus piernas en su mazo.

—¿De qué estás hablando? ¿Qué quieres decir? No te entiendo... ¿Qué pasó exactamente Scarlett...?—Cuestioné muy confundido y asombrado porque se supone que Scarlett ya no está entre nosotros.

—Scarlett está viva—, Dijo aquéllo causándome un escalofrío y a la vez felicidad.—Sólo que ella está en manos de Slenderman, no le ha permitido a Jack verla, lo está castigando y torturando con no decirle nada sobre Scarlett. Laughing Jack está en serios problemas—.

—¿Y por qué ese maldito poste de luz tiene a mi Scarlett? ¿Por qué me dices ésto hasta ahora?—Gruñí sintiéndome en un mar de enojo y rabia.—Díme dónde está, que no se atreva a tocarla... ¡SCARLETT ES MÍA COMO LAILA!—

—Cálmate, juguetero, asustarás más a la niña.—Alzó sus manos en modo de paz.—Si no te informé desde antes sobre la situación fue porque desapareciste esa noche con la bebé sin dejar rastro. No volvimos a saber nada de ustedes, hasta ahora que te he encontrado a tí y a la pequeñita—.

«Mi amada Scarlett... ¿Viva...? Pero está en peligro».

A una gran distancia de aquí escucho que llaman a Laila, algo que me alertó.

𝐀𝐏𝐑𝐈𝐋 𝐃𝐎𝐋𝐋┃(Book 3) Jason The ToyMakerOnde as histórias ganham vida. Descobre agora