-23-

2.3K 152 33
                                    

Ahí estaba él.

Con el torso desnudo y la mitad del cuerpo cubierto con la sábana.

¿Qué clase de amarre me había hecho?

Seguí admirando la tranquilidad con la que dormía, no se movía desde hace treinta minutos que salí de la cama en busca de agua, para mi suerte mamá había salido por las compras y Dustin se encontraba con los chicos.

-¿Seguirás mirándome como psicópata?

Di un leve salto al verlo recostado sobre su brazo mirando en mi dirección.

¿En qué momento había despertado?

Negué levemente con la cabeza viendo como daba palmaditas a un lado de la cama, me acosté a su lado dejando que se acurruque en mi pecho como si un niño se tratara.

-¿Por qué golpeaste a Tommy?

Pregunté dejando mi mano sobre su cabeza, pasé levemente mis dedos entre sus cabellos dando pequeñas caricias al rubio.

-Porque nadie toca a mi chica – murmuró.

Mi corazón comenzó una carrera en ese instante, con solo decir “Mi chica” hacía que algo dentro se estremeciera.

Ya había pasado una semana desde que todo mejoró con Billy, pero todo empeoró con Steve. Al castaño no le gustaba nada la relación que tenía con el rubio, había tratado de hablar más con él pero desde su última oración no me acerqué más.

Ya había pasado unos días y ya era jueves, mañana no había clase por el último juego y el funeral de Barb, en un par de semanas se iba a acabar las clases por lo que los días se hacían más pesados.

-Billy…

-Dime, nena

-¿Qué pasará cuándo me acepten en la universidad?

El rubio levantó su cabeza con una sonrisa, este se acomodó para verme mejor a lo que dejé mis manos en sus hombros.

-Te seguiré

-¿Cómo un psicópata?

-Como un maldito psicópata

Reí levemente ante su comentario, hice un leve esfuerzo para besar su frente, este hizo lo mismo dejando un beso en mis labios.

-El amarre que me hiciste funcionó – se burló.

-El obsesionado eres tú, cariño – sonreí.

-Si, yo caí primero – sonrió.

Esa sonrisa, esa maldita sonrisa que hacía que cualquiera se derritiera por él, sin duda alguna había caído, caí directamente a sus pies.

-¿El grandioso Billy aceptando que lo tengo dominado? – me burlé.

-Desde el momento que te vi… sabía que serías mía – se relamió los labios-

-Egocéntrico

-Lo soy, pero sabes – se acomodó a un lado de su chica – Siento como si la vida, el universo o lo que sea, nos une a donde vayamos, a pesar de tanta mierda siempre vuelvo a ti

-Eres todo un cursi

-Y tú una mata pasiones

Reí dejando mis manos en mi regazó.



|…°…°…°…°…°…°…|




-Steve…

-¿Dónde dejaste tu gorila? – preguntó con sarcasmo.

EN OTRA VIDA || Billy Hargrove Opowieści tętniące życiem. Odkryj je teraz