"¡Shen Mo! ¡Shen Mo!". A-Wen, el compañero de cuarto de Shen Mo, se asomó por un lado del camarote y llamó el nombre de Shen Mo una y otra vez.
Shen Mo asomó la cabeza desde el interior del edredón y miró la hora en su celular.
Sólo eran las nueve y media.
"Hoy no tengo clase en todo el día. ¿Por qué me despiertas tan temprano?".
Debajo de él, A-Wen se rio tímidamente.
"Sé que hoy no tienes clase. Por eso quería pedirte un favor".
Shen Mo se sentó, con el cabello corto revuelto, y preguntó: "¿De qué se trata?".
"Mi facultad va a organizar una conferencia esta misma tarde. ¿Podrías asistir por mí?".
"Oye, tú estudias economía y yo estudio arte. ¿Crees que puedo asistir por ti?".
"Sólo tienes que ir y tomar algunos apuntes por mí. Será muy fácil. ¿Sabes quién está invitado a la conferencia? Un joven empresario, un hombre exitoso que aparece muchas veces en las revistas de finanzas. Es mi ídolo".
"¿Entonces por qué no vas tú?".
"Definitivamente iría si pudiera, pero tengo un examen".
A-Wen juntó las manos, suplicando descaradamente: "Shen Mo, por favor, por favor. Te invitaré una gran comida esta noche".
Shen Mo tenía buen carácter, era un tipo agradable reconocido por todos.
Siempre le había resultado difícil rechazar las peticiones de los demás, y esta vez no fue diferente.
Se frotó el cabello y suspiró.
"De acuerdo. Mándame la hora y el lugar".
A-Wen se animó y después de darle las gracias, se apresuró a estudiar para el examen.
Ahora que Shen Mo se había despertado, no volvió a dormir. Se levantó de la cama y fue al baño.
Después de asearse y salir de su cuarto, ya había dos mensajes nuevos en su celular. Uno era la hora y el lugar de la conferencia de la tarde y el otro era de Zhou Yang, invitándolo a comer.
Zhou Yang había sido su compañero de secundaria. Ambos tenían los mismos intereses y les gustaba la pintura, pero mientras Shen Mo estudiaba arte en la universidad, Zhou Yang estudiaba administración financiera bajo la presión de su familia. Aun así, seguían siendo amigos íntimos que hablaban de cualquier cosa, y habían acordado ir al extranjero a estudiar arte después de graduarse.
Zhou Yang había vuelto a casa la semana pasada. Hacía varios días que no se veían, así que los dos fueron a un pequeño restaurante fuera del campus y pidieron algunos platillos.
Zhou Yang dijo mientras comía: "Esta tarde no tienes clases, ¿verdad? ¿Vamos a ver una película juntos?".
"No puedo esta tarde. Le prometí a A-Wen, mi compañero de dormitorio que asistiría a una conferencia en su lugar".
"¿Por qué siempre te pide que lo ayudes? Eres demasiado blando de corazón".
"Somos compañeros de cuarto después de todo. Debemos ayudarnos mutuamente".
Zhou Yang sólo pudo negar con la cabeza.
Shen Mo preguntó: "¿Y tú? ¿Ya has decidido?".
"¿Decidido qué?".
"Estudiar en el extranjero conmigo, por supuesto. No lo habrás olvidado, ¿verdad?".
"Oh, eso...". Zhou Yang hizo una pausa, aun sosteniendo sus palillos.
