Curando Tus Heridas (KK, KJ, KJ y Tú)

Capítulo 45

Cuatro años después...

Kendall pov.

Veía a mi hijo escribir en su libreta, se parecía demasiado a ________, tenía su sonrisa, esa mirada profunda igual a la de ella cuando la conocí la primera vez, era su mini copia.No había rastro de que fuera hijo de Kylie, para su edad era muy inteligente e imperativo.

— Mami, ya terminé — me dio su libreta. Le gustaba resolver pequeños ejercicios, me encantaba ser su madre y enseñarle cada cosa.

— Muy bien bebé — revolví su cabello. — Ten tu recompensa — le di un dulce.

— Gracias mamá — felizmente saca el dulce de su envoltura. — ¿Cuándo conoceré a mi otra mami? — me quedo en silencio.

— Pronto mi amor, tu mami está de viaje de negocios y regresará tarde o temprano — él asiente.

No podía decirle a un niño de apenas dos años que su madre está muerta y no regresará nunca.

— En las caricaturas que veo, cada niño tiene su mamá y su papá, pero yo tengo dos mamás aunque no conozca a una más que en fotos — mira hacia el suelo.

— Ya hablamos de esto Kendall — le digo en un todo de advertencia pero sin alzar la voz.

— Porque mejor no me dices que nos abandonó, para que así no tenga la esperanza de que aparecerá algún día por nuestra puerta, mejor di que no me quiso y te dejó porque no quería cargar conmigo — comienza a llorar.

Lo abrazo y escondo en mi pecho, acarició delicadamente su cabello castaño mientras sigue llorando en mi pecho.

— Cariño, mami no nos abandonó, si por ella fuera nunca nos hubiera dejado, nunca te hubiera dejado — el sale de su escondite.

— Entonces, ¿Por qué no está aquí?, ¿Por qué no llama para saber de mí? — me mira con esos ojitos a los cuales sabe muy bien que no me puedo resistir.

— Eres muy pequeño como para preocuparte por cosas así, mejor juega, dibuja o lo que tú quieras cariño — él asiente. — Cuando llegue el momento hablaremos sobre tu mami — asiente.

— ¿Vemos Shrek 2? — pregunta con una sonrisa inocente.

— ¿Otra vez? — pregunto. — Ya has visto muchas veces esa película — se encoje fe hombros.

— Es genial esa película, además que a veces pienso que mami vendrá en tu búsqueda y a salvarte cómo Shrek con Fiona — sonríe mientras busca la película.

— Ya no dejaré que veas mucha televisión — sonríe. — Voy por palomitas y algunas golosinas más — asiente.

Cuidar de un niño de dos años sola es difícil, pero verlo sonreír o emocionado por algo era reconfortante aunque cada vez preguntaba por ________, ya no sabía cómo desviar su atención de ese tema.