Curando Tus Heridas (KK, KJ, KJ y Tú)

Capítulo 26

Hace dos años atrás...

N.U. pov.

_______ se encontraba llegando exhausta a casa cuando al abrir la puerta una pequeña persona se abraza de su pierna.

-¡Bienvenida mamá! - exclama feliz la pequeña de volver a ver a su madre después de varias horas.

-Estoy en casa mi niña - la abrazó feliz por su maravilloso recibimiento que se había hecho común en los últimos días. -¿Qué hacías princesa? - camino con ella todavía entre mis brazos.

-Jugar al té con la nana - dice feliz. -¿Quieres jugar con nosotras? - le pregunta y está no pudo negarse al ver tan hermoso brillo en sus ojos.

-Claro cariño, solo deja que me ponga algo cómodo y estaré en tu habitación lista para jugar al té contigo y nana - le beso la mejilla dejándola en el suelo para que así pudiera ir a jugar.

La pequeña asintió y fue a su cuarto corriendo feliz ya que su madre iba a jugar con ella, su mamá siempre tenía tiempo para ella y jugar.

_______ se acercó a su nana mientras ambas veían subir de lo más feliz a True.

-¿Dónde está mi esposa? - pregunta y la nana deja de sonreír.

-Ella salió después que tú mi niña y no ha regresado - dice y asiente mientras suspira.

-Dile a Landon que me avise cuando llegué, por favor - mira a la mujer mayor enfrente de ella. -Iré a ponerme algo cómodo para ir a jugar con mi hija - camina hacia las escaleras.

La nana suspira mirando como su niña desaparece por las escaleras, sabía que estaba cometiendo un error en ocultar que Khloé hacia lo mismo todos los días solo que en los otros intentaba llegar antes que la menor y si llegaba tarde siempre era la misma excusa.

Como toda mujer con un sexto sentido para predecir cosas, ella sospechaba que la rubia le era infiel a la castaña pero no podía decir nada pues sabia muy bien cuan enamorada está la castaña de la rubia y cegada por su amor siempre le creería a su esposa, por eso es que iba a reunir evidencia, no quería ver sufriendo a su niña ni ahora ni nunca, pero tenía que decirle la verdad aunque le sea doloroso.

-Ella no merece nada de ésto - susurra y se encamina hacia la cocina.

Por otro lado una ________ más relajada por el baño y la ropa cómoda se encaminó al cuarto de su pequeña hija, porque esa niña se había ganado su corazón y así no tuviera su sangre pero era su hija.

-¿Hija, estás lista? - pregunta asomando la cabeza por la puerta.

-Sí, mamá pasa - la mayor se adentró en el cuarto con demasiado color rosa para su gusto pero hacia todo lo que sea por esa pequeña. -Me puedes leer un cuento antes de dormir - le enseña el libro de cuentos infantiles.

-Claro hija - le sonríe.

-Gracias, mami era la que me leía antes de dormir pero ella ya no lo hace más - baja la cabeza.

-Pues aquí estoy yo y te leeré todas las noches un nuevo cuento, ¿Te parece? - mira a la pequeña que en un instante estaba más que feliz.

Ya que nadie le leía desde hace mucho tiempo y ella apenas estaba aprendiendo a hablar mejor, por eso atesora como nunca este momento, a su mamá.

-Bien pequeña, vamos a jugar y luego te irás a la cama, ¿De acuerdo? - la pequeña asiente.

Así ambas comienzan a jugar por toda una hora, luego la pequeña ya cansada se recostó en su cama batallando con el sueño ya que, quería que su mamá le leyera un cuento, entonces se abrazo al peluche que le había dado la misma.