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Mis piernas están estiradas, Giulio a mi lado riendo con el hermano de Evan, Luke. Resultó que a Giulio lo había invitado Chris y Luke, era obvio que Evan vendría. Hay otro hermano, el mayor, tiene 32 y se llama Ernie y uno que es más pequeño que Luke, Dean, tiene 21. Son cinco hermanos y el único que me parece guapo es Evan. Qué maldita estoy.
La fogata brilla fuertemente y detrás de ella, los ojos de Evan me ven. Idiota, estúpido cara de pezón!
Me sonríe de lado y yo decido que es mejor no torturarme más. Termino mi tequila y me paro, preparándome para irme. Giulio me agarra del tobillo y levanta la vista para verme.
-A dónde vas, nena?
-A cagar.
Él abre sus ojos ampliamente y luego se ríe. Qué?
Esperen.
Acabo de decir en voz alta de que iré a cagar?
Mierda!
Sonrío con timidez y me voy a la cabaña. Voy cantando Like a Virgin en todo el camino, a todo volumen, moviendo mis caderas en mi baile de la victoria y de vez en cuando saltando y dando giros con mis pies de puntillas.
-Gonna give you all my love, boy
My fear is fading fast
Been saving it all for you
Me resbalo y me levanto tan rápidamente como puedo. Diablos. Nadie me vio? Nadie. Nadie.
Sigo caminando y llego a la cabaña, en donde encuentro comida. Me como rápidamente un hoy dog asqueroso y espero no engordar porque hice un enorme esfuerzo para bajar cuatro kilos. Y... por qué estoy comiendo esto? Se ve asqueroso. Asqueroso. Sabe asqueroso.
Siento unas ganas de vomitar terribles y se amplifican cuando veo a Michelle viéndome, irritada y despectiva.
-Te queda mal ese bikini. Eres demasiado pálida para el negro. Y, en serio pensaste que a Evan le gustabas? Diablos. Si tan sólo hubieras visto tu rostro cuando te dijo.
El espasmo en mi ojo vuelve, pero esta vez es peor que todas. Me tiembla rápida e incontrolablemente.
-Diablos. Y vas caminando por ahí como si fueras tan guapa. Pareces un pollo desnutrido con tetas y culo grande. Eres tan falsa. - sonríe y se acerca a mi.
Diablos. Eso dolió. La perra tiene un poder especial en hacerte sentir mal.
Ya lo sabía. Hombre. Simplemente soy Lara Jean Langum y ella es perfecta Michelle, perfectas curvas, perfecta voz y toda ella es tan...
-Lara Jean?
Michelle me sonríe una ultima vez y entra al baño. Evan aparece, sonriendo con calidez. Idiota.
-Hola. - me dice, ahuecando mi mejilla.
-Hola... - saludo y escupo lo que queda en mi boca de hot dog.
No me importa que esté mirando, ya soy un desastre.
Me limpio con una servilleta y me voy al cuarto donde dormí ayer, no queriendo ver a nadie más.
-Qué pasó? - pregunta con voz suave.
Lo veo acercarse por el rabillo del ojo pero sigo caminando. Me toma del brazo y me gira, su rostro preocupado y sus labios ligeramente hacia abajo.
-Lara?
-Qué? - susurro.
-Qué pasó, cariño?
Le frunzo el ceño y me alejo bruscamente de él. Pero quien se cree él para decirme cariño!? Me encamino al cuarto y cierro la puerta con llave, casi corriendo ya que él me perseguía.
BOM.
Golpea la puerta una vez. Yo cierro mis ojos y, temblorosa, me encamino a mi cama, lagrimas pinchando en mis ojos.
Lara Jean Melancólica comienza a dar indicios de aparecer.
-Oh, eres tan idiota. - me susurro. -Tan estúpida y ciega. Tan vulnerable. Idiota. Eres idiota, Lara Jean.
-Abre, Lara. - murmura Evan pero lo ignoro.
