-Es cutre, Camz -dijo Lauren cuando la otra chica le dejó aliento.
-Es lo más bonito que me han hecho en la vida -dijo Camila, sincera y con un nudo en la garganta.
Frente a ellas, el tipo que les vendió su primera cena juntas, el hombre del puestos de perritos calientes, sujetaba un ramo de rosas en su mano izquierda y una pizza en su mano derecha. Las chicas debían admitir que aquel tipo pequeño, gordo y con un sombreado bigote gris sobre su labio superior, se veía gracioso. Parecía todo un mariachi.
-¿Cómo has hecho todo esto? Es decir, ¡no es posible! -dijo Camila extremadamente impresionada.
-Nada es imposible cuando tienes a tres amigas que matarían por que tuviéramos sexo en mitad de la calle -dijo Lauren mostrando sacudiendo un poco su teléfono móvil. -Les pedí que lo hicieran en cuanto tuve la oportunidad.
Camila volvió a besar a Lauren, en un intento de demostrar lo agradecida que estaba, aunque ni si quiera supiera por qué lo había hecho.
-¿Karlita Camilita Cabello Estrabao? -preguntó el hombre cuando nos acercamos. Definitivamente era mexicano.
-Sí, algo así -dijo Camila riendo. -Voy a matar a Dinah.
-Al menos no has pensado que fui yo -bromeó Lauren.
-Una chica muy alta vino acompañada de otras dos y trajo esto. Parecía especialmente contenta y me pidió que os dijera que ella sería la capitana de las cam... cam... algo así, ¿cómo se decía...?
-Camren shippers -dijo Lauren en ayuda al hombrecillo.
-¡Sí, eso! Qué palabras tan raras... -dijo el hombre soltando la pizza en manos de Camila. Rápidamente, Lauren se adelantó para agarrar el ramo de rosas. -Las tres parecían emocionadas y me encargaron que te dijera que si decías que no irían a tu casa a patearte el culo.
-¿Decir que no a qué? -preguntó Camila con el ceño fruncido.
El tipejo se encogió de hombros y pareció tierno y adorable.
-A la pizza -se adelantó Lauren, cuando el hombre quiso hablar.
-¿Cómo iba a decir que no a una pizza? -preguntó Camila confundida.
-Gracias por todo, señor -dijo Lauren, empujando a Camila por los hombros y conduciéndola fuera de allí, antes de que el hombre hablara más de la cuenta.
Las chicas volvieron a meterse en el coche, pero está vez en los asientos traseros, con las luces encendidas y dispuestas a tener una cena... diferente.
-¿Por qué no abres la pizza? -preguntó Lauren ansiosa.
Camila le enseñó una sonrisa boba antes de abrir la tapadera roja y que su expresión cambiara por completo. Lauren la miraba atentamente. Con hermosas letras cursivas, típicas de Ally Brooke, y con un rotulador negro, estaba escrito lo siguiente:
"Camz, ¿quieres ser mi novia?"
Más abajo, una letra un poco descuidada, pero con el mismo rotulador permanente:
"Si dices que no, me encargaré de patearte el culo en media hora"
Seguro que había sido Dinah.
Camila cerró la tapadera, absorta, mirando a Lauren con una expresión indescifrable en sus ojos. Sus mejillas ardían y el calor se había apoderado de ella. No es que no tuviera clara la respuesta, sino que no se esperaba aquello allí mismo, aquel día.
-¿Camz? -alentó Lauren. -Estoy esperando.
La chica más pequeña apartó la caja de pizza haciendo que volara por el todoterreno y abrazó a Lauren por alrededor de su cuello mientras plantaba un beso prolongado en sus labios.
KAMU SEDANG MEMBACA
El destino de la casualidad (Camren)
Fiksi PenggemarHay gente que cree en el destino. Hay gente que piensa que lo que pasa no es más que mera casualidad. Pero ¿qué me diríais si os digo que en toda casualidad hay un poco destino? ¿Y que en todo destino hay un poco de causalidad? ¿Qué pasaría si un t...
Capítulo 14
Mulai dari awal