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- ¿Qué mierda pasó, Taehyung? Llegaste tardísimo a la junta del pueblo. - Espeta uno de sus ayudantes de las importaciones de alimentos. -

- Problemas con el establo y los caballos. - espeta sin más, carraspeando, antes de cruzarse de brazos. - ¿Y bien?

- Hay un problema con las importaciones. - Dice Yoongi mientras le entregaba todas las pautas y demás impuestos. - Aparentemente, hubo uno de los barcos que tuvo problemas en el pacífico. - Yoongi aprieta sus labios. - Por lo mismo no está en condiciones de venir al menos por este mes. - Taehyung carraspea suavemente, pasando una de sus manos por su cabello antes de tomar un elástico de su muñeca y amarrar su cabello en una pequeña coleta con dos mechones en su frente sueltos. -

- ¿De qué eran las importaciones? - murmura algo agitado aún, sintiendo su cuerpo algo cansado. - ¿No hay posibilidad alguna de que las importaciones sean traídas en otro barco? Da igual si demora una semana más en llegar, pero un mes es demasiado.

- Taehyung, es imposible. - Espeta Yoongi antes de sentarse frente a el. - Si hubieras llegado antes te habrían explicado mejor los marinos, pero es que ya se fueron. - Taehyung suspira - ¿No conoces de casualidad algún otro exportador? ¿Quizá algún pariente tuyo lejano que pueda ayudarnos por un tiempo mientras el barco se arregla con algo de alimento? Eres de los pocos reyes que tienen buena manada, estoy seguro de que algún otro reino debe de sobrarle comida.

Taehyung niega suavemente, mirando la libreta con todos los gastos mientras pensaba qué podría ser. Al mismo tiempo, una idea de repente cruzó por su cabeza y por la manera en que pareció expresarlo con su rostro, Yoongi no tardó en darse cuenta. - ¿Si hay alguien?

Taehyung suspira y asiente. - Jeon Jungkook, es el hermano de mi prometida. - Tensa su mandíbula. - Es un príncipe.

A Yoongi pareció iluminarse también el día con aquello. -¡Pues perfecto! Contáctate con él cuanto antes, hay que asegurar al menos que los pueblerinos tengan alimentos durante este tiempo hasta que solucionemos el problema. ¿Bien? Suerte con ello. Me avisas si te llegase a aceptar.

Pero Taehyung no quería.
Ese jodido alfa andaba por ahí y, umh, le jodía que su lobo se sintiese algo territorial respecto a su figura, puesto que significaba que algo no andaba bien con ese chiquillo.

[...]

- ¿He oído bien? ¿Acaso necesita de mi ayuda? - Susurra Jeon mirándole confundido. - ¿Mía?

- Si, Jungkook. Tuya. - Espeta, mirando por la ventana con sus ojos fijos en el omega que andaba batallando con el agua de la manguera. Jeon observa esto, relamiendo sus labios antes de mirar hacia otro lado. - umh. - carraspea el alfa y aparta la mirada. - Necesitamos algo de comida, los barcos de importación de alimentos se demoraran unas semanas y entenderás que esta es una manada grande, necesitamos algo de recursos extras y me preguntaba si tú, podrías ayudar.

Jeon relame sus labios lentamente antes de mirar hacia afuera, fijando su mirada de Jimin. - Claro que si, no podría dejar sin alimentos a un pueblo. - Suspira, sonriendo de costado y volviendo su mirada a Kim.

- Perfecto, agradezco tu buen acto de gentil-

- No tan rápido, Taehyung. - Espeta mientras se hacía ligeramente hacia delante, puesto que estaba sentado en un sillón frente al escritorio del alfa. - Entenderás que ésto es un trato, y así como me estas pidiendo algo, también lo haré. - Taehyung sonríe sin nada de sinceridad ni gracia, era una sonrisa falsa.

- Dime en qué te puedo servir. - dice sin más.

- Me encuentro en estos momentos en un cortejo de omegas. -mira sus manos. - Y bueno, me preguntaba si... de casualidad podría usted, su majestad, presentarme y darme la bendición de uno que en particular llamó mi atención.

