La Corporación Necesita Mujeres [BORRADOR]

Capítulo 2

°RECUERDOS Y REALIDADES°

Mi más grande meta fue y es, buscar al asesino de papá. Han pasado veinte años desde que le arrebataron la vida a sangre fría.

Eh intentado buscar la información respecto al caso de mi padre Sam Scott, pero todo fue en vano, no hay registros funerarios, registros de la morgue, no hay evidencia de ningún tipo. Nada.

Han sido siete años de búsqueda sin resultado, pero no moriré sin saber quien le arrancó la vida a un inocente agente de inmobiliario que dejó a una esposa y un hijo de siete años.

Después de mi titulación en criminologia entre a los IP gracias a un profesor de la carrera, ahí me reencontré con  James Mackenna heredero de la corporación, quien me brindó todo su apoyo para buscar la información que tanto he estado buscando.

Hemos entrado al sistema de semefo y funerarias, así como también buscado testimonios de vecinos y empleados de la empresa a la que trabajaba papá. Lo único que pude saber fue que simplemente un día ya no fue a trabajar, mamá levantó denuncia por su desaparición, denuncia que nunca fue atendida. Eso es todo.

Se que algún día podré averiguar algo más, saldrá a flote un cabo suelto que me ayudará a encontrar la verdad y al asesino de papá.

Mitras tanto que estar mi realidad que es trabajar y no estropear el caso RS. Saque todo pensamiento que pudiera generarme distracción y procedí a comprar el boleto de autobús para ir rumbo a la ciudad Sogen.

──Buenas noches, próxima salida a Sogen por favor. La rubia del mostrador me observó por unos segundos y luego observó algo en el computador.

──Sabes, el día estuvo muy agotador, quisiera salir esta noche del trabajo e irme directo a casa con un gran hombre──dijo la mujer para luego posar su vista en mi y observarme con algo de picar día. ──Puedo ir contigo si gustas──extendió el ticket hacia mi.

Cuando lo iba a tomar la mujer lo aparto de un solo movimiento.

──¿Qué dices?

Pase saliva con gran esfuerzo, no sabía que decir o que hacer. Desvié mi mirada a los lados por busca de ayuda, pero las otras mujeres estaban en lo suyo.

──No, gracias──dije. Arrebate el boleto de la mano de la chica y salí lo mas rápido que pude de la fila. Llegué hasta los asientos de espera de la terminal y cheque la hora de salida que tenía mi boleto.

04-Mayo-2020

Terminal central de Aresfield.

Destino: Sogen.

Hora de salida: 9:10 p.m. No. de asiento: 34

Era dentro de media hora la salida del autobús.

Conecté los audífonos a mi teléfono para escuchar algo de música y observe a la gente que iba y venía con sus equipaje, veía algunas familias y muchachos solos, al igual que algunas chicas. Delante de mí se sentó una mujer de aproximadamente unos 25 años, la cual se puso unos audífonos de casquillo y metió sus manos a las bolsas de su abrigo. Su mirada se entró con la mía y me regalo una tímida sonrisa. Me puse nervioso al instante así que desvíe mi mirada a otro punto de la terminal.

Siempre le eh tenido nervios al contacto femenino, mi falta de interacción con las chicas me a afectado a tal grado que si en alguna caja de cobro en los supermercados hay una chica, me cambio a una donde haya un chico.

No soy gay, he tendió sexo con dos mujeres. ──Si, hace como diez años, soquete──reprende mi conciencia.

Bueno, si hace bastante tiempo que no tengo intimidad, pero eso no me quita mi hombría. Solo que es complicado tener a una mujer cerca en todo aspecto. Se me traban las frases, me pongo muy nervioso y simplemente no me gusta estar con ellas. Son muy ruidosas, se quejan de todo, lloran por todo y no soportan a los hombres. Y no es como que tenga tiempo de invitar a salir a alguna. Los casos llegan uno tras otro en la corporación y eso me mantiene ocupado.