-Qué haces? - la voz de Michelle se filtra por el cuarto.
Ah.
No hay competencia para Lara Jean.
Además, nunca iba a conseguirlo. Soy tan...
-Nada.
-Ah, eso no parece nada, Evan. Qué carajo estás haciendo aquí? Y no me digas nada, mierda!
-Qué te pasa? No me grites.
-Malditamente te grito, idiota!
Un gruñido.
-Vete de aquí.
-Qué haces aquí? Está Lara Jean ahí dentro?
-Y yo, qué carajo voy a saber?
Me encojo y suspiro. Idiotas.
-Ah, pues, estas recostado en esta maldita puerta, imbécil!
-No es asunto tuyo.
-Vamos.
-No iré a ninguna parte, Michelle.
-Evan, vamos, joder. No quiero que estés aquí dentro. Ven. Conmigo.
Silencio.
-No. Me quedaré aquí cuanto quiera.
-Estás...?
-Vete!
Un fuerte sonido hace que me sobresalte.
PLAF.
Qué mierda? Acaba de golpear a Evan?
Me levanto de la cama y me seco lo mejor que puedo las lagrimas y abro la puerta con suavidad.
Ah, hombre. Supongo que a Evan le va la violencia.
Están besándose acaloradamente. No sé si entrar de nuevo como toda una acobardada o salir con la nariz en alto. Evan agarra una esbelta pierna de Michelle y la envuelve a su alrededor.
Decido la segunda. No quiero quedarme a escuchar como lo hacen. Salgo del cuarto, sin observarlos y sin importarme si me escuchan.
-Mm. Espera...
La voz de Evan se apaga y sigo escuchando sus besuqueos hasta que salgo de la casa.
Bueno. Ha regresado la competencia. Cambio de opinión tantas veces... Me acerco a Giulio, pensando en que, si le importo un poco tal, vez se moleste. Si le gusto... no estoy segura.
Me siento en las piernas de Giulio, quien me abraza y veo a Luke tan lejos como para que no lo escuchen. Está hablando enojado con una pequeña chica de ojos azules. Bueno... tal vez tenga unos 24 años. Esta llorando demasiado. Paro la oreja y escucho.
-...Ahora también los miércoles. Es mi hija! Cómo puedes tratar de alejarla de mi...?
-No lo hago! - llora la chica.
-Vamos, deja de hacerte la maldita víctima, Aby! - grita Luke.
Ella se encoge y corre lejos pero Luke la toma del brazo con tanta fuerza que siento que su brazo se va a desgarrar. Me siento más recta y estoy a punto de pararme a matar a Luke cuando veo que ella le da un tremenda cachetada. Él se agarra la mejilla por una milésima de segundo y vuelve a tomarla del brazo.
-Hablaré con el abogado. No entiendo tu mierda, Luke, si tienes a varias chicas a tu lado, por qué no embarazas a alguna de ellas y me dejas en paz!?
-No seas perra!
-Déjame. Yo ni siquiera estoy segura de si Nicole es tu hija.
Abro mis ojos como platos y veo cómo Luke se encoge y parece como si lo hubieran golpeado. Hace una mueca y la suelta, viéndose dolido.
-Pues asegúrate. - gruñe él.
Ella niega con la cabeza con una sonrisa amarga.
-No. Tal vez no sea tu hija. Recuerdo que estuve con otro chico antes que contigo.
Él se muerde el labio y la aleja con una mano. Una horrible mirada n su rostro y...
Mierda.
Me siento tan mal. No debí escuchar nada. Qué metiche soy. Parezco mi madre. Giro mi rostro hacia las nubes pero noto cómo Luke y Aby voltean a verme.
Mierda.
Muerte para Lara Jean en, cinco, cuatro, tres, dos, uno...

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Preparen su funeral!
Jajaja
Voten y comenten. Yo sé que son lindas y votan pero también comenten!
P.K Martínez.

Mi Amor de Ventana      #Wattys2015Where stories live. Discover now