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Sus ojos azules recorren ese gran salón lleno de gente, omegas y betas, algún que otro alfa que pueda haber en el pueblo, pero todos vestidos con sus mejores prendas y la mayoría acompañado de familiares o pareja. Jimin se mantuvo en la misma esquina de la que anteriormente se había marchado ya que justamente tenía una mesa a su costado con increíbles pastelitos.

La música se vuelve algo más lenta en cuanto Taehyung entra en escena, había entrado al salón por otro lugar y no detrás de Jimin, se le veía con una enorme sonrisa cuadrada saludando con su mano en alto a las personas, todos dieron una reverencia, el sonrió aun más ante esto dejando la corona y la capa a un costado, el menor tragó saliva cuando vio la ropa que traía.

El definitivamente era un rey ahora.
Lucía como un príncipe de cuentos de hadas. El típico príncipe que enamoraba a la princesa. (Imagen arriba)

Su lobito chilló, engatusado completamente por como ese traje hacia lucir los grandes hombros del alfa, al igual que ese pecho fornido en el que en algún momento amaría apoyar su cabeza ahí. Sus ojos se encuentran, Taehyung baja del escenario desviando la vista antes de acercarse a su multitud, era lo que tenía que hacer.

Debía escoger una omega... ¿no?

Muchas parecieron hacer una fila, seguidas de sus familiares que no tardaron en alardear lo buenas que eran para hacer cosas de casa, que deseaban tener una familia e hijos. Parecía como si, con lo que relataban, hubieran querido toda su vida ser elegidas por Taehyung.

El alfa es invitado a bailar con una chica de cabello castaño que llegaba aproximadamente a su cadera, era largo, adornado con algunas flores, teniendo un vestido azul precioso que resaltaba su cuerpo. El más bajito traga saliva. Taehyung le sostiene el brazo a la chica y la pista pareció hacer un círculo grande, donde dejaron que el alfa danzara por ahí con la muchacha. Y luego siguió otra, tras otra.

— ¡Jimin! — Suelta un jadeo tapándose la boca cuando su corazón da un vuelco al sentirse asustado, girandose para ver a Sanwoo. Le golpea el pecho mirándole gruñendo.

—Casi haces que se me salga el corazón, idiota. — Pasa sus manitos por su rostro.

— ¿Pero qué estás haciendo aquí? Asumo que ya bailaste con el alfa. — Jimin rasca su cuello, asumía que lo que pasó en el balcón debía... ser secreto, ¿verdad? Por algo bailaron ahí y no aquí. El menor niega. — Pero Jimin..

— No puedo bailar con el. S-soy... soy un chico, Sanwoo. — Murmura con un pucherito. — Sería una abominación, el jamás querría bailar conmigo aquí, delante de todo el mundo. — Sangwoo traga saliva, pasando su manito por debajo de su mentón mirando detrás de Jimin —

— entiendo, Jimin, emh-...

— Aparte de que aquí hay chicas preciosas... ¿qué le haria decir "ah, bailaré con ese omega de ahi... ese que tiraron de su manada y viene sin siquiera sus padres"? El no es... es un alfa medio subidito, y coqueto. No creo que quiera siquiera volver a hablarme en toda la noche, Sanwoo. — El muchacho hacia leves muecas sutiles, Jimin le mira confundido. — de por sí tengo mala fama aquí, ese monarca no creo que quiera siquiera hablarme en público.

— C-claro que no, el es un monarca muy bueno, Jimin, definitivamente. — El menor eleva una ceja. Sanwoo aprieta sus labios, pasando sus manitos por su rostro algo nervioso.

— ¿eh? Pero no te estoy hablando de es-.. — Jimin traga fuertemente saliva cuando ve que sanwoo mira hacia otro lado y le hace una mueca detrás de él. — ¿E-está atrá-...

— Así que, jovencito. — Taehyung le toma de la cabeza para girarle. Jimin traga fuertemente saliva dándole una sonrisa cuando lo hace girar sobre su eje y ahora quedan cara a cara. — ¿Soy un alfa subidito? — Jimin aprieta sus labios negando. — ¿Ah no?

El corderito del lobo - VminWhere stories live. Discover now