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-Dijo que estaba construyendo algo, que era todo por mí

Ya era de noche, Ce había pasado la tarde buscando en los recuerdos de Billy, hasta que le mostró lo que estaba buscando.

Tenía los nervios de punta al no saber nada de mi hermano, no tenía ni idea de su paradero, dudaba de que fuese un desollado, aunque la vaga idea de que se fuera a cazar a los rusos pasó por mi cabeza.

Ellos no podían ser tontos ¿o si?

Solo esperaba que no, que fueran cosas mías y que estuviera investigando con Steve.

Esperaba que no se haya metido en problemas.

-¿Construyendo algo? ¿Hablas de los desollados? – preguntó mirando a su amiga.

-Eso debe ser

-Está construyendo un ejército como pensamos

-Si, pero no para esparcirse

-Lo construye para detener a Once

Comenté dejando caer mi cuerpo a la alfombra, sin duda no me gustaba salvar el mundo, que trabajo enorme la de los héroes que leía en comics.

-El año pasado, Once cerró el portal. Intuyo que eso lo hizo enojar

-Muchísimo

-El Desuellamentes ya sabe que ella es la única capaz de entenderlo, pero si la saca del camino

-Se acabó

-También dijo que los iba a matar a todos

-Bueno, que agradable

-Estupendo, aún no voy a la universidad y voy a morir

Me levanté de la alfombra al sentir que no había pasado bien la saliva, caminé entre los niños buscando agua en la cocina.

-Elienor…

Entré a la sala con mi vaso de agua, todos estaban en silencio mirando a la ventana.

-¿Qué sucede?

-Son, solo fuegos artificiales – respondió.

-Billy

Hice una mueca al escuchar a la chica.

-Cuando te dijo eso ¿fue aquí, en este lugar? – miró a la menor.

Ce asintió con la cabeza, dejé mi vaso a un lado sobre una repisa viendo al techo por los ruidos que se escuchaban.

-Sabe que estamos aquí

Miré a Will como los demás, sin dudarlo salimos de la cabaña caminando en fila hacia donde se podían ver los fuegos artificiales.

-Que mierda…

Murmuré viendo la cosa esa acercarse, eran enorme y avanzaba derrumbando todo a su paso.

Mandamos a los niños a asegurar la casa, fui corriendo con Nancy a buscar algo con que defendernos.

Encontré una palanca de mano, algo grande y pesada pero era necesaria, estaba feliz hasta que escuché como cargaban un arma, giré viendo a Nancy con una escopeta.

-Te llaman… Nancy la pistolera

Reí junto a la chica mientras salíamos del pequeño almacén, entramos a la casa viendo como los niños resguardaban las ventanas y puertas.

-Los quiero lejos de las ventanas y puertas

Anuncié a los niños, estos se acercaron quedando tras de nosotros con sus armas improvisadas.

-Elienor

Giré a ver a Once, ella tenía una pistola en la mano junto a una caja de municiones, a lo que lo tomé dejando la palanca que entonaré a Max.

EN OTRA VIDA || Billy Hargrove Where stories live. Discover now