Taehyung suspiró levemente, antes de asentir de forma vaga. - Haré lo que pueda, supongo. Pero debería de hablar con la familia del omega en aquel caso.

- No, no me está entendiendo. - Le mira, juntando ambas orbes negras. - Es uno de sus empleados, pasa siempre aquí en el castillo así que asumo que debo pedirle permiso a usted para cortejar a un servidor. - Taehyung frunce su ceño ligeramente, esperando que no sea lo que está pensando. -

- Quién es, Jeon. - Escupe con cierta molestia, por parte de su lobo.

Jeon sonríe de lado, desviando su mirada hacia el omega que ahora andaba algo mojado por haber perdido la batalla contra la manguera de agua, produciendo que el lobo de Taehyung casi que soltara un gruñido gutural desde el fondo de su garganta. - Ese pequeño y lindo omega de ahí.

Taehyung casi que rugió, por poco y empuja el escritorio de la rabia. No tardó en tomar a jeon desde su ropa para estamparlo contra la pared con rabia, produciendo que el de cabello castaño ría, mirando a Kim con una sonrisa ganadora.

- Ni se te ocurra ponerle una jodida mano encima. - espeta Kim con firmeza. - Mantente lo más alejado de ese omega, Jeon. Prometo que si te veo cerca te romperé el jodido cuello. - Decía enfurecido, mientras Jungkook hacia una mueca.

- Umh... ¿Ah si? Estas consciente de que también con ello se queda sin comida tu pueblo, no? - Jeon sonríe de lado, haciendo que Taehyung respire agitado, reforzando su agarre. - Majestad... Si usted no me permite cortejar al omega... - Suspira suavemente. - Le diré a mi hermanita que te estas acostando con ese chiquillo y aparte de ello... vas a tener que acostumbrarte de que tu pueblo por al menos cuatro semanas coma migajas. - Jeon sonríe de lado, hablando con rabia. - Y tú también.

Jeon sonríe, mientras Taehyung gruñía con furia. - ¿Qué dirán en el pueblo cuando se enteren de que estas follandote a un pueblerino estando comprometido? Ah, me daría vergüenza. - Susurra contra la cara de Kim produciendo que este cambiara hasta el tono de sus iris a uno rojo.- ¿Estás enojado, ah? Debería darte vergüenza. - Gruñe Jeon enojado. - Lo dejo en tus manos, Majestad.

Susurra esto último con nada de amabilidad. - Entrégame en bandeja a ese muchacho para que te fijes de una puta vez en tu matrimonio. - Le apunta mientras Kim le soltaba de a poco.- Y yo, como buen hombre de palabra, en dos días tienes el cargamento de alimento aquí para todo tu pueblito. - sonríe. - Piénsalo, tienes hasta mañana nada más, paciencia es lo que menos tengo.

- Eres un hijo de puta. - Susurra entre dientes. - Ni siquiera lo quieres, cabrón. ¿Para qué mierda quieres que se comprometa contigo?

- Para llevármelo. - sonríe, pero Kim otra vez quiso golpearlo - Para que tu y mi hermana vivan en paz sin que este chiquillo esté en el medio. - ahora Jeon es quien se acerca. - Es mi jodida hermana, Kim. - susurra entre dientes. - Su honor está en juego y no dejaré que ese jardinero de cuarta haga que todo el pueblo le tire mierda. - Gruñe, y Taehyung le Gruñe de vuelta con sus puños apretados. - Te veo mañana para saber tu respuesta. - Jeon sonríe de lado. - Adiós, Taehyung.

Se cierra la puerta y Kim casi tiro abajo su estudio, o quiso. Simplemente jadeó, agarrando su cabello para así gruñir con firmeza mirando hacia afuera.
Pero quiso ir a romperle cada puto hueso a Jeon cuando desde ahí pudo ver como se acercó a hablar con Jimin con esa sonrisa estúpida en su rostro.

Jimin era suyo, jodidamente suyo.

Pero quizá.
Solo quizá.
Jeon era lo que necesitaba para de una vez por todas dejar su obsesión con ese chiquillo y cumplir bien con sus labores de marido.

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Gracias por leer!

El corderito del lobo - VminWhere stories live. Discover now